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Los pueblos de la provincia tienen los contratos firmados para unas fiestas que están en el aire Los pueblos de la provincia tienen los contratos firmados para unas fiestas que están en el aire
Alfonso Félez sonorizando a una orquesta durante unas fiestas patronales en La Ginebrosa

Los pueblos de la provincia tienen los contratos firmados para unas fiestas que están en el aire

Las orquestas para las fechas más solicitadas se apalabran hasta con un año de antelación
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Cruz Aguilar

Las fiestas de los pueblos que eran en mayo y junio ya se han suspendido y entre las comisiones de festejos que preparan las de julio y agosto hay una gran incertidumbre porque no saben lo que va a ocurrir, aunque se temen que este año pasará a la historia por ser el primero en muchos pueblos de Teruel que se quedaron sin honrar a la patrona. 

Los contratos de las orquestas que acuden a las localidades en julio se firman durante los meses de enero y febrero, según confirman desde la empresa de espectáculos Santafé, con sede en Calamocha. Los grupos para las semanas más demandadas de agosto, que son las más cercanas al puente del 15, se planifican con un año de antelación. “Para las fiestas que organizamos en Teruel, que son en torno a medio centenar de pueblos, ya tenemos todas las orquestas contratadas, hacerlo ahora sería una aventura”, comenta Armando León, de Espectáculos Santafé, 

Tanto desde Santafé como los responsables de Espectáculos Avenida, con sede en Calanda, reconocen que han tenido muchas llamadas en los últimos días tanto de los responsables de organizar festejos como de los grupos que llevan y hacen un llamamiento a la calma: “No está claro cómo se va a solucionar el tema, si se cancelarán las fiestas o se podrá hacer alguna celebración con la gente del pueblo o con limitaciones”, comenta Eduardo Pérez, de la empresa calandina. Hay muchas dudas sobre lo que pasará durante los meses estivales. 

En los contratos que se firman con las comisiones de fiestas se incluyen diversos motivos por los que se puede o no se puede suspender el contrato, como la climatología, pero desde luego en ninguno de esos documentos hay ninguna  cláusula que contemple la pandemia. 

Por eso, Pérez comenta que habrá que tener en cuenta la normativa y que si es el gobierno el que suspende las fiestas, “pues está claro lo que hay que hacer” matiza, otra cosa es si están permitidas y es el pueblo el que las suspende, “que en ese caso la cosa cambia”. No obstante el profesional insta a esperar para ver cómo evoluciona la situación y a analizar caso a caso. 

Una de las opciones que baraja Armando León es aplazar los contratos ya firmados para las fiestas de 2021, algo que Eduardo Pérez no ve factible porque precisa que el panorama de las orquestas puede cambiar mucho en un año, “es un sector muy inestable”, asegura. Sí ve viable prolongar los contratos en otro tipo de servicios, como el montaje de escenarios o la sonorización. 

En lo que sí están de acuerdo ambos empresarios es en el batacazo que va a suponer para el sector si finalmente se paraliza todo durante los próximos meses. Eduardo Pérez alerta de que más allá de la tristeza que supone para un pueblo renunciar a sus fiestas, de esos eventos viven miles de familias españolas y matiza que el parón económico puede suponer la desaparición de numerosas orquestas. En este sentido Armando León concreta que dejarán de tener ingresos pero que sigue habiendo pagos y que mucha gente ha pedido préstamos para equipos y camiones. 

Alfonso Félez está al frente de Audiopro Mudéjar y señala que los 40 eventos que tenía que sonorizar desde que comenzó el estado de alarma hasta mediados de junio se han suspendido. Se ocupa del sonido de una orquesta que tiene ya una decena de contratos a partir de finales de julio  pero que “están en el aire porque no se sabe lo que va a pasar”. Señala que en el sector hay una gran preocupación no solo con el verano, sino también con las celebraciones del Pilar en Zaragoza “porque hay muchas empresas implicadas”, matiza. 

Félez toca además en un grupo y relata que ya se les ha caído una de las 4 actuaciones previstas para los próximos meses. Otro problema añadido para los músicos en esta situación de confinamiento es la imposibilidad de ensayar: “No nos podemos juntar ni ensayar por videoconferencia, lo único que podemos hacer es montar vídeos”, lamenta el músico.

Para Armando León las fiestas de los pueblos son una vía de escape muy necesaria, “las verdaderas vacaciones de mucha gente”, recalca, y alerta de que esto puede tener repercusiones a nivel psicológico para mucha gente.

Berge y Allepuz

Berge y Allepuz son dos pueblos que celebran sus fiestas en el mes de julio y en ambos sus comisiones de fiestas, con los contratos firmados ya desde hace tiempo, desconocen lo que va a ocurrir, aunque se temen lo peor. Y es que, como matiza Sonia Sanfélix, que forma parte de la comisión de Allepuz, como se trataba de un hecho sin precedentes “no se sabe las consecuencias que tendría anularlas”. La joven reconoce que los pueblos que celebran a su patrona en julio tienen menos competencia que los que lo hacen en agosto, pero aún así a estas alturas ya está todo cerrado.

En Cantavieja celebran las fiestas del verano entre el 22 y el 27 de agosto y los contratos están firmados desde noviembre del año anterior, confirma Chema Oliver, que es uno de los integrantes de la comisión. También tienen mirados los corros de vacas, para los que cuentan con ganaderías de cierto prestigio. Eso sí, los animales específicos aún no se habían elegido “porque no se ha podido ir al campo a escogerlos”, matizan desde la comisión.

Han suspendido ya las fiestas de mayo y no saben lo que ocurrirá con las de agosto, pero por si acaso algunos de los 40 miembros de la comisión se han hecho ya a la idea de que al año que viene volverán a estar ahí porque este será baldío. 

En Cantavieja forman parte de la comisión de fiestas la quinta de los 30 años y la de los 17. Si el coronavirus borra del calendario los festejos de 2020 es posible que en 2021 sea la misma quinta, que ya tendrá 31 años, la que se ocupe de la organización por lo que “el Covid-19 cambiará los ciclos”, reconoce Oliver. Los chavales de 17 de este año serán los quintos en 2020 y tendrán que organizar su propia fiesta. Lo harán previsiblemente con la ayuda de los quintos de este año que solo han podido organizar el carnaval y poco más, pero sin la experiencia que da los preparativos de las fiestas de agosto. 

Los toros, en el campo

Otro de los sectores vinculados a los festejos populares que saldrá tocado de esta crisis es el taurino. José Antonio Adell es el propietario de la Ganadería Teodoro Adell, de Castellote y precisa que entre marzo y junio tiene 8 bajas, entre cancelaciones y aplazamientos con los que no se sabe lo que va a pasar: “Los más optimistas hablan de hacerlos en septiembre, los menos lo dejan ya para el año que viene”, comenta. 

En estos momentos es cuando más animales hay en las explotaciones de reses bravas y en los siguientes meses se concentra su temporada de trabajo anual, ya que entre Semana Santa y el Pilar se celebran prácticamente todos los festejos taurinos, aunque el periodo de mayor proliferación son los meses de julio, agosto y septiembre. 

Adell no tiene además ningún contrato firmado porque el ganadero sella los tratos “con un apretón de manos” y deja la formalización de los papeles para unas semanas antes del festejo, cuando ya hay que iniciar los permisos para llevarlo a cabo. 

Concreta que estar un año parado supone un gran problema para las ganaderías de bravo que tienen los mismos gastos que si trabajaran pero ningún ingreso. Además, sus toros pueden destinarse a carne, pero el precio del vacuno ha caído en picado por el cierre de los restaurantes derivado de la crisis sanitaria. Sin embargo, Adell deja una puerta abierta al optimismo e indica que las abundantes lluviosas de esta  primavera favorecen la aparición de unos buenos pastos que ahorrarán muchos gastos en pienso a los ganaderos.

Mosqueruela y Puertomingalvo cancelan las romerías y Villar del Cobo suspende todos los eventos de 2020

La romería al Santuario de la Estrella, en Mosqueruela,no se hará por primera vez desde 1938. Se debía de celebrar el último domingo de mayo pero el Ayuntamiento, junto a la Cofradía de la Estrella y la Comisión de Fiestas, ya han decidido cancelarla.

La alcaldesa de Mosqueruela, Alba Lucea, indica que en el año 1938 y a consecuencia de la guerra civil la romería no pudo realizarse con normalidad y se trasladó al 6 de septiembre, un aplazamiento que ahora no harán para proteger a los habitantes de La Estrella, que son personas de riesgo ante el Covid-19 por su avanzada edad.  “Es una fiesta muy esperada por todos los vecinos y nos duele mucho, más cuando ves que incluso con la guerra se llevó a cabo, pero se tiene muy en cuenta a Martín y a Sinforosa,  las personas que viven allí”, relata. Lucea matiza matiza que otro momento relevante en la historia reciente del santuario fue 1940, cuando se bajó a la Virgen de la Estrella a hombros haciendo turnos porque había sido destruida.

También se han suspendido las fiestas de San Pedro, previstas para este mismo fin de semana. La comisión de fiestas de Mosqueruela había serigrafiado vasos de plástico para evitar el consumo masivo de plásticos y el Ayuntamiento los repartió ayer por todas las casas del pueblo para que hoy los vecinos puedan hacer, al menos,  un brindis virtual.

Cantavieja y Torres

Por su parte el Ayuntamiento de Cantavieja y la comisión de fiestas han decidido suspender la Feria de Mayo, organizada por ambas entidades, y programada para los días 30 y 31 de mayo.

 Se trata de la fiesta que inaugura la temporada de verano en la localidad. Debido a la pandemia global por Covid-19 y las medidas preventivas de salud impuestas tanto la comisión como el ayuntamiento de Cantavieja, pensando en la seguridad de sus habitantes, han acordado de mutuo acuerdo suspenderla para este 2020.

 En Villar del Cobo el Ayuntamiento ha ido mucho más allá y ha emitido un bando en el que decreta “la suspensión de cualquier evento festivo en el municipio para todo el año 2020”. 

También en Torres de Albarracín la comisión de fiestas anunció ayer que se suspendían las fiestas en honor a la Virgen del Carmen. “Nos encantaría poder juntarnos, bailar, brindar, disfrutar... Pero es momento de ser responsables, y así poder seguir celebrando todos y todas estas fiestas muchos años más. También comunicaros que la comisión actual seguirá, y volverá con más fuerza en septiembre si todo está mejor ya que lo último que se pierde es la esperanza... O el año que viene, puesto que estamos preparados para continuar el próximo año”, indicaron a través de las redes sociales.