La piscina climatizada de Teruel: una instalación inaugurada hace 40 años y que costó casi diez millones de pesetas

Que la actual piscina lleva muchos años de servicio a la ciudad es notorio, tantos que cuando abrió sus puertas lo hizo como piscina climatizada de Educación y Descanso de Teruel, inaugurada un 18 de julio de 1974, "coincidiendo con la conmemoración del XXXVIII aniversario del Glorioso Alzamiento Nacional," decía entonces el periódico Lucha. Aquel día de julio el Gobernador Civil y jefe provincial del Movimiento, Luis Rojo Villa, presidió los actos protocolarios de entonces -recepción en la sede del Gobierno civil- y emprendió una intensa jornada de inauguraciones: Inauguraciones del 19 de julio, como destacaba el periódico en un titular, en una jornada que concluyó precisamente con la inauguración de la piscina climatizada.

Hubo el corte de cinta habitual en estos casos, tal y como podíamos ver en la sección La Ciudad del Lucha del 19 de julio de 1974. El periódico recogía también las intervenciones políticas, como la del delegado provincial de la Organización Sindical, presidente del Comité Ejecutivo Sindical, señor Sainz Planillo, que destacaba que la piscina era “un jalón más dentro de nuestro constante caminar que Teruel requiere para su prosperidad” y destacaba el logro que suponía la piscina para el “recreo y bienestar social” del pueblo de Teruel.

En las ediciones de días previos del periódico Lucha encontrábamos los detalles de esta infraestructura. Así, el periódico del 16 de julio detallaba que la piscina climatizada de la Organización Sindical, encomendada su explotación a la O.S. Educación y Descanso, es un logro del mundo laboral turolense, que desde hace algunos años ha constituido una anhelada aspiración de los trabajadores y sus familiares. Hoy ya es una gozosa realidad.

Decía aquel texto que el proyecto era obra del arquitecto don José M. Peris Gómez y la dirección de las obras del también arquitecto Arturo Esparza Gaspar. El presupuesto alcanzaba 9.578.010 pesetas, de las cuales la Organización Sindical aportaba el 60,48% y la Delegación Nacional de Educación Física y Deportes el 29,51. La realización de las obras corrió a cargo de Construcciones Arquillo, dirigidas por Antonio Sancho Laguía.

Destacaba aquella información que la piscina se construía dentro del complejo deportivo de la Organización Sindical, que incluía campo de fútbol, frontón, pistas de atletismo pista polideportiva. Todo ello anejo a la institución sindical de Formación Profesional Santa Emerenciana, donde se construía por aquel entonces el internado residencia con un presupuesto de 20 millones de pesetas.

Aquella información ofrecía todo el detalle de la obra, en cuanto a números e instalaciones, incluidas una pista polideportiva en donde aparte de tomar el sol, pueden practicarse numerosos deportes, principalmente el tenis, al que los bañistas están dedicando preferentemente atención, así como el baloncesto.

Obras por 39 millones

La crónica de la jornada tan señalada venía ilustrada también por la fotografía del gobernador civil pulsando el interruptor que ponía en funcionamiento los nuevos equipos emisores de Radio Teruel, en La Muela, que habían costado seis millones de petas.

De ahí se trasladaron a las nuevas pistas para exámenes del carnet de conducir, cerca del polígono La Paz, y después a la nueva estación de autobuses, en la que se invirtieron ocho millones de pesetas para centralizar, decía el texto, todos los servicios de la ciudad.

Completaron las inauguraciones la de la iluminación de la denominada avenida de la División Azul, así como la de la carretera Alcañiz de veinte viviendas promovidas por el Ministerio de Obras Públicas.

Terminaba la crónica de las inauguraciones recogiendo las palabras del Gobernador Civil de lealtad a Franco: “En esta fecha histórica hemos transmitido al Caudillo de España, al Príncipe, al presidente del Gobierno, al vicepresidente primero del Gobierno y ministro de la Gobernación y al ministerio secretario general el testimonio de lealtad, adhesión y servicio que ha demostrado Teruel, tanto por su presencia masiva en el Gobierno Civil cuanto por su decidida voluntad de trabajo, superación y servicio de lo que las obras inauguradas en la capital y provincia son los mejores exponentes. Muchas gracias a todos y ¡Arriba España!”.

Esa declaración se realizaba en los últimos compases ya de la dictadura de Francisco Franco, enfermo entonces, lo que provocaría que pocos días después delegara la Jefatura del Estado a Juan Carlos de Borbón, de manera transitoria, decía en su portada el periódico Lucha del 20 de julio, y en cumplimiento de las previsiones legales sucesorias. Destacaba al mismo tiempo aquella portada que las constantes fisiológicas del Caudillo se mantienen dentro de la normalidad. Franco fallecería un año después, oficialmente un 20 de noviembre de 1975.