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El sector apícola se moviliza el martes contra los abusos de las envasadoras El sector apícola se moviliza el martes contra los abusos de las envasadoras
Apicultores en un curso celebrado en Valbona. Archivo

El sector apícola se moviliza el martes contra los abusos de las envasadoras

Los apicultores turolenses participan en la concentración convocada en la plaza Roma de Zaragoza
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El sector apícola de COAG se movilizará el próximo 11 de diciembre en 18 capitales, entre ellas Zaragoza, bajo el lema En defensa de la miel española, por un sector apícola rentable y sostenible, para denunciar lo que considera “abusos de la industria envasadora de miel a productores y consumidores”.

Así lo avanzó la organización agraria en un comunicado en el que detalló que la movilización tendrá lugar en Almería, Córdoba, Guadalajara, Jaén, Las Palmas, Logroño, Málaga, Menorca, Murcia, Oviedo, Pamplona, Salamanca, Santander, Santiago de Compostela, Sevilla, Tenerife, Valencia y Zaragoza. Los apicultores turolenses acudirán a la capital aragonesa, donde la concentración tendrá lugar a las 10:30 horas en la plaza Roma.

En la actualidad, la provincia de Teruel cuenta con 36.610 col- menas registradas que pertene- cen a 487 apicultores, aunque tan solo el 15% de ellos son pro- fesionales.

El objetivo es que se produzcan concentraciones frente a grandes superficies comerciales para “reclamar un mayor control de las importaciones de baja calidad, especialmente de China, y un etiquetado más transparente que obligue a detallar el país de origen”.

Además de la lectura de un manifiesto reivindicativo, COAG distribuirá folletos divulgativos para informar sobre “el confuso etiquetado que utilizan las grandes industrias envasadoras para enmascarar importaciones y sucedáneos de miel de baja calidad”.

Según los datos de la organización agraria, desde la campaña 2015-2016 el precio de la miel en origen acumula una caída cercana al 40%. 

COAG asegura que, actualmente, los apicultores están recibiendo ofertas de compra por parte de la industria envasadora muy por debajo de lo que cuesta producir un kilo de miel, 2,65 euros.

“La situación es perversa e insostenible; producimos una de las mejores mieles del mundo pero la industria envasadora ha dejado de comprarla porque prefiere abastecerse de importaciones de baja calidad de terceros países”, resaltó el responsable apícola de COAG, Ángel Díaz.

En 2017, según las mismas fuentes, se alcanzaron “cifras récord de importación; en una década se ha duplicado la entrada de miel foránea y se ha pasado de 16.000 toneladas en 2007, a 32.000 en la última campaña”.

Etiquetado

Entre tanto, la plataforma que agrupa a decenas de asociaciones apícolas de toda España en defensa de un cambio en el etiquetado de la miel mantiene su intención de manifestarse el próximo 13 de diciembre frente al Congreso de los Diputados en Madrid, pese al cambio normativo que ya prepara el Gobierno.

Así lo precisó en un comunicado la plataforma Etiquetado Claro Ya, compuesta e integrada por más de 60 asociaciones apícolas, organizaciones medioambientales, empresas del sector y apicultores a título individual, según sus impulsores.

El colectivo ha criticado que el Ejecutivo no se haya reunido con sus representantes ahora que trabaja en la elaboración de un nuevo real decreto sobre el etiquetado de la miel, después de que sus miembros lleven “más de trece años peleando” por la modificación legislativa.

En su opinión, el Gobierno “maquilla el descontento de los apicultores por el total abandono al sector” al reunirse únicamente con organizaciones agrarias y empresas envasadoras.

Desde la plataforma han incidido en que es necesario que el etiquetado de la miel detalle “el país de procedencia en el que se cosecha la miel, y en caso de mezclas, además se indicará el porcentaje de la mezcla de miel de cada país”.

En su opinión, actualmente los consumidores españoles están “desinformados” y compran miel a menudo “de muy baja calidad e incluso productos que han sido adulterados y desnaturalizados”. Para evitarlo, también reclaman una prohibición expresa en la normativa de que se someta a la miel a temperaturas superiores a 45 grados durante el proceso de envasado, y que en caso de hacerlo el producto tenga que denominarse “edulcorante en base a miel” por la “degradación” de sus cualidades.

Exigen que cuando se someta a una temperatura superior a los 40 grados e inferior a 45 “se haga constar claramente en el etiquetado que el producto está pasteurizado y qué propiedades pierde en el proceso”, además de prohibir “la microfiltración de la miel”.