El cigarrillo electrónico se ha erigido como la alternativa al tabaco convencional y en la actualidad cuenta con un número de seguidores que no deja de crecer continuamente. Si estás interesado en conocer mucho más sobre el cigarrillo electrónico encuentra más aquí sobre el tema, pero además vamos a mostrar el funcionamiento de este tipo de dispositivos para dejar de fumar y para decir adiós a la adicción al tabaco para siempre. Así que sin más dilación vamos a mostrar el funcionamiento de los cigarrillos electrónicos.
Como funciona el cigarrillo electrónico
Aunque existen multitud de variantes dentro del concepto de cigarro electrónico, lo cierto es que la mayoría cuentan con una técnica y funcionamiento muy similar. De manera general el cigarrillo electrónico es un dispositivo que cuenta con una batería, unos atomizadores, un recipiente para los líquidos para vapear, una resistencia eléctrica y, por último, la boquilla a través de la cual hay que aspirar el vapor que emite.
Para utilizar un cigarrillo electrónico tan solo hay que presionar un botón para que la resistencia se caliente gracias a la energía que emite la batería, el líquido de vapear pasa de los atomizadores a la batería y gracias a ello se produce una gran emisión de vapor que tan solo hay que aspirar y expulsar como si de un cigarrillo convencional se tratase.
Existen modelos de cigarrillos electrónicos más sencillos y otros con más funcionalidades. Además la capacidad de la batería puede ser variable al igual que la cantidad de carga que consiga con cada recarga o el número de voltios con el que trabaja el dispositivo. Esto último además puede ser regulable en función del cigarrillo.
Qué son los líquidos para vapear
Los cigarrillos electrónicos funcionan gracias a los e-líquidos o líquidos para vapear. Este líquido puede tener nicotina o no en función de las preferencias del vapeador, así que es algo que elige de manera personal y está elaborado fundamentalmente con cuatro ingredientes diferentes. El más importante es el propilenglicol, que es la base del líquido; el glicerol, que produce la evaporación del líquido; los aromas alimentarios para producir sabor, y la nicotina, con diferentes niveles de concentración.
El propilenglicol es un compuesto de textura aceitosa y que para el vapeador resulta insípido, incoloro e inodoro. Además de para la elaboración de e-líquidos se usa en el mundo de la cosmética, en la industria alimenticia o en la farmacéutica. Es por tanto un líquido base 100% seguro, al igual que la glicerina vegetal o los aromas alimentarios, que pueden ser muy variados en sabores en función de las preferencias del usuario.
Cómo usar los cigarrillos electrónicos para dejar de fumar
Los cigarrillos electrónicos son usados en la mayoría de ocasiones por fumadores que quieren dejar atrás su adicción al tabaco para disfrutar de un mejor estado de salud y para evitar las molestias del tabaco a los fumadores pasivos de su familia o su entorno más cercano. Es por tanto un producto que se puede usar como complemento a otras técnicas para dejar de fumar o como sustituto en su totalidad.
Para dejar de fumar el vapeo cuenta con numerosos atractivos. En primer lugar es más saludable al eliminar las sustancias nocivas del tabaco, pero lo que verdaderamente atrapa a un fumador que busca una salida es la variedad de sabores que pueden experimentar. Gracias a la multitud de saborizantes que incluyen los líquidos para vapear muchos ex fumadores encuentran un líquido favorito y terminan prefiriéndolo al sabor del tabaco, aunque éste les gustara mucho.
También es más interesante que el tabaco para poder dejar de fumar puesto que su uso está permitido en muchos más establecimientos públicos además de que resulta un producto más económico que el tabaco. Y, por qué no, es también un producto que está de moda y que demuestra el interés del vapeador por adoptar un estilo de vida más saludable.
Como se puede apreciar son muchos los motivos que están detrás del incremento del uso de los cigarrillos electrónicos en la actualidad. La gran variedad de dispositivos, de líquidos de diferentes sabores y la no existencia de sustancias nocivas para la salud son los puntos fuertes que están impulsando el consumo de este tipo de cigarrillos entre fumadores que desean cambiar sus hábitos de vida a la vez que evitan perjudicar a las personas de su entorno.
