

El autobús a Madrid, en situación crítica por las quejas de los usuarios y el impago de nóminas a trabajadores
La empresa reconoce que está atravesando un mal momentoEl autobús que cubre la ruta entre Teruel y Madrid se encuentra en una situación crítica por las continuas quejas que hay entre los usuarios por los retrasos, y el impago de las nóminas de enero y febrero a los trabajadores. Aunque el pasado lunes se hizo a los empleados un adelanto de parte de la cantidad adeudada, fuentes de la empresa reconocieron que están atravesando por un mal momento y que están intentando reconducir la situación.
La empresa concesionaria de este servicio de transporte público, IRB, ya advirtió el verano pasado que las cuentas en la línea de Madrid no cuadraban. La situación en lugar de mejorar ha ido empeorando y la empresa ha empezado el año 2020 adeudando las nóminas de enero y febrero a los 13 empleados que tiene en este momento.
Patronal y trabajadores mantuvieron una reunión el pasado viernes y el lunes de esta semana se les ingresó una cantidad como parte del adelanto de las nóminas de los dos primeros meses del año, equivalente a un 35% aproximadamente de lo que se les debe, según explicó Eugenio Novella, secretario de organización de la Federación de Servicios, Movilidad y Consumo de UGT Aragón.
El delegado sindical de los trabajadores, Enrique Baigorri, de UGT, explicó que se están manteniendo encuentros con la empresa para buscar una solución y que se respeten los derechos del personal, tanto abonándoles las cantidades que les deben, puesto que ya hay compañeros con problemas económicos, como dando una respuesta a la situación del servicio ya que no ven “perspectivas de nada”.
A eso se suman las quejas de los usuarios, que se han ido incrementando por los retrasos que sufren las expediciones, tanto en las salidas como en las llegadas. El martes se produjo uno de estos incidentes ya que el autobús que tenía que salir a las 8:45 lo hizo con un cuarto de hora de retraso.
El problema no es nuevo y se debió a que el conductor llegó tarde ya que venía de Bezas tras prestar un servicio de transporte escolar. Esta situación es habitual y los viajeros se quejan de estos retrasos después de que los horarios también se modificaran el año pasado para hacerlos compatibles con los servicios escolares que también presta IRB.
Ya desde hace tiempo hay malestar también por el incumplimiento de las condiciones del contrato, puesto que no se presta el servicio tal como estaba establecido. El martes los viajeros que tuvieron que esperar hasta que llegó el conductor se quejaron de que los billetes que les entregaron los tuvo que rellenar el conductor a bolígrafo, porque no había nadie en taquilla.
La taquillera llega más tarde, pero es que además hay también otros problemas con la venta de billetes a través de máquinas y la atención al cliente. Los trabajadores son partidarios de que los viajeros que se quejan, y a los que explican cuál es la situación, formalicen también su queja mediante una reclamación, puesto que en caso contrario el Ministerio, que es el titular de la línea y a quien corresponde su adjudicación, tampoco tiene conocimiento de la realidad.
Los representantes sindicales aseguraron que están trabajando para que se resuelva la situación, y que pretenden que se arregle sin que tenga consecuencias negativas para los empleados ni para la prestación del servicio.
IRB cuenta ahora con 13 trabajadores para esta línea que cubre también el trayecto entre Teruel y Valencia, aunque el principal problema es la escasez de viajeros en el servicio con Madrid, según la empresa.
El gerente de IRB, David López, indicó que está pendiente de reuniones con la DGA y el Ministerio de Transportes porque reconoció que la situación es “pésima” en estos momentos, y que quieren afrontarla pero no hay viajeros en la línea.
Empresa y empleados buscan encontrar una solución rápida y sin que haya perjuicios
Tanto la empresa IRB como los representantes de los trabajadores se mostraron ayer partidarios de encontrar una solución a los problemas que tiene la línea de transporte de viajeros entre Madrid, Teruel y Valencia sin que haya perjuicios para nadie, pero que el personal pueda cobrar y realizar su trabajo en condiciones. Ambas partes aguardan al desarrollo de próximas reuniones que afectan también a las administraciones públicas.