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Aprobado el anteproyecto de Ley del Estatuto de las Mujeres Rurales de Aragón que pretende combatir la discriminación y la despoblación Aprobado el anteproyecto de Ley del Estatuto de las Mujeres Rurales de Aragón que pretende combatir la discriminación y la despoblación
La consejera Mayte Pérez, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno

Aprobado el anteproyecto de Ley del Estatuto de las Mujeres Rurales de Aragón que pretende combatir la discriminación y la despoblación

Dado el poco tiempo que resta para cerrar el curso político, no verá la luz hasta la próxima legislatura
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El Consejo de Gobierno ha aprobado este miércoles el anteproyecto de Ley del Estatuto de las Mujeres Rurales de Aragón, una iniciativa que persigue ser crucial para combatir la discriminación que sufre la mitad de la población en las zonas rurales y el propio fenómeno de la despoblación.

"Aspiramos a garantizar la igualdad efectiva en las áreas menos pobladas, como base fundamental para conseguir un desarrollo sostenible y frenar el problema del despoblamiento", ha asegurado la consejera de Presidencia, Mayte Pérez, y para ello, ha agregado, "es imprescindible un marco normativo que dé respuesta a las necesidades que presentan las mujeres en esas zonas".

Para Pérez, las administraciones tienen "el deber moral" de poner en marcha instrumentos que creen mejores oportunidades en el medio rural, que contribuyan a romper los roles de género y que faciliten la conciliación de la vida personal, familiar y laboral, y uno de los instrumentos más potentes con el cuentan es el normativo.

En el ámbito agroganadero, la proporción de mujeres titulares de explotaciones no se corresponde con el trabajo real que realizan, que están invisibilizados.

Promover el acceso de las mujeres a la titularidad de las explotaciones, e incidir en las jóvenes, cuyo apoyo es fundamental para combatir la despoblación en esas zonas; generar oportunidades laborales que consigan asentarlas en el territorio y facilitar el relevo generacional, reequilibrar el reparto tradicional de tareas, que perjudica el desarrollo personal y profesional de las mujeres y un tratamiento específico el acoso sexual y el acoso sexista en las zonas menos pobladas es lo que pretende acometer el estatuto a través de cuatro capítulos, veinticinco artículos, una disposición adicional, una disposición transitoria y dos disposiciones finales.

Además, presta una especial atención a las mujeres que desarrollan su actividad en el sector agroalimentario en relación con la promoción y mejora de la figura de titularidad compartida, así como en la representación de las mujeres en las asociaciones y organizaciones profesionales o empresariales que operan en el medio rural.

En la elaboración del anteproyecto han participado principalmente los departamentos de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, y el de Presidencia y Relaciones Institucionales, con la colaboración del resto de departamentos, y es fruto además del debate con las asociaciones y entidades que desarrollan actuaciones en la materia, como la Mesa de Trabajo de Mujeres Rurales de Aragón.

El anteproyecto de ley continuará con los trámites legales preceptivos hasta su aprobación como proyecto de ley por el Gobierno de Aragón, si bien dado el poco tiempo que resta de legislatura, no verá la luz hasta la próxima legislatura.

Mayte Pérez ha presentado este anteproyecto en el acto del Día de la Mujer del Gobierno de Aragón acompañada por la directora de IAM, María Goikoetxea, quien ha destacado el impulso de los últimos años a los recursos habitacionales para atender a víctimas de las violencias machistas y ha puesto como ejemplo los cinco previstos este año, de los que dos ya han entrado en funcionamiento.

Ha detallado que a principios de año abrió sus puertas el nuevo centro de emergencia, con espacio para acoger hasta a 10 núcleos familiares, y esta semana una casa de acogida en Zaragoza para periodos más extensos que cuenta con 5 habitaciones dobles y capacidad máxima de 12 personas.

A estos dos recursos se suman los centros de crisis 24 horas para atención de las violencias sexuales, que estarán en marcha en los próximos meses en Teruel, Huesca y Zaragoza.