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La consulta popular en Beceite sobre el toque de las campanas se suspende tras desistir el empresario que se quejaba del sonido por las noches La consulta popular en Beceite sobre el toque de las campanas se suspende tras desistir el empresario que se quejaba del sonido por las noches
Imagen de Beceite. Archivo

La consulta popular en Beceite sobre el toque de las campanas se suspende tras desistir el empresario que se quejaba del sonido por las noches

Ha dado la orden a su abogada de desistir en su demanda
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Las campanas de Beceite van a seguir tañendo de día y de noche, marcando las horas y los cuartos, porque el propietario del alojamiento rural que llevó al Ayuntamiento de la localidad turolense del Matarraña a solicitar una consulta popular ha dado la orden a su abogada de desistir en su demanda.

El zaragozano José Antonio Nieto, propietario del alojamiento rural que pidió el cese nocturno del toque de las campanas, ha confirmado a Efe que este mismo jueves van a comunicar al alcalde, Juan Enrique Celma, la decisión que ha adoptado junto a su mujer, "que prefiere que no salga su nombre porque ella y su familia son de Beceite", de no seguir adelante con lo que ha asegurado que fue "una petición o sugerencia, en ningún momento una exigencia".

"Nosotros la damos por concluida. Le he pedido a nuestra abogada que hable con el alcalde para retirar la petición visto el apoyo masivo que tiene por parte de los vecinos que sigan tocando las campanas de día y de noche", ha afirmado.

Nieto ha asegurado que quieren dar por zanjado cuanto antes este asunto que les ha sorprendido por "la gran repercusión mediática que ha tenido", aunque también ha explicado que las mediciones que han realizado en su alojamiento rural, casa en la que "vivo y duermo", están por encima de las que marca la legalidad.

Por ello considera que lo que cometieron fue "un error de planteamiento" porque los cauces que deberían haber seguido serían los de haber exigido al Ayuntamiento que cumpliese la normativa autonómica antirruidos y "si tiene que parar o atenuar las campanas por la noche, hágalo".

Nieto y la familia de su mujer, que han vivido siempre en la Plaza del Ayuntamiento, conocen lo que es el sonido de este instrumento sonoro de bronce con el que les ha tocado convivir pero que "todos los vecinos de Beceite", como han confirmado a EFE tanto residentes como personas con segunda residencia, quieren que siga.

La queja podría tener su origen en la reciente reforma integral llevada a cabo en la iglesia barroca de San Bartolomé, que se aprovechó para recrecer el campanario, de acuerdo con el del templo original del que ya había constancia en el años 1210, y bajar y afinar las campanas "que antes tenían un sonido a lata y ahora están en su máximo esplendor", ha explicado Nieto.

Nieto ha reconocido que apenas había tenido quejas de los clientes del establecimiento pero consideraba que era una propuesta buena para el pueblo, lo que ha quedado desmentido con la postura de los vecinos que "quieren que sigan sonando de día y de noche y así será".

El Ayuntamiento de Beceite será el que tome la decisión definitiva, ya que según explicó a Efe Juan Enrique Celma estaba a la espera de recibir las instrucciones de la Subdelegación del Gobierno después de que el Consejo de Ministros le autorizase el pasado viernes 26 de junio a la celebración de una consulta popular sobre el cese o no del toque de campanas entre las 23.00 y las 8.00 horas.

El Consejo de Ministros permitía la consulta popular "sin perjuicio del necesario cumplimiento del ordenamiento jurídico" municipal y autonómico.

Así indicaba que la jurisprudencia considera competencia propia municipal en relación al "medio ambiente urbano y, en particular, a la protección contra la contaminación acústica (…) en las zonas urbanas" y en "ámbitos materiales respecto de los que el municipio ejercerá, en todo caso, competencias propias en los términos de la legislación del Estado y de las comunidades autónomas".

Recuerda que dentro de la normativa de protección frente al ruido hay que destacar las directivas europeas sobre evaluación y gestión del ruido, así como la ley estatal del ruido y la de contaminación acústica de Aragón.

Que trata, prosigue en la referencia, "expresamente de las ordenanzas municipales y establece que corresponde a los ayuntamientos la elaboración y aprobación de ordenanzas municipales sobre la contaminación acústica".