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Carlos Pardos, pintor e ilustrador: “Lo más sencillo para llegar a más gente es con un dibujo lo más preciso posible” Carlos Pardos, pintor e ilustrador: “Lo más sencillo para llegar a más gente es con un dibujo lo más preciso posible”
Pardos ilustra los libros sobre la Laguna de Gallocanta, "La grullita y el muñeco" y "Las lágrimas del Endorro"

Carlos Pardos, pintor e ilustrador: “Lo más sencillo para llegar a más gente es con un dibujo lo más preciso posible”

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Carlos Pardos es un pintor y activista cultural natural de Gallocanta, aunque vive en Daroca. Forma parte de la Asociación de Amigos de Gallocanta, igual que Carmina Franco y Ana Fuertes. Recientemente decidió ilustrar sus libros La grullita y el muñeco y Las lágrimas del Endorro, con imágenes realizadas a partir de tintas y acuarelas. 

-¿Cómo son las ilustraciones que ha utilizado en los libros?

-Cuando un texto es bueno, enseguida visualizo las imágenes. En el caso de Las lágrimas de Endorro, era una historia sobre el origen de la laguna, contada de una manera sencilla. Además, lo escribe Carmina Franco que también es de Gallocanta. Esas ilustraciones me salieron un poco más salvajes que el otro, que es La Grullita y el Muñeco, enfocado a un público más infantil y más global. El primero es más local, más técnico en cuanto a la cuenca endorreica, mientras que La Grullita y el Muñeco, escrito por Ana Fuertes de Monreal del Campo, es la historia de la nieve, de un muñeco de nieve y de una grulla que ayuda al muñeco a que no se derrita. Es una historia como más fina. Con lo cual fue un trabajo un poco más elaborado. En total son unas diez ilustraciones en cada cuento.

-¿Cómo ha sido el proceso de ilustración?

-Como soy de Gallocanta no me ha resultado difícil. El proceso de ilustración, sea con estos textos o con otros, es meterte en la literatura del texto. Trabajar las imágenes en función de la literatura, en función de la poética, de lo que dice el texto. No puedo hacer independientemente un imaginario separado del guión. Y como vengo del mundo de la pintura, he pintado miles de grullas. He hecho trabajos de ilustración más técnicos, más artísticos o más libres, he hecho de todo. Entonces sería muy fácil coger un puñado de imágenes y acoplarlas de alguna manera, pero eso para mí no es ilustrar. Ilustrar es básicamente ceñirte estrictamente a un guion y trabajarlo.

-¿Qué estilo utiliza en estas ilustraciones?

-Básicamente utilicé tintas y acuarela. En algunas ocasiones utilizo collage, técnicas más contemporáneas o más modernas, pero en este caso es una ilustración más clásica. Lo más sencillo para llegar a más gente era con un dibujo lo más preciso posible, con mucha expresividad y con oficio.

-¿Cómo surge la idea de ilustrar estos libros?

-Nosotros somos miembros de la Asociación de Amigos de Gallocanta. Esta es una asociación que lleva muchísimo tiempo trabajando por la naturaleza, el medio ambiente y las grullas. Tiene mucho recorrido, llevamos muchos años trabajando y nosotros somos amigos desde hace mucho tiempo. Entonces en el caso de Ana Fuertes es un texto que fue premiado hace 17 años por El Comarcal del Jiloca, y cuando lo leí me gustó muchísimo. Pero se quedó en un cajón, y seguí trabajando en Daroca, aunque siempre me acordaba de él. Y este año, después del éxito de Las lágrimas del Endorro, decidí que la segunda parte debía de ser La grullita y el muñeco. Como siempre me había acompañado tenía ya visualizadas las imágenes, porque recordaba cuando de pequeño miraba por la ventana y veía caer la nieve, y hacíamos muñecos de nieve con la escoba y los botones. Esta historia en la que la grulla le lleva copos de nieve al muñeco para que no se derrita, me pareció muy emotiva.

-Hace poco presentaron los libros y las ilustraciones en Calamocha.

-En Calamocha fue increíble, no cabía más gente en la sala. Por un lado estaban las ilustraciones originales puestas en la pared a modo de exposición, y por otro lado estábamos presentando y dedicando los libros a los niños. Al final una chica que se llama Amanda, experta en kamishibai, que es de Gallocanta, reprodujo las ilustraciones en este teatrillo y salió vestida de japonesa haciendo un rito japonés. Entonces contó el cuento de Las lágrimas de Endorro a la manera tradicional, teatralizándolo, con lo cual los chavales se quedaron alucinados. No imaginaba que iba a tener tanta visibilidad, porque prácticamente hemos agotado todas las ediciones.

-¿En qué consiste la técnica del kamishibai?

-Es un teatro que hemos adaptado, que se trabaja sobre las ilustraciones. Es decir, es una especie de soporte pequeño analógico y van pasando las ilustraciones. Entonces hay una persona que va pasando las ilustraciones por ese teatrillo y va contando el cuento. Es la tradición oral japonesa y se hacía desde la Edad Media en nuestra tierra. Había un personaje que iba con unos pliegos que iban pasando y unas ilustraciones. Entonces el personaje teatralizaba de alguna manera el cuento, y se iba pasando de boca en boca. Es un poco por recuperar la tradición.