Síguenos
Como reducir la evaporación y minimizar el uso de productos químicos en una piscina Como reducir la evaporación y minimizar el uso de productos químicos en una piscina

Como reducir la evaporación y minimizar el uso de productos químicos en una piscina

banner click 241 banner 241

Mantener una piscina en buen estado es una de las mayores preocupaciones por parte de aquellos que disponen de este tipo de instalaciones, ya sea esta climatizada o al aire libre. Dependiendo de la tipología de las mismas, en cada caso deberá considerarse un tipo de protocolos y conductas que efectuar a lo largo del año, especialmente en los meses en los que más se vaya a utilizar.

Tales son el cuidado de los aparatos que la mantienen en funcionamiento o los productos químicos que permiten bañarse con normalidad, entre otros. Lo que en ocasiones se desconoce, sin embargo, son los recursos de los que se puede disponer para mejorar en gran medida la experiencia de la que uno disfruta. 

Es el caso, por ejemplo, de una manta termica para piscina a medida, cada vez más requerida entre quienes disponen de una piscina en su hogar por las posibilidades que ofrece a la hora de conservar el calor y, por consiguiente, ahorrar en uno de los aspectos clave para proporcionar una experiencia de baño óptima. Pero ¿cómo desempeñan su labor estos accesorios exactamente?

Las mantas térmicas como solución ante las pérdidas de calor

A nadie le gusta tener que bañarse en una piscina con una temperatura fría o tener que hacer uso de más elementos químicos de los estrictamente necesarios para poder hacerlo sin que suponga un peligro para la salud. Muchas veces, no obstante, uno se ve obligado a doblegarse ante las mencionadas circunstancias por las simples características del entorno, algo que se da de manera muy especial cuando se habla de piscinas que se encuentran al aire libre.

Es en estos lugares, utilizados durante los meses de buen tiempo, es imprescindible poder conservar las propiedades del agua en el mejor de los estados posibles, algo a lo que ayuda en gran medida disponer de una de las mencionadas mantas térmicas. Estas, que se colocan cuando llega la noche –y el descenso de las temperaturas, con ella–, ayudan a conservar la temperatura del agua de la piscina que se ha ganado durante el día, impidiendo que se produzca un gran enfriamiento durante las horas nocturnas y preservando un estado ideal para poder bañarse al día siguiente.

Al mismo tiempo, las mantas térmicas para piscinas ayudan a realizar también un menor consumo de los citados elementos químicos que mantienen saludables las condiciones del agua, dado que evita la evaporación de la misma. Así, el uso de estos se efectuará en menor cantidad, sino beneficioso tanto para quienes se bañen en ella como para el bolsillo, al alargar sus tiempos de uso.

Ideales para todo tipo de piscinas

Las mantas térmicas son un elemento que uno habrá de tener en cuenta en cualquier tipo de piscina del que se disponga si se quiere aprovechar las cualidades que ofrece. Como se ha mencionado, es especialmente útil en aquellas que se encuentran al aire libre, dado que son las que más expuestas se hallan ante la influencia de los agentes externos, con especial énfasis en los citados momentos nocturnos. No obstante, no son las únicas que se pueden ver beneficiadas de su uso.

En las piscinas climatizadas, por ejemplo, y dependiendo de la época del año y del entorno en el que estas se encuentren, puede ser una buena forma también de preservar el calor del que dispone esta cuando no se encuentre en uso y, así evitar calentarla de manera artificial. Bien es sabido que el uso de sistemas de calefacción para estos lugares suponen un elevado coste eléctrico, por lo que hacer uso de una manta térmica puede traducirse en un importante ahorro con el simple hecho de colocarla sobre la superficie de la misma en los momentos de menor uso.

Lo único a tener en cuenta, especialmente en aquellas al aire libre, es que estos no son cobertores destinados a proteger la superficie ante cualquier inclemencia del tiempo a lo largo de todos los meses del año, por lo que habrá de ser retirada y guardada cuando no se vaya a hacer uso de las instalaciones. En las épocas de baño, sin embargo, puede ser el gran aliado para marcar la diferencia y mantener el agua siempre a una excelente temperatura sin recurrir a métodos externos.