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Al menos cuatro ancianos y un enfermero dan positivo por coronavirus en la residencia de Valderrobres

El sanitario, que también trabaja en el centro de salud, es el único ingresado en el hospital de Alcañiz
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Cuatro ancianos de la residencia de Valderrobres y un enfermero que trabaja a caballo entre el centro de salud de la localidad y el centro de mayores han dado positivo en coronavirus. Los cuatro residentes permanecen aislados en una planta del edificio, mientras que el sanitario ha sido ingresado en el hospital de Alcañiz. Asimismo, hay otros dos residentes sospechosos de estar infectados, al presentar sintomatología compatible con Covid-19, aunque se está a la espera del resultado de las analíticas. De estos dos sospechosos, uno ya ha sido ingresado en el hospital de Alcañiz.

Todas las personas infectadas o sospechosas de estarlo han sido aisladas, según confirmaron fuentes de la residencia de Valderrobres y también el alcalde, Carlos Boné, quien pidió a Salud Pública que se le realicen test a todos los residentes (unas 60 personas), aunque no lo marque el protocolo de lucha contra la pandemia, puesto que “son personas de alto riesgo que, aunque no presenten sintomatología, pueden estar infectados y están conviviendo con otros ancianos”.

Los tres primeros positivos en la residencia de Valderrobres se dieron el viernes pasado. Los tres ancianos fueron aislados al presentar fiebre y ser valorados por un médico. “Se pasó una alerta a Salud Pública y el domingo se confirmaron los positivos”, indicó Boné. Ese mismo día, el enfermero que atiende a los ancianos y que también trabaja en el centro de salud, fue trasladado en ambulancia al hospital de Alcañiz al empeorar su estado. 

El alcalde de Valderrobres consideró insuficiente el protocolo de lucha contra la pandemia, que solamente establece la realización de test por Covid-19 a personas con sintomatología no es el adecuado para ancianos. “Si no se les practican las pruebas, acabarán todos infectados, porque en este virus puede haber gente asintomática que esté contagiando y no nos encontramos ante personas que están confinadas en su casa, sino de ancianos que viven en una residencia y están en contacto con otros, y estas personas son mayores y no todas comprenden cómo hay que toser, que no se pueden poner las manos en la cara, que hay que usar mascarilla, etc”, señaló. El primer edil indicó que seguirá “reclamando por activa y por pasiva que le hagan las analíticas a los ancianos, porque ese protocolo no sirve para las residencias”. 

Por otra parte, recordó que el enfermero que está ingresado por Covid-19 “también ha estado en contacto con personal del centro de salud de Valderrobres, a los que parece ser que tampoco les van a hacer la prueba, lo cual no es de recibo”, enfatizó el regidor, quien puntualizó que “ese protocolo lo ha establecido el Gobierno central, no el Gobierno de Aragón”. 

“La consejera de Ciudadanía, María Victoria Broto, me ha dicho que va a activar a la UME para que vaya a desinfectar la residencia”, explicó Boné.

Con todo, la dirección del centro ha adoptado medidas para evitar que los residentes están cerca unos de otros. El alcalde detalló algunas de ellas: se ha ampliado el comedor y aumentado la distancia entre las mesas; se ha credo una zona aislada en la que se encuentran los residentes que han dado positivo y solo seis o siete trabajadoras tienen contacto con ellos. Estas trabajadoras que cuidan a los ancianos infectados “no tienen contacto ni con otro personal ni tampoco con otros residentes” que hasta ahora están sanos. El centro tiene, por tanto, un circuito habilitado como zona hospitalaria donde no entra nadie más que el personal que cuida a los residentes infectados. Finalmente, Boné comentó que “todos los días se desinfecta el exterior de la residencia y cuando los residentes se van a dormir se limpian las zonas comunes con una solución con lejía”.

Varias empresas han mostrado su solidaridad con los ancianos de la residencia, que llevan varias semanas sin poder ver a sus familiares, puesto que las visitas fueron restringidas incluso antes de que el real decreto por el estado de alarma introdujera esta restricción. La empresa Puyo ha regalado dos tablets para que los residentes puedan contactar con sus familias. La empresa de tejidos Escuder de Alcañiz ha donado telas para la fabricación de mascarillas, la empresa Limpiás ha entregado un palé de lejía para realizar las desinfecciones diarias y el bazar de la comunidad china de Valderrobres también ha donado 1.500 mascarillas, al igual que la empresa de confección textil Rams de Mazaleón.