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Cristina Monge, profesora de Sociología y analista política: “Las renovables se deben poner con transparencia y beneficiando al territorio” Cristina Monge, profesora de Sociología y analista política: “Las renovables se deben poner con transparencia y beneficiando al territorio”
Cristina Monge es profesora de Sociología en la Universidad de Zaragoza y analista política

Cristina Monge, profesora de Sociología y analista política: “Las renovables se deben poner con transparencia y beneficiando al territorio”

“La Agenda 2030 no es para las ciudades o el mundo rural, sino para el conjunto del planeta”
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Cruz Aguilar

Cristina Monge es profesora de Sociología en la Universidad de Zaragoza y analista política. El pasado viernes intervino, a través de videoconferencia en el II Foro sobre Despoblación que la Cadena Ser organizó en Calamocha con una potencia titulada Agenda 2030, sostenibilidad, economía verde y pandemia. ¿Una oportunidad para el medio rural?

-¿Ha cambiado la pandemia la situación del medio rural?

-Sí, sobre todo la visión que tenemos sobre las ciudades y por tanto sobre el conjunto del territorio, estamos entendiendo que nos necesitamos unos a otros, que dependemos del mundo rural en cuestiones como la alimentación, si nos hubieran cerrado las ciudades no hubiéramos podido autoabastecernos. Se ha recuperado un concepto de calidad de vida, en relación con la naturaleza, con entornos más tranquilos y se ha recuperado la importancia del medio ambiente, somos parte de la biosfera y en la medida que cuidemos de ella cuidaremos de nuestra salud. Todo ello nos hace pensar nuestras dependencias y salta por los aires la división campo-ciudad para mostrarnos una visión hacia ciudades medias como Teruel.

-¿La situación sanitaria está provocando una migración de la ciudad hacia el campo?

-Sí, de repente el medio rural se relaciona con la calidad de vida, hay una tendencia a volver porque se concibe como un espacio más seguro, cuando hasta ahora había sido al revés. Es curioso ver cómo se ha ido cambiando esa visión al relacionar naturaleza y salud, en la medida que entendemos que nuestra salud depende del medio natural relacionamos espacios más seguros, con un mejor medio natural, con lugares donde se puede vivir mejor. El mundo rural concebido como de fin de semana o vacaciones ya existía, lo que ha cambiado con la pandemia es que ahora mismo ya no es símbolo de descanso sino de seguridad y de calidad de vida, creo que no tardaremos mucho en ver cómo personas que han vivido toda su vida en ciudades y tenían un sitio al que iban de fin de semana se están planteando hacerlo al revés, acudir el fin de semana a la ciudad en busca de ocio. Eso dibuja un cambio generacional que se empieza a ver, no de forma generalizada.

-En su charla hizo referencia a los proyectos de energía verde que, comentó, no se están desarrollando como debieran.

-Estamos repitiendo errores que cometimos en el pasado con otro tipo de infraestructuras, las renovables son imprescindibles en la lucha contra el cambio climático y para renovar nuestra economía, son irrenunciables pero hay que hacerlas bien y de acuerdo con el territorio. Requieren una participación de forma planificada y muy transparente, poniendo todos los obstáculos ante cualquier intento especulativo que surja, como ya han surgido, o de corruptelas  en algunos casos y corrupción en otras.

-¿Dónde está el equilibrio con las renovables?

-En fomentarlas al máximo potenciando la capacidad del territorio y con acuerdo del territorio, no se pueden hacer al margen de lo que el territorio plantee, los territorios tiene que beneficiarse de esa energía y hacerlo todo con mucha transparencia.

-¿Cree que está faltando esa transparencia?

-Creo que no se está extremando lo debido, hay que apostar mucho más por la transparencia.

-¿En ello juega un papel fundamental el teletrabajo?

-Claro, ahora hay una nueva división social, que es la de la gente que puede teletrabajar y los que no. Los que pueden desarrollar sus trabajos a través de internet tienen más posibilidades de seguir haciéndolo y de forma segura, les aporta mucho margen de maniobra. Eso sí, debe apoyarse en una buena red.

-¿Es internet tan necesaria como el agua o la electricidad?

-Totalmente, te conecta con el mundo, forma parte de un servicio básico y esencial para vivir. Te permite vivir con libertad donde quieras y en condiciones de seguridad, poder teletrabajar en tu casa, en los momentos de mayor confinamiento mucha gente hacía la compra por internet.

-¿La pandemia ha impulsado el comercio por internet?

-Sí, pero no solo las compras en grandes supermercados, sino también al comerciante de tu barrio. La covid ha hecho que comercios o sectores que hasta ahora no se habían incorporado a este mundo del e-comercio se sumen. Ya hay comercios pequeños de barrio que reciben pedidos por internet o por WhatsApp y luego la reparten a domicilio. No todo el mundo necesita tener una tienda por internet compleja, sirve con una pequeña red de WhatsApp, una de las consecuencias de la pandemia es que ha ampliado el campo del tecnoespacio, todas las funciones que hacemos a través de la red, incluso tomar cañas con los amigos nos las tomamos por zoom.

-¿Quiénes deben de cumplir los objetivos de la Agenda 2030?

- La Agenda 2030 no es para las ciudades o el mundo rural, sino para el conjunto del planeta, otra cosas que cada uno para ponerlos en marcha tenga que hacerlo de forma diferente, hay que adaptar las formas pero objetivos son los mismos. 

-¿Cómo estamos en el cumplimiento de esos objetivos?

-Vamos retrasados, estamos en la senda pero vamos despacio.