Jamones, melocotones y aceite, entre la excelencia de la artesanía alimentaria

Cada alimento de Teruel ofrece al consumidor una historia, única y diferencial, sorprendente y sugerente, que le vincula a un territorio y le confiere unas características propias. La provincia cuenta con figuras de calidad diferenciada, como son las denominaciones de origen protegidas, las indicaciones geográficas protegidas, la artesanía alimentaria, la producción ecológica y las marcas de garantía.

Los productos con Denominación de Origen (DOP) representan la excelencia de la producción agrícola alimentaria europea y son el resultado de una combinación única de factores humanos y ambientales característicos de un territorio específico. En la provincia, el producto más emblemático es el Jamón / Paleta de Teruel. En el ámbito de los aceites, participa en la DOP Aceite del Bajo Aragón y otro producto hortofrutícola insignia es el Melocotón de Calanda

Teruel fue pionera al obtener en 1984 la DOP Jamón de Teruel. Esa fue la primera de jamón curado en España y se mantiene como la única de jamón de capa blanca. Una de las claves de su calidad reside en la altitud mínima de 800 metros de la zona de elaboración, que garantiza un clima frío y seco. Este ambiente es crucial para la curación de las piezas, que se extiende por un mínimo de 14 meses, dando como resultado un producto de color rojo brillante, grasa consistente y un sabor muy suave, delicado y bajo en sal.

La DOP Jamón y Paleta de Teruel cerró el 2024 con unas cifras muy positivas en la certificación de producto. En total, se marcaron 237.565 jamones y 215.463 paletas, “consolidando la tendencia de crecimiento y reafirmando la calidad y el reconocimiento de estos productos en los mercados nacionales e internacionales”, precisó el presidente del Consejo Regulador, Ricardo Mosteo.

Sector hortofrutícola

En el sector hortofrutícola, se encuentra la DOP Melocotón de Calanda. Aunque comparte área con municipios de Zaragoza, el corazón de la producción se centra en el Bajo Aragón turolense.

Lo que distingue a este melocotón es el uso exclusivo de la variedad amarillo tardío y las técnicas de aclareo y embolsado, que consisten en quitar el 70 % de los frutos existentes en el árbol hasta dejar una distancia cómoda de 20 centímetros entre fruto y fruto y, en los últimos 2 meses de crecimiento, embolsar uno a uno en el propio árbol. De este modo, madura dentro de una bolsa protectora que garantiza su pureza ya que no entra en contacto con ningún tipo de productos fitosanitarios ni con agentes externos.

El resultado en un melocotón de gran tamaño, excelente sabor y dulzura: el auténtico etiqueta negra garantiza una dulzura mínima de 12 grados Brix, que es el mínimo a partir del cual los melocotones emiten su atractivo aroma.

Finalmente, la DOP Aceite del Bajo Aragón está compuesta por 77 municipios repartidos por el este territorio turolense y zaragozano y el campo de Belchite, y ocupa una superficie cultivada de 37.000 hectáreas, con una densidad media de 70 olivos/ha, y Esta figura de calidad protege el aceite de oliva virgen extra producido principalmente a partir de la variedad empeltre (con un mínimo del 80 %), complementada con arbequina y royal.

Los olivares de Teruel, algunos de ellos centenarios, confieren al aceite sus características: un sabor suave, ligero, fluido y muy aromático, con notas de manzana o almendra.

Estas tres DOP representan la herencia agrícola y ganadera de Teruel, siendo fundamentales para la economía y la identidad gastronómica de la provincia.

La normativa europea, garantía de diferenciación

El presidente de la Asociación de Industrias de la Alimentación de Aragón, José Enrique Chueca, defiende la planificación europea y reconoce que, aunque a veces las normativas puedan parecer excesivas, son también una garantía de calidad y diferenciación frente a otros mercados. Insiste en la necesidad de adaptarse a los cambios demográficos -con una población más envejecida y con hábitos de consumo diferentes- y a las nuevas tendencias de mercado, donde la alimentación saludable gana terreno.

Más de 55.000 personas trabajan directamente en este ámbito en la Comunidad Autónoma de Aragón, donde es el principal motor económico en 23 de sus 36 comarcas. Esto convierte al sector agroalimentario en un eje estratégico no solo económico, sino también social y territorial.

El patrimonio agroalimentario con calidad diferenciada

La Asociación de Consejos Reguladores de las Denominaciones de Origen y de las Indicaciones Geográficas Protegidas (Origen Aragón), que se constituyó hace dos años en Alcañiz, enumera los motivos para elegir productos de calidad diferenciada: porque ofrece a los consumidores la garantía de que están comprando productos típicos, auténticos y de calidad, que forman parte del patrimonio alimentario de los países de la Unión Europea; porque potencia el trabajo de los productores, gracias a la creación de un valor adicional que protege esos mismos productores contra imitaciones, falsificaciones y competencia desleal; y porque fomenta el mantenimiento y desarrollo de los territorios, la economía local y las diferencias agrícolas y alimentarias.