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Santiago Salvador, un anarquista castelserano célebre Santiago Salvador, un anarquista castelserano célebre

Santiago Salvador, un anarquista castelserano célebre

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Serafín Aldecoa

“Un estallido seco, seguido de una explosión tremenda, retumbó en el patio de butacas del Gran Teatro del Liceo en Barcelona. Se hizo la oscuridad, excepto en el escenario. Humareda casi sólida y un mar de astillas. Y, casi al instante, irrumpió una vorágine humana. Unos corrían, los otros saltaban y todos se atropellaban. Muchos cuerpos humanos mantenían una rigidez escultórica...”

Así narraba el periódico catalán La Vanguardia un hecho histórico cuyo protagonista fue un turolense nacido en el pueblo de Castelserás (Comarca del Bajo Aragón) cuyo nombre era Santiago Salvador Franch, el cual, sobre las 22.15 horas del 7 de noviembre de 1893, desde el quinto piso del teatro del Liceo, lanzó dos bombas Orsini casi seguidas sobre el patio de butacas, una de las cuales no explotó, pero la otra produjo alrededor de una veintena de víctimas y numerosos heridos.

El acto violento en el sancta sanctorum de la ópera de Barcelona y lugar de encuentro de la burguesía catalana tuvo repercusión internacional, de tal manera que el periódico francés Le Petit Journal,  publicado entre 1863-1944, recogió la noticia en la que incluyó una espectacular ilustración a toda plana del suceso en la portada, que hemos reproducido en este artículo y que llevaba como pie de foto: “La dynamite en Espagne”.

Unos años más tarde, en mayo de 1906, otro anarquista, en este caso Mateo Morral, también residente en Barcelona y relacionado con la Escuela Nueva de Ferrer i Guardia, imitó a Salvador y lanzó otra bomba Orsini, en este caso camuflada dentro de un ramo de flores, desde el piso cuarto de una vivienda la Calle Mayor de Madrid contra el monarca Alfonso XIII con María Cristina de Habsburgo Lorena el día de su boda al paso del cortejo nupcial que produjo un número de víctimas parecido al otro atentado

Salvador, al igual que Morral y otros militantes, presentaban un ideario muy extendido en las década final del siglo XIX y principios del XX entre ciertos sectores del anarquismo que se distinguían por la practica de la acción directa o la también llamada “gimnasia revolucionaria” que propugnaba Malatesta con la que pretendía acabar con la burguesía mediante la realización de actos violentos como atentados, atracos a bancos…

Volviendo a Santiago Salvador, diremos que había nacido en la localidad bajoaragonesa de Castelserás dentro de una familia “de opiniones carlistas”, según el historiador Cándido Marquesán del que hemos tomado algunos datos. Su padre, Vicente, que en principio gozaba de una posición económica aceptable, se arruinó y posteriormente sería abatido por la guardia civil “tras empezar a aterrorizar y a exigir cantidades económicas a los vecinos pudientes de Castelserás”.

Santiago, con 16 años, decidió marcharse a Barcelona donde residió durante tres años seguidos. No se afincaría definitivamente en dicha ciudad hasta que se casó. Se estableció como tabernero pero el negocio fue un fracaso así que se empleó como jornalero y allí entró en contacto con las  doctrinas anarquistas violentas.

Una de las acciones directas que realizó fue el atentado del Liceo. Tras realizarlo, Santiago huyó del lugar por las escaleras de la calle de San Pedro y a continuación marchó a Zaragoza pero fue detenido, juzgado y condenado a muerte por garrote vil. En un libro muy reciente de Eladio Romero sobre la muerte por garrote vil en España ecoge los últimos momentos de la vida de este singular luchador de acción directa.