El Gobierno de Aragón apuesta por ordenar las renovables, aunque descarta de entrada una moratoria

El consejero de Medio Ambiente y Turismo del Gobierno de Aragón, Manuel Blasco, se mostró partidario de que los proyectos de renovables que se implanten estén asumidos por el territorio, pero descartó una moratoria porque si se paralizan los expedientes en marcha la Administración podría incurrir en responsabilidades, aunque se mostró abierto a hablarlo. Blasco se pronunció así en la Comisión de Medio Ambiente y Turismo de las Cortes de Aragón, en la que informó de las líneas de trabajo que piensa desarrollar su consejería, para lo que anunció nuevos planes en materia forestal y turística, además de medidas para resolver el atasco de expedientes de todo tipo que hay en el Inaga. En cuanto al Fondo de Inversiones de Teruel (Fite), cuya gestión ha sido adscrita a su departamento, dijo que debe gestionarse mejor de lo que se ha hecho y defendió modelos de éxito como el de ciencia y ocio desarrollado con los proyectos de Dinópolis y Galáctica.

El nuevo titular de las áreas de Medio Ambiente y Turismo expuso las líneas generales que piensa desarrollar su departamento, cuyos detalles se irán dando a conocer próximamente. Avanzó en el caso de la provincia de Teruel la continuidad del Fite como una apuesta clara para compensar la exclusión en su día de la provincia del Objetivo 1. Recalcó que debía servir para financiar inversiones y no gasto corriente y abogó por “gestionarlo aún mejor”.

Destacó el éxito de iniciativas que se han llevado a cabo con estas partidas como Dinópolis, Galáctica, el Aeropuerto de Teruel o Motorland, sobre el que se mostró partidario de aprovecharlo más como escaparate de la Comunidad Autónoma. A la vez insistió en que se reunirá con los presidentes de las diez comarcas turolenses para buscar proyectos tractores acordes con el territorio para “fijar población”.

El consejero invirtió una buena parte del tiempo de su exposición inicial a hablar del Fite, que comenzó afirmando que el clima está cambiando y no se puede seguir contaminando el planeta. En ese contexto dijo que hay que apostar por las renovables, pero que no puede hacerse “sin una ordenación previa del territorio”.

A este respecto dijo que cualquier paso que dé el Ejecutivo lo hará escuchando a los habitantes, los agentes sociales y las entidades públicas de las zonas afectadas. Abogó por una planificación energética que dé respuesta a la necesidad de impulsar las renovables a la vez que se tiene en cuenta la opinión del territorio, consciente del malestar ciudadano existente, que ha llevado a la judicialización de este asunto y a la creación de una comisión especial de investigación sobre cómo se hicieron las cosas en la pasada legislatura.

Mientras las Cortes y la Fiscalía hacen su trabajo, el consejero dijo que el departamento planteará, lo antes posible, un “plan de choque para simplificar procedimientos, agilizar y resolver expedientes en el Inaga”, no solo de proyectos energéticos sino de todo tipo que pasan por este organismo. Argumentó que la burocracia no puede paralizar la actividad económica de la Comunidad Autónoma. La forma de hacerlo será aumentando la plantilla, la contratación externa y utilizando las tres direcciones provinciales para sacar expedientes.

Tras la intervención del portavoz de Aragón Teruel Existe, Tomás Guitarte, que planteó la necesidad de una moratoria de las renovables, el consejero manifestó que no le gustaba la política llevada a cabo en la región en cuanto al despliegue de las mismas. “Me parece que ha sido un elefante en cacharrería”, dijo Blasco, puesto que el anterior gobierno se marcó un objetivo sin llegar a acuerdos con ayuntamientos, salvo algunos sitios, además de enfrentarse con los empresarios del territorio.

“Yo creo que no hay orden ni concierto”, opinó, pero aclaró que en el momento actual no veía la moratoria que plantea este grupo político. “Estoy dispuesto a hablarlo”, precisó, como ha venido manifestando últimamente. Justificó ese rechazo a una moratoria “porque hay muchas empresas que tienen plazos, que tienen avales puestos y que efectivamente si mañana nosotros dijéramos que va a haber una moratoria de seis meses o de un año, y se paralizan todos los expedientes, podría incurrir la Administración en responsabilidad”.

Guitarte centró su intervención en esta cuestión, además de reclamar el incremento del Fite hasta los 100 millones de euros entre las dos administraciones que lo financian, y potenciar Motorland. Alertó de que las evaluaciones ambientales que se están haciendo tanto de las líneas de alta y de muy alta tensión, así como de los proyectos de macroparques, están transformando la condición de suelo rústico agrario en suelo de uso energético y por tanto industrial, “sin que haya habido ningún procedimiento reglado que entienda de este cambio”.

Recalcó que es la primera vez que pasa esto, la “conversión por la vía de los hechos” de un suelo rústico a uno industrial “sin la aplicación de ninguna legislación urbanística”. Algo, aclaró, que no se aplica “para evitar la cesión gratuita del 10% del aprovechamiento que deberían hacer los promotores a las administraciones públicas”. Pidió la moratoria mientras se hace un ordenamiento del despliegue de las renovables para “salvar nuestro mejor patrimonio natural y paisajístico”, que hizo extensivo a territorios como el Matarraña, Maestrazgo, Sierra de Albarracín, Gúdar-Javalambre, el Moncayo y los Pirineos. Tras la comisión, Aragón Teruel Existe mostró en un comunicado su satisfacción por la disposición del gobierno de dialogar sobre la moratoria del despliegue de renovables.   

La portavoz del PP, Susana Cobos, grupo que con Vox pidió la comisión, aseguró que la misma está justificada y que si en ella ven el “más mínimo indicio”, este partido acudirá a la Fiscalía. Joaquín Palacín (CHA) se mostró favorable a una moratoria para “reflexionar” y planificar.

En su exposición, Blasco se comprometió a llevar a cabo una  política de ordenación del territorio en materia de renovables que aplique “el sentido común que la gente del territorio nos demanda”. Entre sus compromisos detalló también la realización de un Plan Forestal de Aragón, una nueva gestión forestal sostenible para que pueda ser aprovechada  en el territorio, y de igual manera “mejorar la gestión del agua”. Abogó igualmente por un pacto aragonés por el clima y por un nuevo plan de promoción turística que consideró “muy urgente”.

Los socialistas reclaman concreción sobre el impulso a la Agenda 2030

El grupo parlamentario socialista pidió concreción al consejero de Medio Ambiente sobre el impulso que el Ejecutivo aragonés piensa dar a la Agenda 2030 y cómo abordará el cambio climático teniendo como socio de gobierno a Vox. La portavoz del PSOE, Leticia Soria, cuestionó la capacidad de gestión del “pentapartito” por la “disparidad” de opiniones que mantienen entre ellos, y criticó que todavía no se hubiese nombrado al director del Inaga, a lo que Blasco respondió que será en los próximos días y que ello no ha impedido que siguiera la gestión porque los asuntos han ido saliendo. A lo que no contestó es a la pregunta de cuándo se iba a firmar el Fite.

Tomás Guitarte (Teruel Existe) reclamó incrementar este fondo porque con la inflación se ha devaluado el valor de los 60 millones en que quedó en 2006; Joaquín Palacín (CHA) reclamó no ir hacia atrás en la lucha contra incendios; Andoni Corrales (Podemos) demandó “sentido común” ante el cuidado del medio ambiente; Francisco Vidal (Vox) defendió un turismo respetuoso con la naturaleza; y Susana Cobos celebró el anuncio de un nuevo Plan estratégico de Turismo 2024-2030.