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La segunda maratón consecutiva de Chema García ya es historia La segunda maratón consecutiva de Chema García ya es historia
Chema García, en carrera durante la segunda etapa, con Villar del Cobo al fondo

La segunda maratón consecutiva de Chema García ya es historia

El corredor de Bronchales vuelve a batir los tiempos previstos y ya ha cubierto casi 90 de los 260 kilómetros
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José Luis Rubio

Algo menos de seis horas empleó ayer Chema García en completar la segunda etapa del Reto 260 Por la Sierra de Albarracín. La segunda maratón consecutiva de las seis que afronta este corredor de montaña de Bronchales para tratar de dar visibilidad a una de las zonas más salvajes de la provincia de Teruel y para ayudar a sus vecinos afectados por la epidemia de coronavirus.
García partía de Griegos puntual, a las 8:00 horas, tal y como estaba previsto. Después de los primeros kilómetros las buenas sensaciones regresaron a sus piernas y los tiempos empezaron a ir cayendo, adelantando cada vez los horarios previstos. “Es chula, ha sido una etapa muy bonita” recordaba entre sonrisas el deportista, sorprendido por la senda que llega a Villar del Cobo y que luego le sacó del río subiendo por un cañón para salir a Guadalaviar. Desde allí se enfrentó ala “chincheta del Portillo” para después “dejarse caer “ hacia el valle, “exuberante”. Desde ahí, y una vez  salvado la mayor parte del desnivel de la jornada llegó al Nacimiento del Tajo y, después, a Calomarde por el tramo de las pasarelas del Río Blanco, que no conocía. “Mira que he pasado mil veces y no lo había visitado nunca. Se nos quedan muchos rincones por conocer”, reconocía ayer por la tarde.
Los miedos y las dudas hicieron ayer su aparición en el tramo central de la etapa. Un inoportuno pinchazo en una de sus rodillas desataron una tormenta de angustias en su cabeza que le acompañaron hasta la bajada de Guadalaviar. “Me entraron las dudas, todo lo malo” recordaba por la tarde mientras explicaba que incluso llegó a caerse en este tramo.
En la bajada del Portillo, después de haberse alimentado en carrera, García recuperó la finura en sus piernas y, sobre todo, en sus emociones para completar la segunda jornada  con éxito.