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Alba Lorente abre el Salvador Victoria a los titulados de Bellas Artes de Teruel Alba Lorente abre el Salvador Victoria a los titulados de Bellas Artes de Teruel
El círculo, figura icónica en la pintura de Salvador Victoria, ha servido a Alba Lorente para rendir homenaje al artista rubielano

Alba Lorente abre el Salvador Victoria a los titulados de Bellas Artes de Teruel

‘Acumen’, la muestra de la joven artista zaragozana, se inaugura este sábado en Rubielos de Mora
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Cruz Aguilar

Acumen –palabra inglesa que significa perspicacia, ingenio y astucia– es el título de la exposición que desde este sábado 10 de abril y hasta el 20 de junio acoge el Museo Salvador Victoria de Rubielos de Mora, que por primera vez y a través de la artista zaragozana Alba Lorente, se abre a una graduada en Bellas Artes del Campus de Teruel.

El comisario de la muestra, Ricardo García Prats, relató que conoció su obra en exposición Resquicios, en el Torreón Fortea de Zaragoza a principios de 2020 y le recordó “a la primera etapa de Salvador Victoria en París”. Pero además, observó en la joven artista ese ingenio y perspicacia que ahora da título a la muestra.

Precisamente la obra A Salvador Victoria, 2021, realizada de forma expresa para esta exposición en Rubielos, es un homenaje al artista rubielano y en ella el círculo, icono de Victoria, es el elemento principal, aunque con otras texturas y con los tonos blancos, negros y grises que caracterizan la paleta de Lorente. 

El comisario de la muestra y director del museo detalló que Lorente le recordó a Victoria sobre todo en esos cuadros de París en los que el turolense “usaba colores oscuros, con predominio del negro”, que es algo que también hace la artista de Zaragoza. Alba Lorente confiesa que Salvador Victoria es uno de sus referentes artísticos, según comentó ayer García Prats.

El comisario de la muestra y director del centro de arte contemporáneo, especificó que el objetivo del museo es por un lado mostrar el trabajo de artistas de reconocido prestigio y, por otro, ofrecer un espacio a otros que, “como Alta Lorente tengan, a pesar de su juventud, un curriculum interesante y que podemos asegura que tienen una proyección importante”.

Destructivismo de los 60

La obra de la artista aborda la estética fundamentada en los artistas destructivistas latinoamericanos de principios de los 60. Alba Lorente plantea la destrucción como creación, no solo de una imagen, sino de una metodología de comprensión antropológica que le ayude a entender “las pulsaciones tanático destructivas que todo individuo puede sentir a lo largo de su vida”, reza el catálogo. 

Sus piezas, como se podrá ver a partir de este sábado en el Museo Salvador Victoria de Rubielos de Mora, se logran a base de romper y deformar la materia con la que trabaja y donde las texturas son predominantes. Las obtiene a través de raspados en la tinta o pintura y roturas en el papel. También realizando formas onduladas en el papel, con las que logra la idea de volumen y que sus pinturas adquieran un aspecto más de relieve o escultura. 

Texturas

García Prats especificó que esas texturas son el producto de esa tendencia del arte destructivo, “destruir para crear”, detalló. Así, como podrán ver los aficionados al arte en Rubielos, en alguna de sus obras pinta la superficie de tinta china y luego la estira, retira el papel y deja “una combinación artística sorprendente entre lo que queda de tinta china y el papel que surge debajo”, comentó el comisario de la exposición, que se inaugura a las 12:30 horas en el Museo Salvador Victoria.

Alba Lorente tiene en el arte la forma de expresar sus inquietudes, una vía de escape que materializa a través de texturas y tonalidades en gris, ya que en muchas de ellas parten de la tinta china sobre papel, cartón o incluso chapa o lino. 

“El arte destructivo como circunstancia social y como método creativo son los parámetros donde se desenvuelve la artista”, especificó Ricardo García Prats. El concepto de la destrucción apareció en el año 2018 en sus obras y pronto se dio cuenta de que esos impulsos destructivos le llevaban a crear piezas con las que se sentía identificada y, además, conectaba con el espectador, que podía verse reflejado en ellas. 

La artista, siguiendo el planteamiento de destrucción constructiva, realiza dibujos y esculturas donde se aprecia el proceso, el tiempo y la acción creativa.