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Los 6.000 documentos históricos de Torre del Compte se convierten en un libro

Octavio Monserrat sostiene un ejemplar del libro

A diferencia de muchos pueblos

A diferencia de muchos pueblos, Torre del Compte conserva intactos documentos históricos desde el siglo XVI hasta principios del XIX que dan cuenta de los hechos más significativos que vivió el municipio en la época medieval y contemporánea. Con este material, el historiador con ascendencia torrera Ovidio Monserrat ha escrito un libro que recoge las formas de vida en la localidad desde los primeros pobladores del siglo XIII hasta la Guerra de la Independencia.

El artífice de que las más de 6.000 referencias documentales que posee el municipio se conserven no es otro que Leopoldo Monserrat Valle, hijo predilecto de la localidad que, como agradecimiento a tal distinción, entregó recuperado al Ayuntamiento el archivo que encontró hace 15 años durante las obras de rehabilitación de la casa consistorial, en cuya estancia superior había documentos en mal estado.

"Vi que había material para hacer la historia del pueblo y, como estaba inédita, consideré que sería un trabajo bonito para el pueblo", explica Monserrat, historiador profesional -ahora retirado-, que fue decano de la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad de Oviedo entre 2004 y 2010. También se confiesa enamorado del pueblo de su padre, de su gente, de su paisaje y de su habla.

El libro, que fue presentado el pasado sábado en el marco de las fiestas de la localidad, se titula Torre del Compte entre la época medieval y la contemporánea. Fragmentos de la historia en un pueblo aragonés de la comarca del Matarraña. Ha sido editado por la Fundación Valderrobres Patrimonial Asunción Tomás Foz, y financiado mediante micromecenazgo. Treinta personas han aportado 100 euros por cabeza -75 pueden deducirse- y, a cambio, el autor entregará dos ejemplares a cada uno. En total, se han editado 250 ejemplares.

Los inicios

La introducción del libro recoge lo poco que se sabe sobre el desarrollo del pueblo desde sus orígenes a principios del siglo XIII. Según explica Monserrat, no se sabe a ciencia cierta la fecha de fundación de la localidad, si bien se cree que fue entre los años 1215 y 1225. Por tanto, hace unos 800 años. Se asentaron en torno a la Torre del Conde, una guarnición de vigilancia que construyó 50 años antes el rey aragonés Ramón Berenguer IV en su conquista de Alcañiz a los musulmanes.

Una vez reconquistadas, Aragón entregó estas tierras al arzobispo de Zaragoza, quien a su vez las donó a un noble laico. Torre del Compte era en ese momento una aldea de Valderrobres, como Beceite o Fuentespalda. A finales del siglo XV se independizaron todas. En 1307 el territorio vuelve a dominio eclesiástico y su señor temporal, hasta la llegada de las tropas Napoleónicas, fue durante cinco siglos el arzobispo de Zaragoza.

La Edad Moderna

El grueso de libro se centra en la Edad Moderna gracias a la abundante documentación inédita antes referida, que se complementa con documentos consultados en diversos archivos de Alcañiz, Zaragoza y Madrid. El Archivo Diocesano de Zaragoza, gracias a que ostentó el señorío eclesiástico de la zona, ha aportado ingente información.

Todo ello ha permitido aproximarse a la organización y funcionamiento del Ayuntamiento y de la hacienda local, la economía campesina (junto al cereal, la vid y la huerta destaca la importancia del olivar y el aceite), la evolución demográfica de su población, la estructura social, el desarrollo urbano, el peso de la iglesia y de la religiosidad popular, la cultura material y las formas de vida, o las actividades asistenciales y de ocio

En este tiempo, Torre del Compte levantó una magnífica casa de la villa (siglo XVI), reformó (siglo XVI) y amplió su iglesia (siglo XVIII, cuando alzó una torre barroca) y construyó diversas casas solariegas.

"La iglesia tiene tres fases de construcción. La primera fue gótica, del siglo XIV", explica el autor. La edición del libro llega justo cuando se acaba de restaurar.

Los momentos de grandes construcciones coinciden con las épocas de mayor poderío económico, explica Monserrat. "El olivo desde pronto empezó a ser muy importante. Se molía en un molino propiedad del Ayuntamiento y a finales del siglo XVIII se construyó uno privado dado el crecimiento de la producción", señala el historiador, que ha querido que en la portada del libro aparezca un olivo en homenaje a la actividad agrícola, sustento de la población durante siglos.

El ocaso de la guerra

La Guerra de la Independencia a partir de 1808 tuvo un impacto muy duro sobre el pueblo, dada la ocupación del territorio durante cuatro años por las tropas francesas de Napoleón. Este último capítulo de la publicación marca la larga y difícil transición del antiguo régimen feudal, surgido en la época medieval, a un régimen liberal, burgués y capitalista que define la época contemporánea.

Como curiosidad, en el archivo municipal han aparecido documentos en los que figura que, en nombre de Napoleón, se nombró a dos alcaldes que permanecieron un año y medio en el cargo cada uno.

Según la Fundación, se trata de una obra descriptiva y anecdótica que, sin embargo, aspira a aportar análisis y conocimientos que, en el contexto de los procesos más amplios de la época, permiten corroborar, matizar y enriquecer la perspectiva histórica general.

Autor:Marcos Navarro / Alcañiz