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“Estamos superando las previsiones de actividad y eso nos obliga a acelerar las inversiones del Plan Estratégico” “Estamos superando las previsiones de actividad y eso nos obliga a acelerar las inversiones del Plan Estratégico”
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“Estamos superando las previsiones de actividad y eso nos obliga a acelerar las inversiones del Plan Estratégico”

Alejandro Ibrahim, en el Aeropuerto de Teruel esta semana

Alejandro Ibrahim ha cumplido su cuarto año como director del Aeropuerto de Teruel y en ese periodo esta infraestructura no ha dejado de crecer en actividad.

Alejandro Ibrahim ha cumplido su cuarto año como director del Aeropuerto de Teruel y en ese periodo esta infraestructura no ha dejado de crecer en actividad. El escepticismo inicial en torno a este proyecto de aeródromo industrial centrado en el estacionamiento, mantenimiento y reciclado de aeronaves ha dado paso a un reconocimiento generalizado como ejemplo de éxito en medio de un cúmulo de proyectos aeroportuarios fallidos en España, como los de Castellón, Ciudad Real o Lleida.

-El aeropuerto acabó 2016 con un nuevo récord de operaciones. ¿Cuáles son los datos?

-Hemos cuadruplicado las cifras de operaciones del año anterior y, dentro de ellas, prácticamente se han triplicado las de grandes aeronaves. Ha sido el año de mayor crecimiento en operaciones. Para nosotros es importante porque va afianzando el modelo de negocio y es una prueba de que la actividad de los clientes instalados aquí se va incrementando.

-El aumento se ha debido en gran medida a los vuelos de la escuela de pilotos Flying Time Aviation (FTA), ¿no?

-Sí, en el último cuatrimestre, que es cuando iniciaron su actividad, realizaron un millar de operaciones, la mitad del total de 2.085 registradas en todo el año en el aeropuerto. Pero el resto de las operaciones también han crecido en gran medida, entre ellas las de grandes aeronaves relacionadas con la actividad de Tarmac, que han aumentado de 128 a 358. Descontando los vuelos de la escuela de pilotos, el crecimiento también ha sido muy elevado.

-¿Y qué perspectivas tienen para este año?

-Basándonos en la estimación del incremento de operaciones que tendrá Tarmac, que seguirá creciendo, y en las de la escuela de vuelo, esta vez durante todo el año. esperamos superar las 6.000.

-¿Necesita el aeropuerto mejorar sus infraestructuras, como reclama Tarmac?

-Cualquier aeropuerto que crezca a este nivel y quiera mantenerlo lógicamente tiene que plantearse ampliar también sus infraestructuras. En el Plan Estratégico que elaboramos para el periodo 2016-2020 ya se diseñaban las líneas a seguir y se están cumpliendo. Pero las previsiones que hicimos cuando se redactó ese documento en 2015 se están superando y eso nos obliga a adelantar las inversiones que planificamos. Por ejemplo, este año tendremos que comprar un nuevo camión de bomberos para garantizar la operativa diaria y duplicar la superficie de la plataforma de estacionamiento de aeronaves ante la zona de hangares. Teníamos un hangar principal, en breve se terminará el segundo y con ello quedará concesionada prácticamente toda la plataforma. Necesitamos más espacio disponible para atender también las operaciones de la escuela de vuelo y de aviación ejecutiva y general. Y también estamos trabajando desde hace más de un año en la introducción de un sistema de aterrizaje instrumental.

-El Consorcio del Aeropuerto, formado por el Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento de Teruel, dio un paso adelante al comprometer para este año una inversión de 4 millones de euros, muy superior a la media de 1,5 millones de los ejercicios previos. ¿A qué se destinarán y en qué orden de prioridad?

-Pondremos en marcha cuanto antes la ampliación de la plataforma de aeronaves, presupuestada en 1,3 millones de euros, la compra del camión de bomberos que costará en torno a 180.000 euros, la redacción del proyecto de la nave logística para reciclado de aeronaves y seguiremos trabajando en la implantación del sistema instrumental. Independientemente de que sea importante para Tarmac, también lo es para el aeropuerto y para sus otros clientes.

-¿Por qué no se ha hecho hasta ahora y se ha mantenido únicamente la aproximación visual?

-Con el nivel de actividad de hace tres años no tenía mucho sentido abordar esta inversión, pero con el actual sí. Llevamos un año trabajando en ello, lo pusimos en marcha con la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (Aesa) y mediante un contrato con la Agencia Europea de Sistemas de Navegación Global por Satélite (GSA), que nos concedió una subvención para estudiar la viabilidad del proyecto, con resultado positivo. Se han hecho los estudios de campo y posteriormente hemos tenido varias reuniones con Aesa y con Enaire. No es una labor visible, pero es un procedimiento administrativo complejo y que dura un par de años. Hemos superado la primera fase, ahora estamos en la segunda y este mes tendremos nuevas reuniones con Aesa, con Enaire y con Aviación Civil para su implantación, que requiere varias actuaciones: modernizar la torre de control con el equipamiento que exige la normativa, un trabajo administrativo que culminará con la publicación en el Boletín Oficial del Estado de la asignación del Servicio de Información de Vuelos Afis para el aeropuerto y un nuevo equipamiento de balizamiento en la pista.

-¿Pero se plantean implantar el sistema Egnos de ayudas a la navegación por satélite o uno por radio como el ILS (Sistema de Aterrizaje Instrumental), más generalizado hasta ahora?

-Nosotros hemos apostado por el sistema de futuro y todo el mundo da ya por seguro que la navegación aérea se va a realizar por satélite. De momento se utilizará el GPS, pero en Europa se sustituirá después por el programa Galileo, que ya está en marcha. A través de sus satélites se hará un seguimiento de toda la información de las aeronaves y se guiará a los aviones en las aproximaciones a pista. Hay muchos aeropuertos que lo tienen ya instalado en Europa, sobre todo en Alemania y en Francia. En España también hay algunos, aunque menos, pero se irá implantando poco a poco porque será obligatorio. Son unos deberes que tenemos que hacer para ponernos al día, no por capricho ni porque lo pida Tarmac, sino porque es una necesidad aeroportuaria.

-Todas las inversiones previstas para este año están condicionadas a la aprobación del Fondo de Inversiones de Teruel (Fite). ¿Le preocupa su retraso?

-No, porque el 23 de diciembre, por una orden del consejero de Vertebración del Territorio, José Luis Soro -también presidente del Consorcio del Aeropuerto-, nos transfirieron 1,7 millones del Fite de 2016 por reasignación de partidas. Eso nos permite tener un colchón para concluir el pago de actuaciones como la segunda fase de pavimentación de la campa o el hangar que estamos construyendo y poder iniciar las próximas en los primeros meses de este año, a la espera de que lleguen las cantidades adicionales del Fite de 2017.

-Las inversiones que reclama Tarmac superarían con creces ese importe de 4 millones de euros, contando un nuevo hangar de gran tamaño para pintura de aeronaves. ¿Espera que prosigan las aportaciones del Fite en años sucesivos?

-Tarmac ha planteado al Consorcio las diferentes necesidades que tiene y luego se verá la fórmula de financiación, pero por la envergadura de esos proyectos está claro que no se podrá terminar todo este año. Se han priorizado la nave logística o el sistema instrumental y hay otras infraestructuras que están planteando más a medio plazo.

-¿Las relaciones entre el Consorcio y la concesionaria son buenas o existe algún problema de coordinación, como afirmó la empresa?

-Yo creo que las relaciones son buenas, porque si no los resultados no lo serían. Esto es como una fórmula matemática: si el resultado no sale bien es porque no está bien planteado el problema. Yo creo que en este caso el problema está bien planteado y por eso tanto Tarmac como nosotros estamos obteniendo buenos resultados. Lógicamente ellos plantean sus requerimientos y a lo mejor quieren que se corra más, posiblemente por el crecimiento tan fuerte que están teniendo. En circunstancias normales, hay inversiones que se necesitarían en cuatro o cinco años pero que se pide adelantar porque la actividad ha evolucionado más rápido de lo previsto. Eso nos obliga, como gestores del aeropuerto y de la infraestructura, a acelerar lo que se puede. Pero la administración tiene unos tiempos que son inevitables por mucho que queramos correr.

-Otra empresa que avanza muy rápidamente es PLD Space, que desarrolla motores cohete de combustión líquida y está ampliando su banco de ensayos en el aeropuerto. ¿También plantean nuevas necesidades?

-En noviembre anunciaron que habían obtenido un contrato de la Agencia Espacial Europea (ESA), que les ha permitido recibir 750.000 euros, y ahora han presentado otras propuestas a ese organismo. Eso se traduce en más necesidades de infraestructura y en más capacidad de crecimiento. Ahora son en torno a diez personas, llevan aquí ya dos años con este banco de pruebas y que vayan ampliando su actividad con la ESA y con el Centro Alemán para Aviación y Vuelos Espaciales es importante para nosotros, porque es otra de las líneas de negocio destacadas del aeropuerto.

-¿Esa actividad de ensayo de motores cohete es compatible con las otras que se realizan en el aeropuerto?

-El aeropuerto tiene una superficie muy extensa y esa es una de sus ventajas competitivas. Tenemos 340 hectáreas, las empresas están ubicadas en los espacios que tienen asignados y con sus límites de seguridad. Este año se han hecho también cerca de 60 pruebas de motores de aviones grandes en pista y PLD ha llevado a cabo las suyas en sus instalaciones, que están a una distancia de 2,5 kilómetros de la zona de hangares. No hay interferencia alguna entre una actividad y otra guardando esa distancia de seguridad. De hecho, PLD lleva dos años aquí y no ha habido ningún tipo de incidente.

-La principal novedad de 2016 ha sido la instalación de la escuela de pilotos británica FTA y en los aeropuertos de Zaragoza y de Huesca también se han implantado empresas de este tipo. ¿Hay suficiente demanda para que funcionen todas?

-Afortunadamente sí. El tráfico aéreo está creciendo a una media del 4% o 5% anual y en los países asiáticos y en vías de desarrollo a un nivel mucho mayor. La formación de pilotos en Europa, especialmente en Inglaterra, tiene un reconocimiento mundial muy importante. Las escuelas de vuelo británicas forman a un número elevado de alumnos y el sector demanda profesionales. Para desarrollar su actividad, necesitan un sitio idóneo para volar y Teruel tiene un clima muy adecuado, con muchos días soleados. Las avionetas de FTA vuelan continuamente y, de hecho, aquí duplican o incluso triplican el número de operaciones que realizan en su sede de Brighton. Se instalaron a finales de septiembre, ya han duplicado su número de alumnos, esta semana han incorporado una nueva avioneta para las prácticas y tienen perspectivas de seguir creciendo.

-En 2016 también instalaron oficinas dos empresas vinculadas al mantenimiento o venta de equipos aeronáuticos, World Business Aerospace SAS y Aragón Aircraft Systems.

-Si, están empezando. Una de ellas está cerrando negociaciones con sus proveedores y la otra, que hace temas de importación y exportación, está obteniendo sus primeros resultados. También están pidiendo permisos y autorizaciones, porque trabajar con material aeronáutico es complejo en cuanto a requerimientos administrativos. Estamos creciendo en número de clientes esporádicos: compañías aéreas que vienen de vez en cuando o escuelas de vuelo de los alrededores que trabajan con este aeropuerto y que vienen de Valencia, Zaragoza, Madrid o Lleida, pero que una empresa decida implantarse de forma permanente requiere una inversión importante y no todas están dispuestas a abordarla mientras no se aseguren un cierto nivel de actividad.

-De hecho, sigue vacía la zona industrial de 330.000 metros cuadrados con que cuenta el aeropuerto. ¿Qué previsiones hay sobre venta suelo?

-Tenemos ya registradas todas las parcelas, se entregó al Gobierno de Aragón el proyecto de reparcelación y ahora lo que resta es que lo apruebe el Departamento de Vertebración del Territorio. A partir de ese momento, podremos poner los terrenos a la venta.

-¿Qué tipo de empresas tendrían cabida en ese polígono?

-Las empresas que están instaladas ya en el aeropuerto, como PLD, Elson o FTA, ya han preguntado y lógicamente son las primeras que se pueden interesar porque tienen necesidad de espacio para oficinas u otras actividades, pero evidentemente corresponde a ellos tomar la decisión final de inversión. Lo importante es que el volumen de actividad del aeropuerto y de nuestros clientes vaya creciendo, porque con ello irá surgiendo demanda de instalaciones.

-¿Está cumpliendo el aeropuerto las expectativas de creación de empleo que se plantearon en sus inicios?

-Sí. Tarmac tenía un compromiso de crear cien empleos directos en su quinto año de funcionamiento y en menos de tres años desde que se empezó a contar su programa inicial ya ha cumplido el 60% de ese objetivo. En colaboración con el instituto de San Blas, ha empezado a formar a quince personas que hacen prácticas en el aeropuerto. La escuela de vuelo ha contratado a personal español, con un instructor que ya se ha incorporado. En total, el aeropuerto genera unos 160 empleos directos, entre las empresas que se han instalado, las subcontratas que tenemos para seguridad o bomberos y el propio Consorcio. Este año esperamos incrementar esa cifra.

-¿Siguen realizándose rodajes de anuncios publicitarios?

-Sí, pero conforme crece nuestro volumen de ingresos global por otras actividades, el porcentaje que representan en él los anuncios va aminorándose. Seguimos manteniendo una media de entre ocho y diez rodajes al año, pero cada vez se utiliza más la pista de vuelo para actividades aeronáuticas y menos para otro tipo de cuestiones, porque, como es lógico, priorizamos la actividad aeronáutica.

-Una mayor actividad hace crecer los ingresos pero también los gastos corrientes. ¿Sigue siendo rentable el aeropuerto?

-Sí. El aeropuerto empezó de cero, hemos crecido adaptándonos a la normativa y a las necesidades de nuestros clientes y nuestros ingresos de explotación ya duplican los gastos de explotación. Eso es una buena noticia para un Consorcio que depende de dos administraciones públicas, porque tenemos una capacidad gestora que nos permite ser autónomos en cuanto a gastos de funcionamiento, de personal, de seguridad, de mantenimiento, de bomberos, etcétera.

-Cuando en 2012 asumió la dirección del aeropuerto había muchas dudas en la sociedad turolense sobre el proyecto. ¿Ha cambiado esa visión?

-Yo lo siento así y así me lo transmiten. Los comienzos fueron duros porque había que poner en marcha una infraestructura que se había terminado de construir en 2011 y había dudas sobre si el negocio iba a funcionar de forma adecuada o si iban a venir empresas. No sabíamos que íbamos a tener el éxito que estamos teniendo y esta capacidad de respuesta al sector, que es importante para nosotros.

La conclusión es que hemos conseguido acertar en el modelo de negocio que queríamos y, a partir de aquí, se trata de ir creciendo y de generar cada vez más actividad. Creo que hemos demostrado que este es un negocio viable, que era lo importante.

 

Autor:EVA RON / Teruel