La concentración parcelaria del regadío de Villafranca y Singra se terminará en 2021

La concentración parcelaria de regadío de Villafranca del Campo y de Singra, antiguos regadíos de los Pozos de Singra, estará terminada en 2021, según avanzó el equipo técnico del Servicio Provincial de Agricultura y Medio Ambiente de la Diputación General de Aragón. El pasado jueves, los propietarios de fincas de Villafranca del Campo y de Singra eligieron a las comisiones locales, que son los órganos que dirigen las concentraciones parcelarias y a los miembros de las juntas de clasificación de las tierras. El número de hectáreas que afecta a esta nueva concentración parcelaria de regadíos es de 1.400 y el número de propietarios de fincas alcanza los 600. 

El pasado jueves se celebraron dos asambleas, una en Villafranca del Campo y otra en Singra, convocadas por los ayuntamientos y la Cámara Agraria Provincial con la asistencia del equipo técnico del Servicio Provincial de Agricultura y Medio Ambiente de la Diputación General de Aragón para elegir a los representantes de los propietarios de fincas de las comisiones locales y a los miembros de las juntas auxiliares de clasificación de tierras.

Ricardo Ibáñez, ingeniero agrónomo del Servicio Provincial de Desarrollo Rural y Sostenibilidad del Gobierno de Aragón en Teruel, explicó que las asambleas para las elecciones de los representantes de los propietarios de fincas de las comisiones locales de Singra y de Villafranca del Campo se hacen para empezar los trabajos de clasificación de tierras y de investigación de la propiedad. 

En esta línea, Ricardo Ibáñez reseñó que en realidad la concentración parcelaria de regadío de Villafranca del Campo y de Singra es una reconcentración y acometer su reforma, la modernización del regadío. La Comunidad de Regantes de los Pozos de Singra proviene de la antigua SAT Pozos de Singra, que tenía 1.400 hectáreas de regadío y 700 socios. “En estos momentos las fincas son de regadío, pero la realidad es que no se riegan. Es una actuación que por una parte queremos concentrar y, por otra, modernizar el regadío en una segunda instancia. Ya se hizo la concentración. Es reconcentrar para poder acometer la reforma del regadío, la modernización del regadío”.  Avanzó que son 1.400 hectáreas entre los términos de Singra, Villafranca del Campo, municipios  donde se va actuar. 

Ibáñez recordó que en la tramitación administrativa hubo  una exposición pública para ver si tenía un apoyo generalizado. “La ha habido y ahora comienzan los trabajos formales de la concentración.  Primero clasificar tierras, luego investigar la propiedad, saber quienes son los propietarios de las fincas y a continuación reorganizar la propiedad, hacer nuevos lotes. Este año se harán la mayor parte de estos trabajos y clasificar e investigar será a lo largo del año”, anunciando que será en el año 2021 cuando estará terminada la concentración parcelaria de regadío de Villafranca del Campo y de Singra. El número de propietarios de fincas alcanza los 600.

También comentó que la inversión no será elevada porque los caminos ya estaban hechos.  “La inversión real será luego en modernizar el regadío. Será en función de las hectáreas que finalmente se modernicen y será la comunidad de regates quien decida el sistema de riego y las características técnicas. Como Administración daremos la subvención, pero será la comunidad de regates la que va a decidir que tipo de soluciones adopta”. 

Por último, Ibáñez destacó que el objetivo es modernizar el regadío, movilizar un recurso que está sin utilizar y mejorar la estructura aumentando la rentabilidad de las explotaciones porque el sistema anterior es obsoleto. “La idea es hacer un riego por aspersión, que permita mayor eficacia y menor coste económico. Pasar del riego a pie a riego de aspersión, con lo que se puede automatizar e introducir nuevos cultivos”.

Once millones de inversión 

En una memoria valorada que se hizo hace unos años por parte del Departamento de  Agricultura del Gobierno de Aragón el proyecto de modernización de los regadíos de los antiguos Pozos de Singra, 1.400 hectáreas, se elevaba a 11 millones de euros.  En esa memoria se contemplaba  la perforación, entubado, construcción de una estación de bombeo, colocación de tomas de riego en cada parcela y la automatización integral del sistema. El pasado año se informó que el coste para los propietarios de las fincas rondaría los 4.000 euros la hectárea, incluida la subvención de la DGA.