Síguenos

Noé (alcalde de Ariño): “Es el último asalto, nos jugamos el futuro de las comarcas mineras”

"Estamos en el último asalto, nos jugamos el futuro de las comarcas mineras", sentenció ayer el alcalde de Ariño, Joaquín Noé, durante su turno de palabra en la asamblea de la Asociación de Comarcas Mineras (Acom) de España un día después de conocerse los 33 despidos en Villajos, la contrata de Samca a cielo abierto que perderá el turno de noche por las malas previsiones de venta de carbón que tiene la compañía matriz para este año.

"Estamos en el último asalto, nos jugamos el futuro de las comarcas mineras", sentenció ayer el alcalde de Ariño, Joaquín Noé, durante su turno de palabra en la asamblea de la Asociación de Comarcas Mineras (Acom) de España un día después de conocerse los 33 despidos en Villajos, la contrata de Samca a cielo abierto que perderá el turno de noche por las malas previsiones de venta de carbón que tiene la compañía matriz para este año.

"Cuando me llamó Samca y me dijo que iban a tomar decisiones no me esperaba que fueran a ocasionar 33 despidos", reconoció Noé, quien aseguró que había visto "despidos concretos y puntuales, pero esto no había pasado nunca", por lo que calificó la situación como un "mazazo" para la cuenca minera que se suma al anuncio de Endesa de prescindir de 42 empleados en la térmica.

Hasta ahora Aragón escapaba de la situación general de crisis en el sector del carbón debido a la competitividad de las empresas carboníferas turolenses que operan a cielo abierto y la eficiencia de la térmica de Andorra. Sin embargo, la falta de regulación del sector a nivel estatal desde hace un año y el silencio de Endesa en cuanto a la inversión en la central se están cobrando las primeras víctimas.

"Samca podría pasar de extraer 1,2 millones de toneladas en 2015 a tan solo medio millón este año", dijo Noé. "Con esta reducción tan drástica, con el carbón de la mina de interior y el pequeño cielo abierto de Foz Calanda prácticamente ya se llega", indicó el alcalde de Ariño.

Con el cierre de la mina de interior el 31 de diciembre de 2016 "pensábamos que los mineros podríamos recolocarnos en el cielo abierto, pero si allí empiezan a despedir a los trabajadores el futuro es, más que nunca, más negro que el carbón", sentenció Noé.

Por tanto, "estamos en el último asalto" para salvar el sector. Para ello, la asamblea de Acom acordó ayer por unanimidad de los alcaldes presentes exigir el cumplimiento del Plan del Carbón 2013-2018 así como que el secretario de Estado de Energía, Alberto Nadal, reciba con carácter inmediato a los alcaldes.

Batería de exigencias

En la reunión celebrada ayer, los alcaldes aprobaron un documento estructurado en seis puntos, tres con referencia al sector y otros tantos a las comarcas mineras.

En cuanto al sector, exigen el cumplimiento íntegro del plan, acordado por el Ministerio de Industria, los sindicatos mineros y los empresarios, convocando con "carácter inmediato" la Comisión de Seguimiento, órgano que lleva seis meses sin reunirse.

Acom también reclama al Gobierno que se respete el 7,5 por ciento de consumo de carbón autóctono en el mix energético nacional y que se implante el mecanismo que garantice la quema de mineral en las centrales térmicas.

Además, insta al Ejecutivo central a que defienda ante la UE el mantenimiento de un régimen de ayudas al carbón que asegure la continuidad del sector minero.

En este aspecto, reclama la revisión de la decisión europea 787/2010 en referencia a la devolución de ayudas y la recuperación de concepto de reserva estratégica, cuestiones que Acom-España planteará también en el ámbito de la asociación a nivel europeo (Euracom).

En el apartado de las comarcas mineras exige al secretario de Estado de Energía que reciba con carácter inmediato a una representación de alcaldes de la asociación, al objeto de evaluar la compleja situación.

Otra reivindicación apunta que se articulen cuantos instrumentos sean necesarios para la puesta en marcha de las ayudas destinadas al desarrollo alternativo de las comarcas mineras.

Por último, Acom demanda al Gobierno de España el abono de los pagos adeudados a las distintas administraciones públicas, entre ellos a numerosos municipios mineros, relativos a los fondos para la reactivación de los planes de la minería anteriores.

Problema serio de despoblación

El consejero de Presidencia, Vicente Guillén, reiteró ayer la petición del Gobierno de Aragón al Ministerio de Industria para que articule "una salida, que es la que nosotros (el PSOE) arbitramos en 2010 con un decreto de garantía de suministro para hacer del carbón un sector estratégico. Si eso no se hace y no hay ayudas para la central, casi con seguridad la empresa no va a invertir y cerrará en 2020", expuso Guillén, quien culpó de los despidos en la mina al Gobierno porque "el plan de la minería no se está cumpliendo".

El consejero cogió el guante del comité de empresa de Endesa, que el miércoles le pidió una Mesa del Empleo desde la que "intentar lanzar un proyecto de reactivación de las cuencas mineras". De no ser así, "tenemos un problema muy serio de despoblación y en un sector económico clave para la provincia", asumió Guillén.

Industria destina 11,3 millones para cerrar minas en Aragón

El Ministerio de Industria, Energía y Turismo resolvió ayer destinar 15 millones de euros en ayudas para facilitar el cierre de minas no competitivas de carbón nacional. Las subvenciones van destinadas a cubrir costes excepcionales del cierre de unidades de producción de carbón. En concreto, las empresas que han obtenido ayudas son Hulleras del Norte (3,69 millones de euros), Endesa Generación (8 millones) y Carbonífera del Ebro (3,28 millones).

El responsable de minería de Fitag-UGT en Aragón y trabajador de la mina de Mequinenza, Francisco Montull, dijo que la ayuda llega año y medio después de que se iniciaran los trabajos de restauración, por lo que Carbonífera ha tenido que ir vendiendo maquinaria para poder pagar las nóminas de los trabajadores.

Endesa Generación, que con estas ayudas trabajará en los cielos abiertos de la Comarca-Andorra Sierra de Arcos que dejó de explotar recientemente, ha tenido menos problemas dada la solvencia económica de la filial en España del Grupo Enel.

Autor:Marcos Navarro / Alcañiz