Las alergias afectan todo el año, aunque son más molestas en primavera y verano

Las alergias son una de las intolerancias más molestas para los seres humanos y uno de los colectivos en los que más se acusa esta incidencia es en pacientes de edad. Y es que las intolerancias medicamentosas son otro de los problemas que pueden generar preocupación para los propios ancianos y es una de las atenciones más importantes por parte de los médicos hacia este colectivo.

Estas reacciones adversas, ya sean alergias medicamentosas o intolerancias , afectan a esta población debido a la mayor incidencia de enfermedades subyacentes y a los cambios relacionados con la edad en su sistema inmunológico.

En Teruel, “vemos todo tipo de patologías alérgicas y frecuentes, pero han aumentado mucho las alergias. Es muy fácil que en el mismo paciente se vean varios tipos. Son los llamados pacientes atópicos o con predisposición a las alergias”, señaló Pilar Muñoz Pamplona, alergóloga en el hospital Obispo Polanco de Teruel

El envejecimiento fisiológico conlleva cambios en la composición corporal, así como en la absorción, distribución y metabolismo de los fármacos. Esto puede influir en la eficacia y seguridad y desencadenar reacciones alérgicas como intolerancias, las cuales pueden manifestarse de diversas formas clínicas.

“Vemos una variedad de patologías muy amplia. En adultos hubo una preponderancia de las alergias respiratorias, pero últimamente las alimentarias han aumentado muchísimo”, comentó Pilar Muñoz.

Diagnosticar estar reacciones en los mayores puede resultar difícil debido a la complejidad de su presentación clínica por las múltiples comorbilidades que se presentan en este tipo de pacientes. Estos diagnósticos se recogen mayoritariamente en pacientes ingresados en hospitales y por evolución de las implicaciones clínicas y durante su ingreso hospitalario.

Una alergia es la respuesta del sistema inmunológico a sustancias normalmente inofensivas como el polen, los alimentos o el latex, entre otros, aunque para la mayoría de las personas estas sustancias llamadas alérgenos no producen ninguna reacción. Sin embargo en el caso de las personas alérgicas, el sistema inmunológico identifica a estos alérgenos como una amenaza y produce una respuesta inapropiada, que incluye una reacción inflamatoria local o síntomas generalizados contra el alérgeno.

Tipos y causas

Dos son fundamentalmente los tipos de alergias que se presentan habitualmente, la hipersensibilidad inmediata y la hipersensibilidad retrasada. La más común es la primera, pues es la reacción del cuerpo ante algo que no tolera y es de aparición rápida, en horas o minutos. Esta respuesta se da principalmente con los alimentos.

La segunda aparece después de varias horas e incluso algún día más tarde y se muestra en la piel fundamentalmente.

Entre las causas más comunes están los alérgenos al aire (como el polen, ácaros de polvo o moho), también ciertos alimentos (pescados, mariscos, huevo, leche u otros frutos secos), las picaduras de insectos o avispas son otra de las causas frecuentes -sobre todo en verano.

Otra de las causas de alergia e intolerancia, son los medicamentos, con especial consideración para la penicilina o los antibióticos basados en ella. En este apartado, la doctora Muñoz explica “el envejecimiento de la población conlleva el abundante consumo de fármacos y por tanto las intolerancias a los medicamentos”, precisó.

Las patologías alérgicas no son exclusivas del verano, ya que hay alergias propias de cada estación. En Teruel, “lo más frecuente es el polen, las gramíneas o el olivo, por el clima. Pero el ciprés, que es un polen de invierno, también afecta mucho. Es en verano cuando se da el polen de las llamadas capitanas o salsola, que son las que dan polen en esta estación”, puntualiza la alergóloga del Obispo Polanco.

Por otra parte, el historial familiar también incide en el desarrollo de alergias así como las patologías respiratorias y es por eso que “por población envejecida se ve mucha alergia en primavera”, concluye Pilar Muñoz.