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La Politécnica de Teruel logra financiación nacional para un proyecto de TICs y salud La Politécnica de Teruel logra financiación nacional para un proyecto de TICs y salud
El profesor de la EUPT Eduardo Gil lidera el proyecto para medir la evolución de la depresión

La Politécnica de Teruel logra financiación nacional para un proyecto de TICs y salud

Eduardo Gil desarrollará un sistema de monitorización de pacientes con depresión
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El profesor de la Escuela Universitaria Politécnica de Teruel (EUPT) Eduardo Gil ha logrado financiación nacional en una convocatoria en concurrencia competitiva para un proyecto que está desarrollando junto con la especialista Raquel Bailón, de Zaragoza, para desarrollar un sistema que registre medidas que permitan conocer la evolución en pacientes con depresión.

El trabajo se llama Procesado de señal guiado por la fisiología para la monitorización ambulatoria de la depresión y ha logrado el apoyo del Programa estatal de Investigación, desarrollo e innovación (I+D+i) orientada a los restos de la sociedad, del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades. La financiación obtenida es de 150.000 euros y una beca de formación de personal investigador (FPI) que permitirá la contratación de un estudiante de doctorado que trabajará en las lineas del proyecto que tiene tres años de duración.

Este estudio se está realizando en colaboración con los hospitales Clínico Lozano Blesa y Miguel Servet de Zaragoza.

Eduardo Gil explicó que el objetivo principal es poder monitorizar a estos pacientes “para hacer un seguimiento de su evolución y poder prevenir recaídas”. Y es que la depresión se diagnostica con unos tests pero no siempre es posible hacer este control que se plantea con este sistema.

La primera fase del estudio se va a centrar en establecer una medida objetiva para la monitorización de estos pacientes. “Trabajamos en el procesado de señal para extraer información relevante de las señales fisiológicas”, remarcó el investigador.

Se va a trabajar con el Sistema Nervioso Autónomo ya que este se ve afectado en las personas con depresión, es decir, ante un test de estrés, el Sistema Nervioso Autónomo de estos pacientes actúa de forma distinta a las personas sin este trastorno.

El Sistema Nervioso Autónoma tiene dos ramas: simpática y la parasimpática. La primera supone que, ante un estrés o un peligro el corazón late más rápido y se respira más rápido. El parasimpático se centra en la vuelta al equilibrio y será el que se activa, por ejemplo, cuando se hacen actividades de relajación.

Aunque hay cierta controversia en la literatura científica sobre cómo se comporta este sistema en la depresión, estudios previos de los profesores Gil y Bailón han mostrado que, cuando se somete a un estresor a los pacientes con este trastorno, la actividad simpática está disminuida.

Ahora lo que van a determinar es qué medidas fisiológicas pueden ayudar a evaluar esos cambios de estas personas, verificar y validar si son útiles en la práctica clínica.

La segunda fase del proyecto se centrará en intentar obtener estas medidas en dispositivos móviles en lugar de en un equipo clínico, para facilitar este seguimiento al paciente de forma ambulatoria.

Tecnología cercana

Se plantea hacerlo con dispositivos vestibles (weareables) o teléfonos inteligentes. Se trabajará la medición de la frecuencia cardiaca con las señales fotopletismográficas y también se medirán las señales electrodérmicas y la conductancia de la piel que dependen de la activación de las glándulas sudoríparas. 

Para el estudio cuentan con una base de datos con 40 pacientes de un proyecto anterior y también se trabajará con un grupo más reducido de diez personas de control y diez pacientes para analizar específicamente esta monitorización.

“El objetivo final es el seguimiento de la evolución del paciente, más allá del diagnóstico, que se puedan detectar recaídas. La idea sería que una vez al día o a la semana se pueda ver cómo está evolucionando el paciente sin la necesidad de ir al especialista clínico”, destacó Eduardo Gil que añadió que esto mejoraría el tratamiento y reduciría los costes.