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Ángel López, coach: “Debemos aprender a que nuestro cerebro trabaje en virtud de nuestros sueños” Ángel López, coach: “Debemos aprender a que nuestro cerebro trabaje en virtud de nuestros sueños”
El coach Ángel López (a la derecha), junto al director general del grupo RM, Juanjo Ríos

Ángel López, coach: “Debemos aprender a que nuestro cerebro trabaje en virtud de nuestros sueños”

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El coach Ángel López se propone ayudar a materializar sus sueños a quienes asistan a la conferencia Donde todos veían un desierto, alguien vio Las Vegas, que impartirá este jueves en Teruel. En su opinión, el futuro es “un desafío que ofrece una gran oportunidad de mejora para conectar con la plenitud y la felicidad que todos anhelamos”. La charla, organizada por RM Grupo en colaboración con CEOE-Cepyme Teruel, tendrá lugar en el salón de actos de la delegación del Gobierno de Aragón a las 20:00 horas.

- Del desierto a Las Vegas... ¿sobre qué versa su conferencia?

- Voy a empezar por el desierto. Vamos a ver cuál es el panorama en el que nos movemos, no solo a nivel profesional sino también personal, y cómo está funcionando el sistema comercial e interpersonal. Y desde ahí, nos vamos a desplazar a Las Vegas. Vamos a ver cómo podemos hacer de este desafío una gran oportunidad de mejora para, sobre todo, conectar con esa plenitud y felicidad que todos anhelamos.

- ¿Cuál es el camino para alcanzar ese propósito?

- Voy a ofrecer una serie de técnicas y a hacer una dinámica para que los asistentes no solo escuchen y puedan estar más o menos de acuerdo con lo que diga, sino que lo comprueben por ellos mismos. Soy fanático de las técnicas de alto impacto y también dedicaré un poco de tiempo a la visión, a cómo podemos crear en la mente y poner nuestro cerebro a nuestro servicio para que trabaje por nosotros. Hablaré de nuestro sistema de creencias, pero sobre todo me voy a centrar en la acción porque los resultados siempre vienen después de la acción, no antes. 

- También se propone que los asistentes visualicen un futuro esperanzador...

- Ahí es donde voy a hablar del sistema de creencias, qué es lo que creemos y qué nos atrevemos a hacer. Vamos a comprobar que podemos ir mucho más allá de nuestro sistema de creencias y cómo cambiarlo, cómo resetear nuestro cerebro. Todo lo que creemos es al final lo que sentimos, lo que hacemos y los resultados que tenemos. Vamos a ir directamente al sistema operativo porque es ahí donde está la clave. Tú puedes tener el mejor ordenador del mercado, pero si el sistema operativo está desactualizado, los resultados no van a ser buenos. Vamos a convertir a los soñadores en hacedores, no solo en personas que viven en la ilusión y en la fantasía, sino que materializan sus sueños. Voy a enseñar cómo se hace eso.

- ¿Y cómo podemos resetear nuestro cerebro?

- El cerebro está diseñado para que tengas una vida, para sobrevivir, pero no para tengas una vida extraordinaria. Ese es nuestro trabajo. El cerebro está trabajando para protegerte, para que no te ocurra nada malo, pero también te está impidiendo conseguir todos tus sueños. Aquello que más anhelamos está detrás de todo eso que aún no hemos hecho. Esa barrera -que son los miedos, nuestro cerebro más instintivo- está ahí para protegernos, pero en esa sobreprotección también nos perdemos muchas oportunidades. Voy a enseñar a cómo hacerlo de una forma rápida, eficaz y, sobre todo, divertida porque, cuando el cerebro juega, perdemos nuestros miedos. 

- Usted ha creado una fórmula matemática del éxito.

- El éxito tiene que ver con las oportunidades, que están continuamente y para todos, pero algunos son capaces de verlas y otros no. Depende de la preparación, pero no la del cerebro lógico racional sino también de una visión intuitiva. Debemos prepararnos para que el cerebro trabaje para nosotros y no solo en defensa de sus propios medios, sino también en virtud de nuestros sueños.

- ¿Cómo es ese panorama laboral del futuro para el que debemos prepararnos?

- Solo hay que abrir los ojos y darnos cuenta. Va a ser más competitivo. El capitalismo se va a radicalizar y se está globalizando todo, de forma que no solo competimos con nuestros vecinos, sino con todo el globo. Tenemos que trabajar habilidades diferentes. Además, nos enfrentamos al gran desafío de la tecnología, del que no se habla pero que está presente. Debemos adelantarnos para lo que va a venir y estar preparados para que ese gran tsunami no nos arrolle. Debemos aprovechar esa energía para convertir el desafío en un vehículo para alcanzar nuestros sueños y no en algo paralizante que nos impida vivir nuestra vida y nuestra felicidad.

- Usted habla del desierto de Las Vegas y aquí hablamos del desierto demográfico...

- El desierto es un terreno que hay que abonar y preparar para convertirlo en un oasis, también el poblacional. Las personas se van donde ven oportunidades, así que si generemos espacios de oportunidades, las personas vendrán.