Síguenos
Tomás González, novillero turolense: “La afición turolense se va a encontrar  un torero que ha evolucionado mucho” Tomás González, novillero turolense: “La afición turolense se va a encontrar  un torero que ha evolucionado mucho”
Ayudado de Tomás González en Navas de San Juan. Miguel Arboledas

Tomás González, novillero turolense: “La afición turolense se va a encontrar un torero que ha evolucionado mucho”

“El año pasado disfruté en Teruel y quiero mostrar los avances que ha habido”
banner click 236 banner 236

El novillero alcorisano vuelve, esta tarde, a vestirse de luces en la Feria del Ángel de Teruel. Repasamos con él su camino hasta llegar aquí, y lo que está por venir en las próximas fechas.

-Para que el aficionado de Teruel te conozca más a fondo ¿de dónde te viene la afición al toro?

-Bueno, la afición del toro me viene por parte de mi familia. Yo me he criado en un ambiente donde se ha respirado mucho el toreo y el toro. Mi tío fue novillero y mi padre siempre ha estado muy vinculado a este mundo, mi abuelo también. Entonces, yo creo que lo he mamado desde chiquitito en casa.

-No vienes de una escuela taurina. ¿Cómo has ido desarrollándote como novillero?

-Bueno, pues al principio, cuando yo era un niño, pues mi tío y mi padre me instruyeron en el mundo del toro y ya después he ido conociendo a diferentes profesionales, que han sido quienes me han enseñado lo que se hasta ahora y han forjado mi técnica y mi forma de comprender el toro. Yo creo que rodearse de buenos profesionales que te enseñen el buen camino de la profesión es muy importante.

-Y en ese camino, ¿cómo eres como torero?

-Bueno, yo trato de ser un torero fiel a mí mismo, sobre todo. A mí me gusta torear puro, creo que como a todo el mundo, ¿no? Bueno me gusta torear puro, de verdad, con mis formas. Me gusta mucho encajarme, me gusta mucho reunirme con las embestidas de los animales y mostrar mi personalidad. Creo que tengo una personalidad que a la hora de torear puede sorprender y puede gustar al aficionado que al final es quien paga la entrada y el que tiene que salir contento de la plaza.

-La pasada temporada fue un cúmulo de triunfos...

-Sí, el año pasado fue una temporada, la primera mía como novillero con picadores, bastante bonita, fíjate. Fue una temporada que toreé siete noviadas con picadores y las cosas rodaron muy bien, ¿no? Quizá Teruel fue el único sitio donde bueno, por los aceros, ¿no? Yo creo que la faena al primer novillo le habría cortado dos orejas y hubiera sido una tarde también triunfal, como lo fue lo resto de mi temporada, donde salí a hombros en todas las novilladas, y con sensaciones muy buenas. El cambio es grande, pero tuve sensaciones muy buenas en lo que duró la temporada, que no fue mucho, pero sí que me sirvió mucho.

-Hablando de la pasada temporada, los jóvenes de tu edad están pensando en aprobar selectividad y tú compaginaste una carrera como novillero precisamente con pasar esa prueba…

-Sí, se me juntó un poquito todo. Se me juntó el debut con caballos con terminar los exámenes de segundo de bachillerato y después se me juntó casi el preparar la novilla de Teruel con la selectividad, pero bueno, yo creo que con organización y poniéndole interés a las cosas todo acaba saliendo, y salió muy bien. Pero fíjate, tenemos el ejemplo de Marco Pérez que me parece un toreo con una grandiosa capacidad, que toreó en Madrid seis novillos, hizo la selectividad y tomó la alternativa. Así que yo creo que querer, en este sentido, es poder y echándole ganas y esfuerzo salió para adelante todo.

-Este año uno de los cambios importantes de tu vida ha sido que te has trasladado a vivir a Guadalajara.

-Sí, ya a mediados del año pasado lo decidí con los diferentes profesionales que están dirigiendo mi carrera y me están acompañando. Son de la zona de Guadalajara y bueno, comencé a estudiar Derecho en la Universidad de Alcalá de Henares y me vine para acá. Estoy muy contento con las relaciones profesionales y personales que he hecho aquí en Guadalajara. Estoy feliz aquí, me encuentro estudiando, pero también vivo una vida de torero. Y te cambia también un poco tu manera de comprender la vida lo que te rodea, ¿no? Dejas de vivir con tus padres, sales de del nido de tu familia para vivir solo, aunque me encuentro muy arropado, pero eso también yo creo que forja a la persona y al torero.

-Y qué toro es más difícil, ¿el de la plaza o el del aula de derecho?

-Puf, yo creo que el del aula de derecho, o por lo menos me da más miedo. Da muchos quebraderos de cabeza también, pero poco a poco. Al igual que el toreo, las carreras universitarias suelen ser carreras de fondo, así que con paciencia yo creo que lo acabaré sacando para adelante. Tampoco ha ido tan mal el primer curso, el balance ha sido bastante positivo, así que contento por esa parte también.

-Y balance positivo también en lo que va de temporada, Arles, Boujan, Navas de San Juan…

-Sí, mis sensaciones han sido buenísimas. La temporada ha empezado genial en una novillada en Vinaroz donde las cosas rodaron genial. Toreé muy a gusto a mis dos novillos y después, en el festival de Gimeaux, también tuve sensaciones muy buenas. Ha sido una lástima este pasado fin de semana que se me haya escapado un triunfo tan rotundo en Navas de San Juan donde probablemente le habría cortado los máximos trofeos al quinto novillo de la tarde, a mi segundo novillo, que fue un gran novillo de Martín Carrasco, con el que creo que me entendí muy bien y surgió una faena pues distinta y muy especial. Fueron unas sensaciones que yo prácticamente no había tenido nunca en una plaza de toros. El poder conectar así con un animal, pero lo marré con el acero y todo quedó en eso, en una gran faena que no se vio refrendada por los aceros, así que hay que canalizar todas esas buenas sensaciones y lo bien que me estoy encontrando en la cara de los animales con un gran triunfo. Y este sábado en Teruel tendrá que ser.

-Parada importante la de Teruel…

-Es una fecha que tengo señalada en el calendario desde que me comentaron que iba a ser parte de nuevo de la feria del Ángel. Sí que es verdad que esta temporada va a haber otras fechas importantes, pero esta quizás sea la primera. Es una plaza de segunda categoría en una feria tan rematada como ha sido este año. Así que sí, es una fecha que tengo apuntada. Lo que supone para un turolense torear en su plaza, creo que es algo precioso y el año pasado disfruté mucho la tarde y este año pues a mostrar los avances que ha habido, que han sido muchos, encontrado un torero con unas ideas mucho más claras, pero con las mismas ganas y la misma determinación que el año pasado e incluso más. Se van a encontrar un torero que ha evolucionado mucho y tendrá que ser una tarde importante.

-¿Qué te puede dar como torero la novillada del sábado?

-Bueno, pues como todas las los compromisos importantes, ¿no? Tienen que servirte a ti para ir forjándote tu camino. Y luego, personalmente también es algo en lo que me fijo mucho, pues mucha moral. Y la felicidad o la satisfacción de poder torear en tu ciudad con tu gente y tener un triunfo importante que tanto anhelo en esta plaza.

-Francia está siendo importante en tu carrera...

-Sí, ya tanto años atrás como ahora Francia está siendo importante para mí, además de los festejos públicos, he estado preparándome mucho en el campo en Francia, he recibido la ayuda de varios ganaderos que me han ayudado muchísimo y le tengo un especial cariño a al país vecino que me ha acogido también con los brazos abiertos y en el que he crecido mucho como torero.

-Y después de Teruel, ¿qué tiene por delante Tomás González?

-Bueno, pues después de Teruel, el día 27 de julio tengo una novillada en la Solana que va a ser televisada por Castilla la Mancha, que la podrán seguir los aficionados por la televisión pública. Y después tengo, el 30 de julio, otra novillada, y unos días después, en agosto tengo ya otras tantas fechas, tenemos un buen calendario por delante, en mediados de agosto hay unas cuantas novilladas seguidas, también a finales. Después septiembre también viene bastante intenso en cuanto a novilladas, así que vamos a torear un número importante de festejos, la verdad.