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El ‘Resistiré’ une más que las hogueras en el barrio turolense de San Julián El ‘Resistiré’ une más que las hogueras en el barrio turolense de San Julián
Nacho Cardona, con su altavoz en el balcón desde el que cada tarde pincha Resistiré para animar a sus vecinos

El ‘Resistiré’ une más que las hogueras en el barrio turolense de San Julián

Un vecino pone la banda sonora al aplauso de las 8
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Cruz Aguilar

Para la mayor parte de los vecinos de San Julián las 8 de la tarde son el mejor momento del día. Abren sus ventanas, salen a sus balcones y aplauden. Lo hacen por los sanitarios que van a atenderles si caen enfermos, por el personal que en las residencias de mayores cuida de sus ancianos y también por el panadero, el frutero o la del supermercado, que cada día les sirven con una sonrisa y, por qué no decirlo, también con algo de miedo. A sus aplausos se suman las luces de linternas y móviles que parpadean en las ventanas y, a las 20:01, Resistiré, del Dúo Dinámico, suena a toda pastilla desde el balcón de Nacho Cardona, en la plaza de San Pascual. Hay quien tararea, otros cantan e incluso alguno baila para relajar las tensiones acumuladas durante el día. 

“Tengo un equipo en casa que utilizamos para las actividades deportivas cuando el barrio hace alguna cosa y se me ocurrió la idea de ponerlo en el balcón”, relata Cardona. En un principio ni sus hijos, ya adolescentes, ni su mujer lo vieron con buenos ojos: “Me dijeron que si estaba loco”, narra. Sin embargo, pronto se dieron cuenta que los decibelios que salían desde su balcón eran una inyección de ánimo para este barrio turolense, caracterizado por la unión de sus vecinos.  El primero en sumarse a la iniciativa fue el vecino de arriba de Cardona, Pepe Navarro, que ha reutilizado las luces navideñas para poner las letras RESISTIRÉ en su terraza. “Juego con las luces de flexo y con las de Navidad porque ese espíritu ahora hace mucha falta”, comenta el hombre. 

Si normalmente los habitantes de San Julián celebran juntos el carnaval, el inicio de la Navidad o San Antón, los momentos duros también había que pasarlos juntos y todas las noches cientos de manos se ponen rojas de aplaudir tan fuerte. 

Desde el pasado jueves la música de la tarde se completa con otra canción a las 12, Hoy puede ser un gran día, de Joan Manuel Serrat, que sirve para animar a todos los que la escuchan a afrontar una nueva jornada de confinamiento. 

También el día de San José se celebró con música y a las 19 horas desde el balcón de los Cardona sonó Hola don Pepito, hola don José, para alegría de muchos de los que la escuchaban, sobre todo los niños. 

Además de dar ánimos durante el periodo de confinamiento, esta canción comunitaria ayudará, cree Nacho Cardona, a hacer barrio. “Nos hemos acostumbrado a llevar una vida atareada, vamos de casa al trabajo y con esto de aplaudir en las ventanas nos estamos fijando por primera vez en quién tenemos al lado”, describe.

Bailar antes de entrar a clase

El vecino de San Julián es profesor de Educación Física en el colegio Las Anejas y explica que desde su departamento han mandado tres tareas a sus alumnos, aprenderse una coreografía del Resistiré, varias acciones relativas a la higiene y que cada 2 o 3 días escriban una carta a los abuelos para que sepan que se acuerdan de ellos.  Les encargaron la coreografía con la canción del Dúo Dinámico antes de que se erigiera como el himno del confinamiento, pero precisa que bailar todos en conjunto será lo primero que hagan, sin entrar siquiera a clase, el día que abran de nuevo los colegios y se recupere la normalidad.