El aumento de casos en Aragón durante los últimos días de la semana ha llevado a la comunidad autónoma a cerrar toda la actividad no esencial a las 20.00 horas. Y es que la evolución de los datos en las últimas horas hace indicar que podríamos estar pronto ante un nuevo confinamiento en España, si bien se espera que no sea tan severo como el vivido en los meses de marzo y posterior.
En este sentido, la consejera de sanidad de la comunidad, Sira Repollés, ha anunciado nuevas medidas recalcando la responsabilidad individual de cada uno de los ciudadanos para hacer frente a esta crisis.
En esta ocasión no queremos que el confinamiento te pille por sorpresa y, si vas a teletrabajar durante este periodo, debes estar preparado para hacerlo de la manera más cómoda posible.
Prepara tu espacio de trabajo
Trabajar en casa puede convertirse en todo un reto ya que, en ocasiones, contamos con espacio limitado para hacerlo de forma tranquila. Por ello, te recomendamos buscar un lugar bien iluminado, cerca de una ventana donde pueda entrar la luz natural. Si además cuentas con una habitación específica podrás aislarte del resto de ruidos de la casa y tener una mayor concentración.
Evita cualquier tipo de distracciones a la vista para no sucumbir a la tentación de poner en pausa tus tareas laborales. Un buen escritorio y una silla cómoda son necesarias para evitar dolores innecesarios. En ocasiones las empresas proporcionan este tipo de elementos a sus trabajadores, por lo que no está de más que recojas de tu puesto de trabajo todo lo que pueda facilitarte tu labor en el día a día.
De la misma forma contarás con tu ordenador de trabajo. Si es un ordenador portátil de reducidas dimensiones te recomendamos utilizar una pantalla externa, que podrás conectar mediante un cable VGA de RS Components para no forzar la vista de forma excesiva. Ubicándola a una distancia adecuada junto a la pantalla de tu ordenador portátil te permitirá aumentar tu productividad.
Comienza temprano
Estamos acostumbrados a realizar nuestra rutina para ir a la oficina. Desayunar, asearse, vestirse… pero trabajando desde casa muchos de esos puntos nos los saltamos y se convierte, por tanto, en una transición un poco abrupta pasar desde la cama a la silla donde vamos a pasar el resto de nuestra jornada. Comenzar pronto, previo aseo y desayuno, nos permitirá ser más eficientes en nuestra forma de trabajar. Conseguirás progresar más rápidamente durante el día. Si por el contrario prolongas tu desayuno durante excesivo tiempo te arriesgas a que la pereza invada tu trabajo.
Organízate como si estuvieses en la oficina
A pesar de que trabajando en casa tenemos un menor control y podemos considerarnos nuestros propios jefes, una excesiva libertad y falta de planificación pueden hacer que la productividad del día se esfume en apenas unas horas. Intenta mantener la organización que tenías en tu lugar de trabajo dividiendo tus tareas y organizándolas en diferentes franjas horarias.
Solo con responsabilidad, concentración y fuerza de voluntad conseguirás ser productivo y realizar las tareas correspondientes a tu jornada laboral.
