Síguenos
La térmica de Andorra cierra 2019 con el peor dato de generación de su historia La térmica de Andorra cierra 2019 con el peor dato de generación de su historia
Trabajadores de la central térmica, en una asamblea en la barrera el año pasado. M. N.

La térmica de Andorra cierra 2019 con el peor dato de generación de su historia

En febrero se desencadenarán los despidos al ritmo actual de combustión
banner click 244 banner 244

La central térmica de Andorra generó en 2018 un total de 1.536 gigavatios hora (GWh), el peor dato desde que empezó a operar en 1981 y que todavía será rebajado este año con el cierre definitivo. Aunque la desconexión de la planta está prevista para el próximo 30 de junio, apenas hay almacenadas 150.000 toneladas, con las que solo puede funcionar un grupo durante 40 días. 

El temido 2020 ya llegó y apenas dará mes y medio de margen para que Endesa y sus empresas auxiliares confirmen los planes de recolocación para sus trabajadores, en el primer caso, y los despidos en el segundo. Si esas 40 jornadas de generación tuvieran lugar de manera consecutiva desde este momento –no es descartable debido al descenso de las temperaturas que activa la demanda–, “se cerraría el carbón el 10 o el 12 de febrero”, indicaron fuentes de la eléctrica.

En caso de que las calderas llegaran a parar, la producción se demoraría unos días o semanas a lo sumo, a expensas de si las energías renovables entran o no con fuerza en el mix energético en función de la disponibilidad de agua, viento y sol.

Es una situación conocida desde hace meses, pero que el cambio de dígitos en el año que acaba de comenzar ha ayudado a clarificar. Con él, se desencadenan las urgencias. Endesa ha garantizado a sus trabajadores recolocaciones que ya se han ido produciendo. De los 153 operarios que contabilizó la eléctrica en el momento del anuncio de cierre, en noviembre de 2018, quedarán “alrededor de 70” el 30 de junio, cuando se incorporarán a los trabajos de desmantelamiento de la planta. 

El Plan Nacional Transitorio al que la central está acogido hasta la desconexión final le obliga a quedar disponible para el sistema eléctrico estatal hasta el 30 de junio, pero que las calderas vuelvan a arrancar una vez agotado el lignito es “altamente muy improbable”, confirmaron fuentes del sector. En este momento el país tiene suficiente potencia instalada como para no tener que recurrir extraordinariamente a una central en proceso de liquidación que solamente podría hacer frente a esta circunstancia quemando carbón de importación o gas, concretaron. 

No obstante, esta obligación requerirá el mantenimiento de una dotación mínima de personal, aunque una mínima parte del mismo pertenecerá ya a las subcontratas.

La eterna incertidumbre

Los trabajadores de las empresas auxiliares afirman desconocer su destino a mes y medio vista. “Seguimos con la misma incertidumbre”, dijo el portavoz de la Plataforma de trabajadores de las subcontratas y por el futuro de Andorra, José Alberto López, quien apuntó que de los 15 trabajadores que Maessa dijo que iba a despedir el 20 de diciembre “solo han salido siete”, algunos de ellos con acuerdo voluntario.

Por tanto, a un mes de que se pueda producir un ERE “no sabemos absolutamente nada”, denunció el portavoz, quien explicó que estaba previsto dar salida a otros 11 trabajadores entre enero y febrero de 2020. En total, 30 trabajadores desde finales de noviembre cuyas bajas, sin embargo, no se están confirmando.

Manifestación el día 11

La Plataforma, el comité de empresa de la central, los sindicatos CCOO y UGT y la Agrupación Minero Eléctrica de Jubilados de Endesa Aragón (Amepea) han convocado una nueva manifestación el 11 de enero en la plaza del Regallo de Andorra “por la defensa del empleo” y por una transición justa efectiva. 

“Se cumple un año de la manifestación masiva del año pasado y seguimos no igual, sino peor porque mucha gente ya está en el paro y muchos negocios están cerrando en Andorra”, subrayó López, quien puso de manifiesto la falta de inversiones que registra la cabecera comarcal. “Se ve mucho desánimo y la gente ya está invirtiendo en negocios y pisos por Zaragoza. El año pasado pedíamos que no se cerrara la central y ahora sabemos que está cerrada, pero somos un territorio con muchas posibilidades y queremos que las Administraciones inviertan porque tenemos mano de obra cualificada y polígonos”.

La manifestación va dirigida al Gobierno de España y al de Aragón, principalmente. “Nos han dicho que se va a firmar ya el Contrato de Transición Justa. Es prioritario. Necesitamos banda ancha, cargadero ferroviario, agua, la A-68 y un polígono supracomarcal”, concluyó. 

La planta produce la mitad de GWh que en 2018

Los 1.536 GWh con los que cerró el año la térmica de Andorra representan “la menor producción de toda la serie histórica”, confirmaron fuentes de Endesa.

El dato supone prácticamente la mitad de la generación del año anterior, que con 3.030 GWh ya fue el más bajo desde que en 2010 sus calderas estuvieran en marcha tan solo 1.793 horas. En 2017 se situó en los 4.730 GWh, el segundo mejor dato de actividad de la década tras los 6.260 GWh de 2011.

La mayor presencia de las energías renovables en el mix energético nacional, unida a un incremento del precio del CO2, explican esta evolución a la baja de la generación energética con carbón.

El precio medio por tonelada de CO2 emitida a la atmósfera en 2019 fue de 24,84 euros, frente a los 15,88 euros de 2018.

En 2019 se produjeron en España 261.020 GWh de electricidad, de los que el 36,8% fueron generados a partir de tecnologías renovables, apunta Red Eléctrica de España. Además, el 58,6 % de la electricidad producida procedió de tecnologías que no emiten CO2 a la atmósfera.

El ciclo combinado, con un 21,9 % del total, fue la tecnología que más aportó al mix de generación, seguida de la nuclear (21,2%), la eólica (20,6%), la cogeneración (11,4%) y la hidráulica (9%). Detrás queda el carbón que, con el 5% del total de generación nacional, anotó la menor participación de esta tecnología desde que Red Eléctrica tiene registro. En 2018, la energía producida con carbón aún representaba el 14,1% del total. 

Además, el 14 de diciembre fue el primer día en el que no se utilizó el carbón para la generación eléctrica en la península. Con respecto a 2018, la producción de energía térmica generada con carbón descendió un 68%.