Los vecinos de Teruel deciden sobre el presupuesto con su participación

Los presupuestos participativos son ya una realidad en el municipio de Teruel, adelantándose así a las otras dos capitales aragonesas, que miran hacia el sur con interés después del éxito que ha supuesto el proceso puesto en marcha en julio del año pasado. Los turolenses, con sus aportaciones, han decidido inversiones para este año por valor de 735.000 euros, aunque si se suman las actuaciones que se harán con cargo a mantenimiento, esa cifra se eleva casi hasta el millón de euros. La Federación de Asociaciones de Vecinos San Fernando de Teruel pide ya que se prepare el nuevo proceso para empezar a trabajar en abril.

Apenas se han cerrado los presupuestos participativos de 2017 y el movimiento vecinal ya está pidiendo que se pongan en marcha los del próximo año. El objetivo es que no ocurra como pasó en 2016, que los meses que se habilitaron para la recogida de propuestas ciudadanas fueron los de julio y agosto cuando la gente está de vacaciones.

Esta semana pasada el Ayuntamiento de Teruel, impulsor de esta iniciativa junto con la Federación de Barrios, celebró la sesión de retorno de los presupuestos participativos para dar a conocer a la ciudadanía qué propuestas hechas por los ciudadanos se habían recogido finalmente en las cuentas municipales de este año.

Es la primera vez que se han hecho unos presupuestos participativos en la ciudad, y el proceso consistió en que todo vecino de la capital o asociación podía hacer sus sugerencias a través de los distintos buzones que se repartieron por el casco urbano y las pedanías rurales.

A partir de esas propuestas,  unos talleres en los que participaron también los vecinos que lo desearon, analizaron todas las iniciativas presentadas para priorizar mediante el consenso cuáles podían incluirse en los presupuestos con inversiones para el presente ejercicio.

Este proceso se realizó con el apoyo de una consultora externa, Geoter, y con los resultados de los análisis llevados a cabo, se pasaron las iniciativas al Ayuntamiento para que los técnicos municipales las informaran. El objetivo de esta fase era determinar si lo que se proponía se ajustaba a la ley y era posible realizarlo porque eran de competencia municipal, o si por el contrario no era posible ejecutar las inversiones planteadas.

El resultado de la consulta, pese a hacerse en los meses de verano cuando la gente está de vacaciones, fue espectacular puesto que se presentaron 738 propuestas, que tras su estudio se agruparon en 119.

El trabajo de los talleres consistió en priorizar las propuestas, de manera que al final salieron seleccionadas 81 propuestas con prioridad 1, y otras 6 con prioridad 1/2, que son las que pasaron a los técnicos municipales para su estudio.

Lo que podían decidir los ciudadanos con este proceso era sobre el 1% del presupuesto total, lo que suponía para el año 2017 la cantidad de 329.455 euros. Son inversiones con recursos propios municipales.

Al final, lo que se ha recogido en los presupuestos es mucho más que eso, puesto que ascienden a casi 1 millón de euros las actuaciones contempladas a partir de las sugerencias hechas por los propios ciudadanos en este proceso.

En total, según se explicó en la sesión de retorno que se celebró esta semana, el Ayuntamiento ha incluido en el presupuesto municipal 734.000 euros en inversiones priorizadas por la ciudadanía, frente a los 329.455 que se preveía en un principio.

Pero es que además de esa cuantía, que figura en el capítulo de inversiones, el Ayuntamiento ha decidido tener también en cuenta dentro del capítulo de gasto corriente numerosas propuestas hechas por los vecinos, con partidas destinadas al mantenimiento y conservación de la ciudad; actuaciones que abarcan desde alumbrado, arreglos en las calles, parques y jardines o señalización entre otras.

Sumando el capítulo de inversiones y el de mantenimiento la cantidad recogida en los presupuestos municipales por esta vía se eleva a 994.410 euros, que es lo que se ejecutará para poder realizar aquellas propuestas que han hecho los vecinos en el proceso participativo.

Desde la Federación de Asociaciones de Vecinos San Fernando de Teruel, su presidente, Pepe Polo, ya ha manifestado que van a pedir que se vuelva a hacer el mismo proceso de participación este año. Así lo acordó además la ejecutiva del movimiento vecinal en la reunión que tuvo el pasado jueves, en la que se decidió también pedir que se inicie con antelación, a ser posible en el mes de abril.

Desde el Ayuntamiento, tanto la alcaldesa de Teruel, Emma Buj (PP), como la concejal de Gobierno Abierto, Rocío Féliz de Vargas, han valorado estos presupuestos participativos porque en definitiva ha sido una consulta que les ha ayudado, ya que han sido los vecinos los que han priorizado las actuaciones que deben realizarse.

Féliz de Vargas mostró su “satisfacción” por el buen resultado del proceso. Recordó en este sentido que el equipo de gobierno hizo una “apuesta muy importante” por sacar adelante esta iniciativa de participación vecinal para la elaboración de los presupuestos participativos que ha sido pionera en Aragón.

“A pesar de ser una experiencia piloto, la gente está muy satisfecha, mejoraremos en la medida que haya que hacerlo y si desde la Federación opinan que este es el mejor proceso que se ha seguido en Aragón, pues la verdad es que la satisfacción todavía es mayor”, comentó la concejal.

Por su parte, el presidente de la Federación de Barrios, Pepe Polo, aseguró que el proceso había sido “importante e interesante”, y que así ha sido visto también por otros procesos participativos que hay en el resto de la Comunidad Autónoma.

“Ha sido una experiencia que ha salido positiva, y esto es como una lluvia fina”, comentó el representante vecinal, quien reconoció que le gustaría que más gente participara, “pero tenemos la sociedad que tenemos y es difícil influir en la participación”. No obstante, recalcó en que “como lluvia fina tendremos que seguir insistiendo después de haber abierto una puerta importante que no vamos a cerrar”.

Un proceso abierto 

Era la primera vez que se hacía y toda la ciudad ha podido participar. Quienes no lo han hecho ha sido porque no han querido. Aunque las 738 propuestas que se presentaron es una cifra considerable, la participación en los talleres fue mucho más discreta.

La importancia de estos talleres residió en que los vecinos debían priorizar en ellos las prioridades que tenía la ciudad a partir de las propuestas hechas por los ciudadanos. No se trataba por tanto de defender los planteamientos que cada cual hacía, sino de consensuar entre todos las cosas que realmente eran prioritarias para la ciudad, de ahí el éxito del proceso.

Tras la valoración hecha en los talleres de las 119 propuestas estudiadas, ya que se agruparon al ser muchas de ellas similares, se fijó una puntuación para indicar el grado de prioridad de cada una de ellas.

En 81 de los casos estudiados se valoró que las propuestas debían ser priorizadas con el valor 1, y otras 6 con un valor 1/2. Han sido esas las que al final se han tenido en cuenta para los presupuestos participativos.

Según ha informado el Ayuntamiento, las propuestas informadas suman aproximadamente 1,1 millones de euros, de las cuales la mayor parte corresponde al área de infraestructuras con un valor total de 730.200 euros. Le siguen por cuantificación económica las de medio ambiente (200.400 euros), deportes (87.100 euros), y otras agrupadas como varios (82.000 euros).