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Espejismo: la térmica de Andorra vuelve a humear entre los despidos de las subcontratas Espejismo: la térmica de Andorra vuelve a humear entre los despidos de las subcontratas
La central térmica de Andorra volvió ayer a humear con la reactivación del grupo1 para toda esta semana

Espejismo: la térmica de Andorra vuelve a humear entre los despidos de las subcontratas

Los trabajadores de Endesa y de las empresas auxiliares exigen certidumbres
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La central térmica de Andorra vuelve a funcionar esta semana, pero es tan solo un espejismo que durará apenas hasta el viernes, cuando está previsto que Endesa dé carácter oficial a la desconexión de la planta del sistema eléctrico español con la visita del director general de la multinacional en Aragón, Ignacio Montaner. Se espera que dé certidumbres a  sus 122 trabajadores, así como al centenar largo que queda en las contratas y que está esperando a la convocatoria de los cursos de formación para el desmantelamiento de la instalación y el montaje de los parques fotovoltaicos que la eléctrica propone como alternativa económica pero que el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico sigue sin aprobar. 

La última vez que funcionó el grupo 1, el pasado febrero, Endesa ya advirtió de que no era el fin de la actividad. Quedaban  25.000 toneladas de carbón que antes de ir al vertedero de forma ilegal deben consumirse por poco que Endesa pueda sacar de ellas en la subasta diaria.

La última arrancada se produjo ayer a las 9 de la mañana, según apuntó el presidente del comité de empresa de Endesa, Hilario Mombiela, quien destacó que la puesta en marcha ha movilizado a operarios que durante la pandemia han estado de guardia pero en casa a turnos rotatorios. 

Mombiela cifró en 122 los operarios de Endesa que quedan todavía, lo que evidencia que el plan de salidas y recolocaciones va con retraso. “El 60 o 70% del personal tiene de 50 años para arriba. Todos los días consultamos por ello a la dirección, pero esta se remite a lo que le dicen de Madrid. Hasta el 30 de junio no esperamos  demasiadas certezas”, dijo. 

Desde que Endesa anunció el cierre de la planta hace año y medio apenas han salido una veintena de compañeros en dirección a Melilla, Madrid, Zaragoza, Cataluña o Extremadura, explicó Mombiela, quien lamentó que las únicas opciones de recolocación claras sean para ingenieros.

En Maessa, la contrata de mantenimiento, ya tienen firmado el ERE, con recolocaciones que en cuatro de 20 casos serán fallidas, pues estaban contempladas para la planta de aluminio de Alcoa en Lugo. “Por suerte todas las salidas son a partir del 30 de junio, así que todavía se pueden acoger al despido colectivo”, que fija indemnizaciones de 29 y 21 días por año, explicó el presidente del comité, Pedro Miñana. 

Nervión negocia su ERE

Ayer mismo, día en que se producía el espejismo de la reactivación de la caldera del grupo 1, los delegados sindicales de Nervión en Andorra y Cubillos del Sil (León) comenzaban a negociar un despido colectivo para un total de 49 empleados (24 de ellos en la central turolense).

Sin embargo, la empresa “no nos ha presentado ningún papel como que Endesa le rescinde el contrato el 30 de junio”, desveló el presidente del comité, Ángel Villén, por lo que por el momento “no puedes avanzar mucho si no te presentan la documentación correcta”.

El secretario de Acción Sindical de la Federación de Servicios de UGT Aragón, Esteban Lauroba, aseguró que el contrato acaba en agosto de 2020 y que lo harán cumplir porque “no hay una resolución administrativa para el cierre de las dos centrales”.

“En derecho todo hay que basarlo en la certeza, y ni es cierto que el Gobierno haya autorizado el cierre ni Endesa Generación ha comunicado formalmente a Nervión que deja de prestar servicios el 30 de junio”, zanjó, por lo que “a día de hoy no concurre causa fundada”. La próxima reunión está prevista para el 8 de junio. 

La negociación de Nervión escenifica a la perfección la “incertidumbre total” que, según Villén, sienten los trabajadores. “Tenemos faena aquí para más de un año, porque hay que limpiar los grupos 1 y 2 y toda la campa de carboneo, pero en cambio nos quieren despedir cuando hay un acuerdo firmado entre el Gobierno, los sindicatos y las propietarias de las centrales para que aguanten a los trabajadores de las subcontratas en los trabajos de desmantelamiento”, expuso el enlace sindical.

A este sentimiento de “ninguneo” se suma la “nostalgia porque piensas que estos son los últimos días que la central, que tanto trabajo ha dado a la comarca, echa humo, y que nos vamos a ver en el paro después de toda una vida trabajando aquí”. 

“¿Qué va a ser de nosotros? No sabemos nada de los cursillos ni de las empresas que supuestamente iban a venir. Mantenemos esperanzas, pero hasta ahora solo hemos visto parsimonia”, denunció Villén. 

Endesa espera iniciar los cursos entre finales de junio y principios de julio, en la ansiada nueva normalidad. Se espera que el viernes Montaner dé detalles tanto del desarrollo de los cursos como del desmantelamiento. 

IU pide que el Inaem seleccione al personal para el desmontaje

IU Aragón exigió ayer “compromiso y responsabilidad a Endesa y al Inaem con los trabajadores” de la central y de las auxiliares. Su portavoz en las Cortes, Álvaro Sanz, destacó que “no se puede dejar en manos de la empresa adjudicataria que seleccione al personal que considere, puesto que se corre el riesgo de los empleos sean para personal externo”.

“Estamos ya en la cuenta atrás para el cierre de la central y no sólo carecemos de un plan de reactivación industrial serio a medio plazo”, sino que “tampoco se ha puesto en marcha la formación para que los empleados puedan ser contratados en el desmantelamiento”, criticó Raúl Romero, concejal de IU en el Ayuntamiento de Andorra. Su compañero, David Villanueva, pidió al  gobierno del consistorio (PSOE-PAR) “que sea totalmente contundente” e inste a cumplir lo pactado a todas las instituciones.