¿Has escuchado hablar de la kombucha pero no sabes qué es, para qué sirve o cuáles son sus beneficios? A continuación te damos una serie de detalles.
Qué es la kombucha
Recibe el nombre de Kombucha a un tipo de bebida probiótica realizada a partir del té negro endulzado que se fermenta a través de levaduras y bacterias beneficiosas para la salud, siendo una bebida muy beneficiosa para el sistema digestivo. Se trata de una bebida que cuenta con un método de elaboración muy similar al del yogur casero y al del kéfir, pero su ingrediente principal es el té negro y no la leche.
En concreto, los ingredientes que se pueden encontrar con mayor frecuencia y proporción en la kombucha son el té negro y el azúcar blanco, aunque también se puede emplear té verde, mate, zumo de frutas y jengibre si se busca un sabor algo más dulce y con un punto exótico.
Beneficios de la kombucha
Si te preguntas cuáles son los beneficios de la kombucha más destacados, toma nota porque te los detallamos a continuación.
Efecto saciante
La kombucha tiene un importante efecto saciante, por lo que regula el apetito y, por tanto, ayuda a mantener el peso a raya. Tan sencillo como que tendrás menos hambre y comerás menos.
Beneficioso para el sistema digestivo
La kombucha es una bebida beneficiosa para el sistema digestivo. Por un lado, ayuda a combatir la gastritis, eliminando la bacteria causante de esta dolencia; la H. pylori del organismo. También contribuye a prevenir infecciones intestinales, eliminando precisamente todo tipo de bacterias y hongos. Además la kombucha regula el tránsito intestinal y ayuda a mantener el equilibrio de la flora intestinal.
Es una bebida con poder antioxidante
Se trata de una bebida con un destacado poder antioxidante, además se encarga de fortalecer el sistema inmunitario mediante los polifenoles. Se trata de la bebida perfecta para combinar con una alimentación sana y rica en fibra.
Propiedades estimulantes
La kombucha puede sustituir al café puesto que cuenta con propiedades estimulantes que ayudarán a mantenerse más activo, esto es así porque también cuenta con cafeína. Además ayuda a mejorar la concentración y potencia la memoria.
Es una bebida baja en calorías
La kombucha es una bebida baja en calorías. Apenas cuenta con 30 calorías por cada 100 ml, por lo que es perfecta para tomar una buena bebida sin tener que recurrir a los refrescos realizados de manera industrial. Apostar por los buenos procesados es fundamental para cuidarte por dentro y por fuera.
Cómo seguir una dieta saludable
Seguir una dieta saludable no es difícil si se respetan estos pasos que, a continuación detallamos y en los que no puede faltar la kombucha.
Más frutas y verduras y una ingesta controlada de hidratos
Es fundamental que comas un total de cinco piezas de frutas y verduras al día. Comienza desde el día con energía y con azúcar natural como la que te aporta la fruta. Para ello no dudes en sustituir los snacks poco saludables por piezas de fruta
Tampoco es aconsejable que consumas en exceso carbohidratos, regula la ingesta de pasta o arroz y en la medida de lo posible intenta que siempre sean integrales, que cuentan con un contenido en fibras.
Reduce la cantidad de sal y de alimentos procesados
Hay que evitar el consumo de ultraprocesados y alimentos industriales. Este tipo de alimentación presenta, por lo general, una cantidad bastante más alta de sal, azúcares y grasas, siendo mucho mejor que cocines tú en tu casa con ingredientes de primera calidad. Este sencillo gesto te ayudará también a reducir la cantidad de sal que ingieres al cabo del día.
Apuesta por métodos de cocina saludables
No es lo mismo freír un pescado que cocinarlo al vapor. En la medida de lo posible lo más recomendable es que apuestes por métodos de cocina saludables en los que no tengas que usar abundante aceite hirviendo. Apuesta por cocinar a la plancha, hacer productos al vapor o al horno.
Personaliza tu dieta
Si hacer una dieta te supone un gran esfuerzo porque no te gusta lo que comes y demás acabarás abandonándola antes. Precisamente mediante los métodos de cocina diferentes puedes ya reducir la cantidad de calorías que ingieres. También puedes intentar adaptar los productos que tomas a algunos que sean más de tu preferencia siempre que intentes mantener un buen equilibrio. Además es importante que comas entre 4 y 5 veces al día y raciones más pequeñas. Así te mantendrás saciado todo el tiempo.
