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La renovación de la cubierta de la iglesia de Rubielos costará 330.000 euros La renovación de la cubierta de la iglesia de Rubielos costará 330.000 euros
Las obras para acondicionar la cubierta de la excolegiata de Rubielos de Mora comenzarán en breve

La renovación de la cubierta de la iglesia de Rubielos costará 330.000 euros

Las obras, que se financian con fondos procedentes del Fite, comenzarán pronto
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Cruz Aguilar

La empresa Contrafforte Restauro SL será la encargada de acometer los trabajos de acondicionamiento en la cubierta de la ex colegiata de Santa María la Mayor de Rubielos de Mora. Las obras, que comenzarán en breve y tendrán un coste de 330.000 euros, consistirán la completa reparación del tejado así como del maderamen que lo sujeta y la consolidación estructural de arcos y bóvedas. 

La obra, que se financiará con el Fondo de Inversiones de Teruel (Fite), fue adjudicada a finales de marzo por Suelo y Vivienda de Aragón por un total de 308.000 euros, aunque el presupuesto base de licitación fue de 343.438 euros. Ahora, Suelo y Vivienda de Aragón ha sacado a licitación la dirección de la obra por un montante (sin impuestos) de 24.700 euros. 

 El arquitecto redactor del proyecto, José María Galve, señaló que el templo no presenta “problemas estructurales graves ni irresolubles”, pero sí incidencias derivadas de sus cuatro siglos de existencia en los que apenas se han realizado pequeñas actuaciones puntuales. El experto matizó que con esta actuación la iglesia quedará en perfecto estado y se evitará el riesgo de que algunas de las incidencias actuales deriven en problemas más graves.

En el proyecto se contempla la renovación de en torno a la mitad de las tejas que cubren la cubierta, que son de un tamaño mayor tanto de ancho como de largo que las tejas convencionales. Galve precisó que en la zona se denominan aguilones y que seguramente se fabricaron adrede para la excolegiata de Rubielos. 

Tejas por encargo

Se trata de piezas cerámicas, curvas y de tipo árabe y muchas de ellas tienen marcas de cruces realizada antes de la cocción del barro, “lo que es un indicio de que se hicieron por encargo”. Para la sustitución de alrededor de la mitad de las piezas de la cubierta se encargarán tejas de similares dimensiones a las que ya hay. “Se harán con medios más actuales pero con las características de las tejas de entonces”, comentó Galve. 

La excolegiata comenzó a construirse a principios del siglo XVII y se acabó en 1620, con la participación de varios maestros en la dirección de las obras.  Uno de los avatares más importantes que sufrió el templo fue un grave incendio en 1844 que consumió todo el retablo mayor y supuso la reconstrucción de toda esa parte.  

Tiene planta rectangular, con una nave principal y seis capillas laterales, aunque en la cubierta de una de ellas, la de la Virgen del Carmen, no se intervendrá puesto que ya fue restaurada íntegramente hace unos años. La cubierta del edificio tiene en torno a 1.750 metros cuadrados de los que se actuará en 1.530 puesto que la zona de la capilla del Carmen ya fue intervenida, tanto interior como exteriormente, en unos trabajos anteriores.

En el informe también figura que se dará tratamiento  preventivo a todos los elementos de madera originales que se conservan. El tratamiento se realizará mediante la inyección de productos químicos en cerchas, vigas y demás elementos con el objetivo de eliminar la presencia de los agentes degradados y evitar futuros ataques fúngicos (de hongos) o de  xilófagos. 

Seis meses de ejecución

Las obras comenzarán muy pronto y el plazo de ejecución de las mismas es de seis meses. El arquitecto responsable del proyecto de restauración comentó que se trata de una actuación muy respetable con el medio ambiente. Así, señaló que se ha descargado la utilización de cemento y hormigón, que se sustituirán por el mortero de cal, que es un material similar al que se usó en el momento en el que se construyó “aunque mejorado”, aclaró el responsable técnico.

Aunque los trabajos adjudicados solo contemplan la actuación en la cubierta, no se descarta acometer una segunda fase para poder realizar actuaciones en el subsuelo del templo, donde los expertos esperan encontrar elementos arqueológicos de gran relevancia.