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Ovejas descarriadas: la supervivencia se decide por la capacidad de adaptación Ovejas descarriadas: la supervivencia se decide por la capacidad de adaptación

Ovejas descarriadas: la supervivencia se decide por la capacidad de adaptación

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Francisco Herrero

Lunes, 4 de mayo. Spotify

La semana pasada esbocé en esta página lo que puede ser la nueva realidad pospandemia. Al mismo tiempo, Christina Rosenvinge publicaba en El País Semanal su visión del futuro de la industria musical. Y el porvenir se asemeja oscuro para el artisteo de balcón. Los ingresos mensuales que la cantante recibe de Spotify por las reproducciones de su obra no alcanzan ni para pagar la suscripción a la versión mejorada de la plataforma digital. Y eso que la autora lleva treinta años en el candelero.

Christina apunta que tiene confianza en la venta de vinilos y CD para seguir produciendo discos. Se olvida de las casetes, que hay mucho gusto clasicorro hoy en día por la baja fidelidad. Lo cierto es que explicar a la masa juvenil que se echa a los brazos de Omar Montes o Bad Gyal la importancia de comprar soportes físicos es como tratar de convencer de lo práctico que sería el disco de marcar en un móvil.

Martes, 5 de mayo. Ciudadanos

Inés Arrimadas se ha bajado los pantalones para venderse al gobierno estalinista español. Mañana, Ciudadanos votará sí a seguir adelante con el estado de alarma. Inés es una traidora a la patria y, por eso, Juan Carlos Girauta acaba de anunciar por las redes sociales que ha pedido la baja como afiliado del partido.

El relato oficial consiste en demostrar la pertenencia al centro sociológico por votar sí al estado de alarma. Que yo recuerde, sin hacer esfuerzos, Ciudadanos ha abrazado la socialdemocracia de Susana Díaz, ha abanderado el liberalismo de amiguetes de este país, o coquetea en diversos gobiernos autonómicos con las ideas más ultra de la derecha. En apariencia, son una bisagra más grande que el PAR. Pero Girauta, que sabe lo que dice, afirma lo contrario: “No trabajamos tanto para construir una bisagra”.

Ciudadanos es una formación escorada hacia la bancada conservadora. Antes y ahora. Por mucho que el aparato trate de convencer de lo contrario a un electorado con supuesta memoria de pez. No. Votar sí al estado de alarma ni te asimila al PSOE o a Podemos ni te mueve en la escala ideológica. Y Girauta se va porque tendrá una oferta más jugosa en el reposte.

Miércoles, 6 de mayo. Marquesa de Griñón

Tamara Falcó será la nueva marquesa de Griñón. El recién fallecido marqués, que en paz descanse, ha dejado escrito en testamento que el título vaya a parar a Tamara. El resto de la descendencia ya tenía derecho a otros privilegios nobiliarios y la ganadora de MasterChef Celebrity era la única cuyo porvenir en la nobleza pintaba mal.

La buena nueva se ha sabido por Instagram, como se dan ahora los comunicados relevantes. “Gracias Papi por dejarme el legado más bonito que se le puede dejar a una hija: tu amor”, ha sido la enigmática frase de una multientrada presidida por la primaveral imagen de la celebridad portando el libro Entender el vino, escrito por su padre. La deducción aristocrática procede de la tercera fotografía, el escudo de armas del marquesado de Griñón.

A veces pensamos que esto de los títulos es cosa del pasado, pero no. Juan Carlos I estrenó el reinado otorgando el señorío de Meirás y el ducado de Franco y acabó dignificando abolengos más ligados a la ciencia, como los marquesados de Fuster y de Grisolía. Por en medio, agradeció a gentes con mérito en la literatura, la política, la banca o el empresariado. Felipe VI, no obstante, tiene el casillero en blanco. Y no parece que quiera mojarse mucho en el asunto.

Jueves 7 de mayo. Madonna

Madonna es inmune al coronavirus. Ha pasado la enfermedad. Madonna es eterna. Pero sabe que no todo el mundo tiene su buena constitución y por ello ha donado un millón de dólares para el desarrollo de la vacuna. Supongo que aquí estaréis pensando que eso es calderilla para ella. Pero, ¿y para vosotros?

Madonna cree que se infectó en París, durante la gira en la que estaba metida y que tuvo que cancelar por la pandemia. La artista y gran parte del equipo pensaban estar pasando una gripe fuerte y resulta que era la enfermedad de moda. Por suerte, toda la troupe está ya sana y salva.

La entrada de Instagram, donde se dan ahora los comunicados relevantes, con Madonna en la bañera cobra sentido. Fue una publicación que acabó borrando porque nadie la entendió. En ella veíamos a la estadounidense metida en una bañera llena de agua blanquecina, rodeada de pétalos de rosa, declarando que el coronavirus nos iguala a todo el mundo. “No hay diferencia si eres negro o blanco, si eres chico o chica. Si la música mola, te dará una nueva vida. Eres una estrella, sí, eso es lo que eres, lo sabes”, cantaba en uno de sus grandes éxitos. Madonna estaba aplicando el voguing, uno de sus leitmotiv, a la enfermedad. Ella, la rica, la había o la estaba pasado. Ha tenido suerte. El marqués de Griñón, no.

Viernes, 8 de mayo. Banksy

El artista urbano Banksy es portada hoy en El País. Hace un par de días publicó una entrada en Instagram, donde se dan ahora los comunicados relevantes: un niño juega con un muñeco que representa a una enfermera con capa de superhéroe; al fondo, una papelera contiene un par de muñecos de Batman y Spiderman.

Todo el mundo ha interpretado que es un tributo a los verdaderos superhéroes de la pandemia. La campeona es una sanitaria y no las estrellas de cómic con superpoderes. El juego de palabras con las que el autor acompaña la ilustración, no obstante, da pie a una segunda lectura. ¿Por qué muy pocas personas estamos deduciendo la segunda explicación, que es una crítica a la sociedad actual por convertir a los equipos médicos en personajes gloriosos a pesar de que acabará tirándolos a la basura porque esto es solo una moda?

Banksy nos ha calado bien. El original está en un hospital de Southampton y dentro de un tiempo se prevé una subasta para así obtener fondos destinados al sistema de salud británico. Va a ser la única manera de que el capital acabe financiando la sanidad pública.

Sábado, 9 de mayo. Multiservicio rural

El sábado es día de compra. Yo iría al multiservicio rural, pero es que es la tienda del olvido. O, bueno, la tienda que nos inventamos cuando nadie en su sano juicio montaría un negocio así en un pueblo. Si no, no se entiende por qué se perdieron los comercios que ya existían antes.

Este año los multiservicio se llevarán 110.000 euros del presupuesto de la Diputación. A pesar de que con el modelo actual muchos siguen sin ser un negocio viable. Porque no son negocio. Son otra cosa. Quienes regentan o han regentado uno lo saben bien.

Domingo, 10 de mayo. La reflexión

La COVID-19 supondrá grandes cambios. El mundo urbano ha descubierto que los espacios muy abiertos proporcionan libertad. Quienes poseen la casa de los abuelos en la España holgada, tienen el símbolo del dólar en los ojos solo de pensar en plusvalías; las inmobiliarias anuncian un buen nicho de negocio. Quienes viven en un pueblo se regocijan de la caída del turismo de masas playero y urbano, por suponer una oportunidad. Buenas noticias.

La mala noticia es que el espacio abierto y libre será una urbanización a lo Valdelobos y el nuevo turismo rural enterrará los restos de la vida agrícola y ganadera de los pueblos.

La foto de la semana / El bar de Roma

A partir de mañana, vas a poder ir al bar. Va a ser una bacanal, todo lleno de luces. Para tu fortuna, no tendrás que pedir cita previa, como te ha pasado esta semana con la peluquería. El señor de la foto no se ha enterado, a buen seguro. O a lo mejor está llamando a alguien para avisarle de que llega tarde a la cita. Es la nueva realidad de la fase uno. Una realidad donde no tienes consciencia de la situación en la que vives.