Dicho de lo que había perecido o se había amortiguado: Volver a vivir o ser”. Así define en su diccionario la Real Academia Española el término rebrote. Vivimos una época marcada por ellos, y por más que nos avisaron en su día de que tarde o temprano llegarían, estos no dejan de sorprendernos. Con los nuevos contagios multiplicándose y esparciéndose por toda nuestra geografía, lo que en condiciones normales deberían haber sido unos plácidos meses de asueto se han tornado en el verano más tenso e incómodo posible.
Aunque la siempre omnipresente pandemia debe ocupar ahora mismo todas nuestras prioridades, los rebrotes de coronavirus no son, en cambio, los únicos preocupantes que se están produciendo durante los últimos días en nuestro país.
Por ejemplo, el hecho de que una discoteca sea el epicentro de un nuevo foco de contagios en Córdoba o que en Pamplona tuvieran que intervenir las autoridades para evitar la celebración de un partido de infectados contra negativos revela, sin duda, un notable rebrote de estupidez. Más aún, teniendo en cuenta que el organizador del encuentro aclaraba en su cartel promocional que se trataba de un “partido benéfico en favor de los enfermos de Covid-19”. El mundo no veía un gesto caritativo de tal altura desde Maradona y Julio Alberto en su pachanga contra las drogas.
También ha rebrotado, para sorpresa de nadie, el manido debate sobre los límites del humor. En esta ocasión, el afortunado protagonista ha sido el humorista David Suárez, para el cual la Fiscalía pide un año y diez meses de cárcel por hacer un chiste de dudoso gusto sobre las personas con síndrome de Down. Aunque ya sabemos que el Ministerio Público pide penas de prisión como los niños hacen su carta a los Reyes Magos –de primeras tiramos a lo grande y luego ya vemos qué nos traen–, la petición resulta absurdamente desproporcionada hasta para su habitual redondeo a la alta.
Como broche final, para esclarecer el acalorado debate sobre a qué huelen los chistes y de qué color es la comedia, el programa matinal La Mañana de La 1 contó en su panel de expertos con Juan Muñoz, antiguo integrante del extinto dúo humorístico Cruz y Raya. Tengo que reconocerlo, este último rebrote sí que no me lo esperaba.