La jueza prorrogará dos años más la prisión provisional para Norbert Feher, en prisión por el triple crimen de Andorra

El Juzgado de Instrucción número 2 de Alcañiz prorrogará la próxima semana dos años más –cuatro en total, el máximo legal– la prisión preventiva contra Norbert Feher que decretó el 17 de diciembre de 2017, a la espera de que la instrucción se cierre y la Audiencia Provincial de Teruel señale el juicio mediante la fórmula del jurado popular, que podría celebrarse en primavera. 

Casi dos años después de que el asesino de los guardias civiles Víctor Romero y Víctor Jesús Caballero y del ganadero José Luis Iranzo confesara el triple crimen a la primera jueza que llevó la causa ni siquiera hay fecha para el juicio, por lo que la titular actual del Juzgado número 2 –la tercera– convocó a todas las partes para decidir sobre la prórroga de prisión del investigado.

Feher vio y escuchó lo que se dijo en el palacio de justicia alcañizano mediante videoconferencia, asistido por una intérprete de italiano que tradujo todas las intervenciones, tanto de la jueza, la fiscal, la acusación y la defensa.

La “pena” que se le puede imponer, “la gravedad” de los hechos “y las características del propio investigado” aconsejan que la prisión preventiva se prorrogue hasta los cuatro años –el límite que permite la ley–, explicó el abogado que representa a la familia Iranzo al completo, Enrique Trebolle, que explicó que todas las acusaciones pidieron lo mismo. La defensa se opuso y la jueza tiene que decidir antes del plazo que marca el 17 de diciembre, que es cuando se le decretaron al serbio los primeros dos años de privación de libertad.

“Concurren todos los elementos” de los artículos “503 y 504” de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, explicó el abogado de la Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC) que representa a la viuda e hija de Romero, Jorge Piedrafita: “Riesgo de fuga, peligrosidad social y podría causarse obstrucción al proceso”.

Por su parte, el abogado defensor, Juan Manuel Martín, se opuso a la prórroga argumentando que la situación de prisión “siempre es una excepción y la presunción de inocencia está por encima”, aunque “evidentemente la ley prevé una serie de requisitos” como “la gravedad del delito” o “la reiteración delictiva que ampararían esa prueba de prisión”, por lo que “intuimos lo que va a ser”, se resignó. 

A la espera del juicio

“La instrucción se está demorando demasiado”, dijo Martín, quien a riesgo de entrar en el “terreno de la hipótesis” consideró que entre mayo y junio podría celebrarse el juicio.

De la misma opinión son Trebolle y Piedrafita. Al primero no le parece que la instrucción se esté prolongando en exceso. “Creo que va por sus cauces, perfectamente. He tenido muchos casos de jurado, de gravedad, y la prórroga de la prisión provisional se ha producido en todos ellos”, subrayó. 

Todavía se demorará más la causa si la Audiencia Provincial de Teruel resuelve a favor de los recursos que ha presentado la Fiscalía y las acusaciones contra el auto de la jueza en el que ésta descarta entregar a todas las partes una copia de la infografía de los crímenes; se niega a incorporar la declaración que hizo Feher en el Juzgado de Instrucción número 1 por el doble intento de homicidio de Albalate del 5 de diciembre de 2017 y en la que explicaría cómo se produjo el robo de la furgoneta de Iranzo entre su asesinato y el de los dos agentes; rechaza practicar la prueba de la reconstrucción judicial de los hechos sobre el terreno e impide una nueva declaración de Feher antes del juicio en la que las partes puedan preguntarle.

Una vez que la Audiencia Provincial de Teruel resuelva, se practicarán o no las pruebas y el proceso continuará con el escrito de conclusiones provisionales, que recogerá los escritos de calificación (las penas que pide la Fiscalía y las acusaciones) y el escrito de defensa. Todo ello se enviará a la Audiencia para que señale fecha para el juicio.

“Entendemos que la reconstrucción es una prueba importante y la tenemos que tener porque no se puede practicar en el jurado”, defendió Piedrafita. Hasta ahora, la jueza la ha denegado por cuestiones de seguridad, pues el dispositivo que requeriría mover a Feher de la cárcel sería amplio, y más con su reciente traslado de Zuera a Teixeiro (La Coruña). “En su declaración –el 17 de diciembre de 2017–, la única que ha hecho y en la que nosotros no hemos podido intervenir, Feher no dijo la verdad”, aseveró el abogado de la AEGC, que insiste en que la reconstrucción judicial, confrontada con la infografía, ilustre al jurado “porque es muy importante para determinar que fue un asesinato –con una emboscada clara, premeditada, sin opción de defensa– y que sabía que eran guardias civiles”.

“La fiscal está en su derecho” de pedir más pruebas, “defendiendo el principio de legalidad, y además yo me adhiero a esas peticiones”, se limitó a decir el abogado de la familia Iranzo preguntado por las recurrentes desestimaciones de la jueza.

La defensa cree que el traslado de prisión es una decisión “caprichosa”

El abogado defensor de Feher, Juan Manuel Martín, considera una “decisión caprichosa” el traslado del investigado desde la cárcel de Zuera (Zaragoza) a la de Teixeiro (La Coruña) realizado la semana pasada por cuestiones de seguridad, pues en su opinión “no responde a ningún criterio objetivo y evidentemente dificulta el derecho a la defensa”, reprochó a Instituciones Penitenciarias. 

De esta forma, Martín se tendrá que desplazar hasta Galicia cada vez que quiera hablar con su cliente, pues las videoconferencias y otros sistemas de comunicación por medios informáticos no están previstas para los abogados. “Quiero acudir esta primera semana de diciembre a visitarle”, anunció. 

Martín no avanzó la línea de defensa que seguirá para evitar que a Feher le caiga la prisión permanente revisable, la mayor condena que dispone el Código Penal para crímenes de estas características.

“No entiendo que Teixeiro tenga un nivel de seguridad mayor que Zuera”, dijo Piedrafita, si bien admitió desconocer si Instituciones Penitenciarias maneja datos relevantes que motivaran el cambio. 

De cara al reconocimiento judicial que pide esta parte y a la comparecencia de Feher en el juicio –ambas requieren de la presencia del investigado– “no es lo mismo tenerlo en Zuera que allí, porque mínimo para el juicio va a tener que ser trasladado, con el peligro que eso implica y la peligrosidad”.

Piedrafita descartó que, durante el juicio, Feher pueda residir en la cárcel de Teruel, pues es “de segundo grado y no tiene las medidas de seguridad” necesarias. Por esto mismo, la jueza decretó su traslado a Zuera tras tomarle declaración en Alcañiz tres días después del triple crimen.

“Lo más lógico es que esté en Zuera durante el juicio” y lo traigan y lo lleven a diario a Teruel, concluyó Piedrafita.