Las casas de madera, de por sí, representan una alternativa más que interesante a la hora de contar con una vivienda perdurable, cómoda, acogedora y mucho más asequible en relación a otros tipos de construcciones. Sin duda, una gran opción.
Pero, quizás lo mejor de todas estas características, está en que esta estructura también es ideal para el aprovechamiento de las energías “verdes”. ¿La razón? La madera es uno de los materiales más nobles para la construcción, aunado a los nuevos procesos de edificación que buscan la reducción del impacto ambiental.
Por cierto, el punto anterior nos deja en claro algo interesante: en los últimos años hay una mayor conciencia ambiental, por lo que ha incrementado la demanda de las energías renovables y limpias integradas en las residencias.
Entonces, ¿cuál de las opciones es la más idónea? ¿Qué alternativas tienen los propietarios en la actualidad? Pues, en el siguiente post, exploraremos más al respecto.
Casa de madera y la energía eficiente:
Una de las mayores preocupaciones para las personas que buscan hogares energéticamente eficientes, tiene que ver con el máximo aprovechamiento de la energía renovable y limpia, sobre todo, a lo largo del año.
Según expertos (Pineca), las construcciones hechas de madera pueden producir tanta energía como de cualquier otro tipo. Por lo que hay que contar con los implementos necesarios para acondicionar el lugar de manera adecuada, para que funcione tanto en invierno como en el verano.
Es por ello que hay que familiarizarse con las diferentes opciones que se encuentran en el mercado y así sacar el máximo provecho de lo que se pueda contar.
Opciones energéticas que puedes escoger para tu casa de madera:
1. Energía termosolar:
Se trata de unas de las nuevas incorporaciones a los hogares y cuya energía resulta de las más prácticas que existen en el mercado. Además, y por si fuera poco, puede aprovecharse al máximo en lugares en donde la luz solar es constante y potente.
La de este tipo es ideal para la cocción de alimentos, para la producción de agua caliente o la calefacción. En ese sentido, se procede a la instalación de paneles solares ubicados en puntos estratégicos para el máximo aprovechamiento de luz y calor.
Si bien la inversión puede preocupar a los propietarios por cuestiones costos, hay que tomar en cuenta que, a la larga, se ahorrará gastos importantes en servicios.
2. Energía minieólica:
Ahora bien, se trata de otro tipo de fuente energética que también se encuentra entre las más tradicionales para las casas.
La misma se obtiene del aprovechamiento del aire a través de generadores, los cuales pueden instalarse en el techo. ¿Cuál es la ventaja de este tipo de energía? Tanto los equipos como la instalación son fáciles de adquirir y ejecutar. Al final, es una excelente opción para obtener energía eléctrica durante todo el año.
3. Energía obtenida por paneles fotovoltáicos:
En este caso, la obtención de la energía es más o menos similar a la termosolar, salvo que esta produce electricidad que puede alimentar hogares, hospitales y edificaciones más o menos grandes, por lo que resulta una excelente inversión.
Lo cierto es que los paneles fotovoltáicos son una tendencia importante, por lo que es posible encontrar variedad de opciones de herramientas, instalación y materiales en el mercado. ¿Lo mejor? Es una inversión que incluso puede hacerse entre varias familias.
4. ¿Para el invierno? Prueba con la biomasa:
Según expertos, se entiende que es una de las energías más interesantes en la actualidad ya que la misma se obtiene a través de la combustión de materiales orgánicos como huesos de aceituna, cáscaras de nueces, astillas de madera y residuos agrícolas e industriales.
Este método es perfecto para aquellos propietarios que buscan fuentes alternativas para la calefacción durante el invierno. Eso sí, hay que tomar en cuenta que el éxito al respecto, se necesita de una buena caldera o estufa que se preste para la quema de estos recursos.
Cabe destacar que el costo de este recurso puede ser más o menos elevado en comparación a otros en el mercado.
Al final, cada una de las opciones tiene sus ventajas que cada quien debe considerar seriamente. Sin embargo, si tienes dudas al respecto, siempre podrás consultar a los expertos para una guía más especializada.
