

Javier Mozota Bernad, decano del colegio de Ingenieros de Caminos en Aragón: “Es fundamental que el corredor ferroviario sea como los demás, no peor que los otros”
El representante de los ingenieros cree que debe retomarse el proyecto que “dejaron en el cajón”El decano del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Aragón, Javier Mozota, que clausuró la semana pasada la jornada celebrada en Teruel para impulsar la construcción del corredor ferroviario Cantábrico-Mediterráneo de altas prestaciones, sostiene que es fundamental que esta infraestructura sea “como los demás corredores, no peor que los otros”. Urge por ello a retomar lo que se quedó en los cajones del Ministerio de Fomento, e insta a todos los diputados aragoneses, con independencia de su color político, a hacer piña y crear un lobby de presión al Gobierno central
-¿Son suficientes las obras que se están haciendo en estos momentos en la vía?
-Lo que se está haciendo en la vía es necesario y por lo tanto tenemos que apoyar que se haga, pero no es suficiente para tener un corredor ferroviario en condiciones. Si el corredor entre el Cantábrico y Zaragoza se hace en doble vía y con pendientes del 15 por mil, si luego desde Zaragoza a Valencia es una única vía y con un trazado inferior dejará de ser competitivo ese tramo con otros itinerarios alternativos.
-¿Eso qué supone?
-Que si la pendiente es del 24 por mil se necesitan unas máquinas de tracción para determinados transportes pesados o partir el tren en convoyes de menos longitud. Eso quiere decir que para determinados trenes ese itinerario no será competitivo con respecto a ir por Tarragona o por Madrid, lo cual desde un punto de vista medioambiental, al hacer más kilómetros, es un disparate.
-Eso hablando de mercancías, pero, ¿y los viajeros?
-Pasa lo mismo. En el transporte hay unos principios básicos que califican su calidad, que son la rapidez, la economía, la seguridad, la puntualidad, la comodidad y últimamente la sostenibilidad medioambiental. Efectivamente si no se hace la misma vía aquí de Zaragoza al Cantábrico, se nos va a hacer un cuello de botella porque el señor que viene de Pamplona y va a Valencia, por dónde va a ir, ¿por Madrid o por Teruel? Si al final pierde tiempo de recorrido, pues no es competitiva.
-En eso todo el mundo parece estar de acuerdo. ¿Qué hay que hacer ya?
-Como la tramitación de cualquier modificación de trazado para evitar esas pendientes es muy larga, eso lleva a que sean unos procesos muy largos. Por eso lo que se está haciendo ahora es necesario y a eso no podemos renunciar, porque lo otro lleva mucho tiempo y necesitamos que se consolide esta línea, pero no es suficiente.
Yo creo que en el tramo del corredor Zaragoza-Valencia ya hemos hecho muchas reuniones y existe la conformidad de cámaras de comercio, colegios profesionales, movimientos ciudadanos, hay una unidad, pero aquí lo que está faltando es un lobby de diputados aragoneses que se dirijan al Gobierno de España y le pregunten cómo quiere este trazado, con qué pendiente, y una vez que el Ejecutivo se defina le den el tostón cada mes o mes y medio diciendo cómo van los proyectos, porque esto es una obligación del Gobierno central. En estas reuniones como la de Teruel estamos de todos sitios pero quien nos falta de verdad es del Gobierno central.
-En la última reunión de Teruel sí estaba el coordinador del corredor.
-Sí, estaba, pero esto se trata de una voluntad política, y no solo pensar en las mercancías sino en el transporte de viajeros.
-Es cierto, siempre se ha dicho que este corredor es prioritariamente para mercancías, como si el transporte de viajeros no importase.
-Por eso insisto en lo de viajeros. Es que además el futuro de las grandes ciudades es limitar el acceso a los coches, y es una tendencia que puede ser que vaya a más. Y está claro que a Teruel le interesa que hayan vías de comunicación. La autovía ha demostrado que en todo el corredor que hay alrededor de esta infraestructura, ese descenso que había de población y actividad económica por lo menos se ha parado, e incluso parece que despunta un poquito para arriba Teruel y otras poblaciones porque les da posibilidades de negocio, de accesibilidad, de hacer vida económica y social. Para Aragón es fundamental que el corredor ferroviario sea como los demás, no tenemos que tenerlo peor que los otros.
-¿Cómo convencer a los responsables políticos?
-Es que es para vertebrar el territorio, nada más.
-El proyecto que se planteó en 2009 desde el Gobierno central, en definitiva, ¿no?
-Claro, el que dejaron en el cajón y no hicieron nada. Pero repito, lo que se está haciendo ahora no podemos perder ni un céntimo, porque para que llegue lo otro van a tardar quince años. Ahora bien, para que eso ocurriera, debería haber ya un lobby de todos los diputados aragoneses preguntando al Gobierno, que creo que pueden ser los que den la nota gorda con su insistencia. Si los demás estamos ya de acuerdo y hay unanimidad, ahora falta el que tiene que rematar la jugada, que es el Gobierno central y los que tienen que estar dándole con la pala en la frente todas las veces.
-En la jornada celebrada en Teruel usted fue muy claro al pedir ponerse las pilas ya.
-Sí, pero eso mismo ya lo dije en Teruel hace siete años, en 2012, cuando también planteé la creación de ese lobby político. Bueno, es cuestión de repetirlo más veces para ver si al final coge la bandera el que sea, da igual quién, pero que la coja alguien.