El CD Teruel es el segundo mejor equipo en la segunda vuelta

Desde el domingo por la tarde todos los seguidores del Club Deportivo Teruel respiran un poco más tranquilos, después de que el equipo haya abandonado, por fin, las posiciones de descenso en la clasificación de Segunda B y el sueño de la permanencia parece un poco más cercano. La victoria del domingo en Pinilla ante el Sabadell ha dado alas a los rojillos de Dani Aso, que tras trece jornadas en la zona roja  seguidas y tres más en el puesto 16 que obliga a jugar el play out ha logrado volver a posiciones de mitad de tabla clasificatoria.
Sin embargo, y a pesar de los buenos resultados que ha cosechado el CD Teruel en esta primera vuelta en la que ha puntuado en todos los partidos sumando 17  puntos en nueve jornadas, todavía es pronto para echar las campanas al vuelo. Los de Dani Aso no pueden descuidarse ya que tienen hasta cuatro equipos detrás en u estrecho margen de tres puntos o menos, por lo que cualquier traspié puede dar al traste con tanta alegría.
Con las cifras en la mano, el conjunto de Pinilla son el segundo mejor equipo del Grupo III en la segunda vuelta. Empatados a 17 puntos con el Espanyol B y el Atlético Baleares, los rojillos han sumado cuatro victorias y cinco empates en estas nueve semanas.
Los datos contrastan con los resultados logrados en la primera mitad de la competición. El CD Teruel fue l peor equipo en los primeros 19 partidos de liga y en todas esas jornadas sumó Mens puntos de los que ha logrado ya en esta segunda parte del calendario. Entonces, el equipo cerró el ciclo con tres victorias,  seis empates y diez derrotas. Sin embargo, los resultados han mejorados notablemente en esta parte del año.
Los resultados no acompañaron al CD Teruel en la primera mitad del campeonato y el equipo dejó escapar una buena cantidad de puntos en la recta final de los partidos. El propio director deportivo rojillo apuntaba que “con los resultados que teníamos en los partidos de la primea vuelta al descanso, hoy estaríamos entre los ocho primeros”, y argumentaba la falta de “solidez y consistencia” que padecía el equipo