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Lucía Golpe González, genealogista: “Todos descendemos de las mismas familias y yo he hallado el hilo hasta el Cid”

“Muchas de mis vacaciones han sido ir de archivo en archivo, no viajaba en el espacio sino en el tiempo”
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Cruz Aguilar

Lucía Golpe González es de La Coruña y hace 22 años decidió comenzar a trazar su árbol genealógico, en el que llegó hasta el mismísimo Cid Campeador. En la edición número XXII de la llegada del Cid a El Poyo, que se celebró de forma virtual, ofreció una conferencia explicando cómo se desarrolló su investigación.

-¿Por qué investigó sus orígenes?

-Desde pequeña siempre he tenido la intriga de saber de dónde venimos. Hay una casa de mi familia en una aldea gallega que es muy antigua, pero no sabíamos ni de qué época era y comenzó por ahí. Empecé a preguntar por la familia, luego supe que a través del Registro Civil se podían obtener los certificados, hace 22 años empecé a hacer el árbol genealógico y fue como un puzzle, una cadena que vas uniendo eslabones y es adictivo, no quieres parar.

-Viajó incluso al extranjero para seguir rastreando, ¿no es así?

-Mi abuelo materno nació en La Habana y, cuando llegué a él no tenía forma de continuar porque su madre era nacida en La Habana, así que hace diez años fui  con una tía mía a buscar en los archivos, pasamos casi dos semanas de iglesia en iglesia buscando información. En principio no aumentábamos muchas generaciones pero teníamos el dato de una tatarabuela mía, sabíamos que su padre tuvo un pleito con un marqués y, cuando encontramos esa documentación, vimos que venía mucha información genealógica, de varias generaciones. A través de ahí, buscando en páginas de genealogía me coincidían estudios de personas de mi árbol con los de otras personas que ya lo habían hecho y avancé mucho en la investigación.

-Y en ese rastreo encontró su parentesco con El Cid.

-Encontré parentesco también con muchos reyes, pero ese enlace con el Cid me hizo mucha ilusión, me hizo gracia que  fuera mi antepasado, aunque todos descendemos de las mismas familias lo que pasa es que yo he encontrado el hilo para demostrarlo.

-¿Cuántos saltos hay que dar para llegar hasta el Cid?

-Me separan 33 generaciones, justo diez siglos.

-¿De cuál de sus hijas viene?

-De Cristina.

-¿Esperaba llegar tan lejos?

-Qué va, llevaba tantos años haciéndolo y subir una generación para mí era toda una emoción, una pieza del puzzle, de repente con ese pleito subí un montón de generaciones. Hasta ese momento solo había llegado a la generación número 13, había ido pasito a pasito y di ese salto, vi que estaba todo hecho, al menos por esa parte. Por aquí por Galicia puedo seguir todavía, pero también depende de cuánto se han movido, si han tenido algún pleito por un trozo de tierra, aquí en Galicia hay muchos pleitos por temas de lindes y en ellos hay mucha información genealógica, son ideales para un genealogista para encontrar antepasados. 

-Encontró su vínculo con el Campeador en Cuba, ¿eso cómo se explica?.

-Mis antepasados de Cuba fueron de las cinco primeras familias que llegaron a La Habana y dar el salto a España fue muy fácil porque los primeros pobladores están ya registrados en los libros de historia. En La Habana fui subiendo las generaciones hasta esas primeras familias que poblaron La Habana, de hecho uno de mis antepasados se casó con una india de allí, hija de un cacique de La Habana. Tengo muchos antepasados muy famosos pero que no los conozco, además yo soy de ciencias y nunca se me dio bien la historia, sé que hay muchos antepasados ilustres en mi árbol.

-Y ahora que ya sabe parte de  la historia de su familia, ¿con cuál se va a poner?

-La rama de mi madre fue la fácil, ahora estoy con la de mi padre, que es 100% gallega, no me tengo que mover de aquí, pero es algo que no se deja nunca, ahora tengo poco tiempo y hace mucho que no avanzo, pero creo que cuando me jubile volveré, siempre que tengo tiempo lo hago, me da por épocas. Muchas de mis vacaciones han sido ir de archivo en archivo, no viajaba en el espacio sino en el tiempo, luego me iba a un balneario y ordenaba la información, es un hobby muy solitario, pero me gusta. Esto no se acaba nunca porque es una progresión geométrica, se va multiplicando todo por 2, obviamente van a coincidir ramas por ahí, pero nunca acabas.

-¿A qué se dedica profesionalmente?

-Ahora acabo de aprobar unas oposiciones para la Administración del Estado, pero he hecho de todo y siempre pienso que si me hubiera dedicado a la genealogía me hubiera ido mejor

-¿No tiene ninguna formación al respecto?

-No, todo fue sobre la marcha de hecho cuando empecé año 97 o 98 en internet no había nada, cuando empecé ya era tremendo encontrar un teléfono de un archivo. Me leí un libro sobre cómo hacer un árbol genealógico, con el tiempo empecé a saber que había más información a parte de los certificados de bautismo o nacimiento, matrimonio y defunción. También hay muchos datos en pleitos, inventarios, expedientes de educación… hay más información de lo que creemos. Si te fijas cuantas veces rellenas papeles con tus datos y todo eso es información para el futuro sobre nosotros. 

-¿Internet se lo pondrá más fácil a los genealogistas del futuro?

- Muchísimo más fácil, cada vez hay más archivos digitalizados, cada vez hay más información en internet.

-¿Cuándo se considera que un árbol genealógico está completo?  

-Cada uno se pone sus límites, yo no buscaba nada en concreto, quería saberlo todo, hay gente que busca algún lazo con la nobleza, yo siempre eran familias de aldeas, fue la casualidad de Cuba, que me dio una gran cantidad de información.