Los escolares de Camañas plantan un nuevo olmo en la plaza
El ejemplar sustituirá a la vieja olma, que reposa como escultura junto al cementerio
Los niños de Camañas fueron los encargados de plantar durante la semana el nuevo olmo que sustituirá a la vieja olma, que se secó a consecuencia de la grafiosis en el año 2008 y que ha sido trasladada, como escultura, al parque que hay junto al cementerio.
Los escolares fueron los responsables de ayudar a la tarea de plantación del árbol, un Ulmus minor tratado específicamente para evitar el contagio por grafiosis. La alcaldesa de Camañas, Sara Ros, explico que habían querido hacer participes a los pequeños de este evento y destacó la colaboración por parte de las maestras del municipio, ya que la plantación se llevó a cabo en horario escolar.
Además, el Ayuntamiento quiso vincular a los más pequeños con el nuevo árbol, dada la importancia que el viejo árbol tuvo entre los vecinos. “Este igual ya no les da sombra a ellos, pero sí a sus hijos y nietos”, específico la responsable municipal.
La olma que había en la plaza del Ayuntamiento de Camañas era una vecina más del municipio y todos los habitantes se sentían muy vinculados a ella. De hecho, la Asociación Cultural encargada de dinamizar las actividades del pueblo, lleva de nombre la olma.
Por ese motivo, cuando tras el verano del año 2018 se secó, el Ayuntamiento comenzó a pensar opciones para ubicar aunque fuera el tronco y las ramas, que se habían convertido en un peligro. Así, el árbol está junto al parque infantil, los niños trepaban por ellas y al estar secas había riesgo de que se desprendieran.
Finalmente, tras abordar el tema en varias sesiones plenarias y tantear a los vecinos, se decidió trasladar el tronco y las ramas de la vieja olma al parque situado junto al cementerio. Allí podrá descansar muy cerca de los antiguos moradores de Camañas, “a los que durante generaciones dio sombra”, específico Sara Ros.
En el jardín donde estaba la vieja olma el Ayuntamiento decidió plantar un nuevo olmo y solicitó un ejemplar al Ministerio de Medio Ambiente, que cuenta con dos viveros en España autorizados para dispensar esta especie. Se trata de un Ulmus minor que ha sido modificado para evitar que le afecte la grafiosis, una enfermedad que ha acabado prácticamente con todos los olmos que había distribuidos por miles de pueblos de España.
La alcaldesa explicó que el Ministerio de Medio Ambiente les ha hecho entrega de tres ejemplares, por lo que instalarán uno en la plaza y los otros dos junto al tronco seco del árbol centenario en el parque del cementerio.
Además, en la plaza del Ayuntamiento se colocará junto al jardín un panel contando la historia de la vieja olma. Se incluirá también un poema que compuso Antonio Valero, un vecino de la localidad, cuando se secó el árbol centenario.
