"Las compañías con más mujeres consejeras tienen más voluntariado corporativo"

Las empresas que tienen más mujeres en sus consejos de administración practican más el voluntariado corporativo. Por otro lado, en la promoción sobre estos proyectos los mensajes que se dirigen a las trabajadoras son diferentes a los que se destinan a los hombres, con un sesgo machista. Estos son algunos de los resultados de la tesis doctoral Voluntariado de empresas: Una revisión del concepto y un análisis de la situación en España, desde una perspectiva de género, de la investigadora turolense Ana Lor Serrano que la defendió esta semana en la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas del Campus de Teruel de la Universidad de Zaragoza.

La tesis ha estado dirigida por la doctora Luisa Esteban de este centro turolense, dentro del programa de doctorado en Relaciones de Género y Estudios Feministas de Unizar que coordina Carmen Peña Ardid.

El trabajo abordó qué es el voluntariado dentro del marco empresarial y sus ventajas e inconvenientes; se analizó la legislación nacional y supranacional al respecto y se investigó la situación en las grandes empresas del Ibex 35, en concreto, las del sector financiero. Se estudió como un elemento muy importante el desarrollo de los Objetivos de Desarollo Sostenible (ODS) y siempre desde la mirada de género.

Una de sus conclusiones fue que “existe una relación directa entre el porcentaje de mujeres consejeras y la mención que hacen de voluntariado de empresas”, explicó la autora de la tesis que estimó que uno de los motivos es que se trata de “empresas que son más sensibles a determinados cambios”.

Investigación

Otro de los aspectos que han observado en esta investigación es que se mantienen muchos estereotipos de género. Lor reconoció que ya se ve “a la mujer como una mujer directiva” pero que todavía se considera “como quien cuida y se encarga del hogar”.

La investigación de la turolense incluyó el análisis de varios vídeos con los que las entidades financieras divulgaban entre su personal las acciones de voluntariado de empresa y los mensajes son muy diferentes según el género. “Las mujeres parece que hablan más de cuestiones emocionales que aluden a sentirse más satisfechas, en cambio, los hombres aluden al reto profesional, a realizar nuevas redes, a conocer compañeros a que esto les sirva a nivel de desarrollo profesional y ellas, en cambio, más a un desarrollo personal”, destalló la doctoranda.

Ana Lor argumentó que esta no es una cuestión anecdótica. “Son sesgos que consideramos que están agravados porque los vídeos son de carácter publicitario, no son mensajes de forma espontánea sino que son mensajes pensados que se reproducen una y otra vez” para que se mantengan esos roles. “Si como sociedad queremos superar estos estereotipos, tenemos que partir de este tipo de cosas que son pequeñas, pero que calan en la sociedad”, defendió la autora del trabajo.

Llegar a las pymes

Ana Lor explicó que en este estudio se analizó la situación de las empresas del Ibex porque son las que tienen dinero para experimentar en cuestiones como el voluntariado corporativo pero también querían “establecer una hoja de ruta” para que las pequeñas y medianas empresas puedan sumarse a estas iniciativas. “Decirles: Esto es lo bueno que hacen y esto es lo malo, haced esto y evitad esto porque no tenemos dinero suficiente en las pymes como para andar jugueteando”, detalló la investigadora.

Lor reconoció que hay “una carencia a nivel legislativo” porque la Ley de Voluntariado prevé un desarrollo reglamentario en el que se apoyaría financieramente a las pymes, pero como no existe ese desarrollo reglamentario, pues no está esa ayuda.

La especialista explicó que hay un estudio sobre diagnóstico del voluntariado de empresa en Aragón que muestra que el 71% de las empresas encuestadas no tienen estas prácticas y muchas de ellas alegan falta de recursos o falta de tiempo.

La investigadora aconsejó a aquellas que quieran dar el paso “que se asesoren bien”, que sepan bien qué es el voluntariado de empresa “que muchas veces lo están practicando y no saben siquiera que lo están practicando” y que desarrollen un buen programa.

“Existen pautas realizadas por autoras como María Teresa García Nieto sobre qué hacer y que no hacer y nosotras estamos dispuestas a ayudar. Lo que pretendemos es clarificar todo nuestro estudio para que sirva como una hoja de ruta sobre todo a las pymes para que puedan desarrollar este tipo de prácticas porque consideramos que pueden ayudar mucho a la sociedad”, resaltó la autora de la tesis.

Ana Lor se plantea futuras líneas de investigación más centradas en el tejido económico local. “Nos gustaría replicar el estudio de diagnóstico, si no lo hace el Gobierno de Aragón, que ya lo hicieron en 2018, han pasado cinco años y queremos ver cómo estamos evolucionando y llevarlo a nuestra provincia y ver qué es lo que ocurre” en Teruel con el voluntariado corporativo, indicó la doctoranda.