Las grandes empresas turolenses reducen su actividad al mínimo y toman medidas

Las empresas más grandes de la provincia –como Finsa, Draxton o Turomas– están reduciendo su actividad, reorganizando los turnos de trabajo y extremando las medidas de seguridad para hacer frente al estado de alarma motivado por el Covid-19. De momento, ninguna de ellas está teniendo problemas de suministros aunque podrían sufrirlos si la situación se prolonga.

Draxton Powertrain & Chasis SL cuenta con una planta de fundición en Utrillas en la que trabajan directamente 250 personas. El responsable de Relaciones Laborales de la compañía, Félix Repullo, indicó que de momento continúan con la actividad dado que el Gobierno no ha paralizado la actividad productiva y tienen que atender las necesidades de sus clientes.

Añadió que, no obstante, lo que más les preocupa en estos momentos es la salud de los trabajadores, de sus familias y de la sociedad en su conjunto. Por eso, desde la declaración del estado de alarma por parte del Gobierno, han implementado un extenso protocolo.

Así, se han modificado los horarios de entrada y salida de los trabajadores para que no coincida un número importante en los accesos y en los vestuarios. Para ello, han tenido que cambiar los turnos preestablecidos y reestructurar algunos puestos para mantener la distancia de seguridad. 

Las medidas adoptadas para proteger a las personas que trabajan en la planta de Utrillas han provocado que se reduzca significativamente la producción. Por el momento, añadió Repullo, no han tenido problemas con los suministros y confían en que, en su sector, continúe así.

Financiera Maderera SA (Finsa), que dispone de dos plantas de fabricación de muebles y componentes en Cella, ha reducido la actividad al mínimo imprescindible y ha extremado las medidas de seguridad según los protocolos establecidos, según fuentes de la compañía.

Las mismas fuentes indicaron que la dirección y el servicio médico propio mantuvieron ayer un encuentro con el comité de empres para explicarles la situación y coordinar las medidas. 

Turomas, empresa familiar de Rubielos de Mora dedicada a la fabricación de maquinaria de corte de vidrio, también está “a medio gas”. De sus 100 empleados, unos 20 están trabajando desde casa. El fundador, Miguel Tomás, explicó que fundamentalmente teletrabajan los ingenieros y que además han concedido algunos permisos.

De momento, en la empresa están haciendo “lo mínimo imprescindible”. Tomás advirtió que, si el estado de alarma se prolonga más del periodo inicialmente establecido, podría cambiar la situación, sobre todo porque no podrán desplazarse para instalar las máquinas fabricadas.

De hecho, el director financiero de Turomas, Antonio Ortega, no pudo llegar ayer a Rubielos de Mora porque fue conminado por la Guardia Civil de Tráfico a regresar a su domicilio en Valencia cuando circulaba por la A23 a la altura de Jérica.

Por el momento, en la planta se han reorganizado los puestos para que los trabajadores guarden una distancia de al menos un metro y medio y se está desinfectando continuamente.

En la central térmica de Endesa, ayer tuvo que acudir media plantilla –también contratas– pese a que apenas hay actividad.

Otras grandes empresas instaladas en la provincia, como Térvalis, Ronal Ibérica o Pyrsa, estaban ayer reorganizando también su actividad.

Las organizaciones empresariales habilitan un gabinete de seguimiento

Las organizaciones empresariales CEOE Teruel, Cepyme Teruel y Ceat Teruel han querido dejar constancia de su apoyo y respaldo a las autoridades, los equipos sanitarios y a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado ante las medidas adoptadas por las administraciones públicas para paliar los efectos del Covid-19. Para ello, prestarán toda su colaboración a través de un gabinete de seguimiento que permitirá pulsar el estado de situación de las empresas de la provincia, así como sus demandas y necesidades.

La patronal dijo ayer en una nota de prensa que la paralización económica y las consecuencias que se deriven “pueden resultar determinantes para el futuro del tejido productivo de la provincia”, teniendo en cuenta el freno que puede ocasionar para el sector turístico, uno de los motores económicos turolenses, así como para el comercial e industrial, sin olvidar el inminente cierre de la Central Térmica de Andorra. 

Por ello, desde las organizaciones empresariales estiman “urgente y necesario” que el Consejo de Ministros concrete medidas de carácter económico que garanticen la liquidez a las empresas, especialmente las pequeñas y medianas así como a los autónomos, “para evitar su quiebra inmediata y asegurar en lo posible la supervivencia del tejido productivo”. 

En este sentido, indicaron que se precisan medidas urgentes como la simplificación y agilización de los procedimientos en los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTEs) con efecto retroactivo y el reconocimiento en situaciones como el actual estado de alarma de una fuerza mayor para su presentación. Del mismo modo, sostuvieron que es necesario que se contemple el acceso a la protección por desempleo sin exigir periodo de carencia y sin perjuicio del reconocimiento de futuras prestaciones por desempleo.

Ante la falta de liquidez provocada por la inactividad, las organizaciones empresariales turolenses abogan por la suspensión de la obligación de pago de las cotizaciones por parte de las empresas y que se establezcan líneas de avales públicos suficientes que faciliten el acceso al crédito por parte de las empresas, así como que las administraciones abonen de inmediato a sus proveedores las facturas pendientes y las que reciban, así como que se aceleren las devoluciones tributarias pendientes. 

Para los empresarios turolenses resulta fundamental además que el Gobierno de España permita los aplazamientos y fraccionamientos de pago de manera automática y sin intereses, por un plazo suficiente. 

En este sentido, el colectivo de los autónomos es el que se encuentra en una situación especialmente difícil que requiere también una suspensión de las cotizaciones sociales, el abono de las bajas desde el primer día y la articulación de una prestación por cese a cargo de un fondo extraordinario, apuntaron. 

Para la patronal turolense es necesario además que se fomente la digitalización y el teletrabajo en las empresas. 

Entre tanto, Cámara de Teruel pone a disposición de las empresas su capacidad de servicio en el marco de las medidas adoptadas por el Gobierno, informó en una nota de prensa.

Por un lado, procurará que la actividad económica quede afectada lo estrictamente indispensable, reforzando su apoyo en todos los ámbitos a las empresas que pueden seguir ejerciendo su labor.

Por otro, informará a las empresas a las que se ha suspendido su actividad sobre los instrumentos que tiene a su disposición para paliar en lo posible los efectos, tanto los que la legislación ya tiene establecidos como aquellos otros que se puedan poner en marcha.

Cámara ha dispuesto un servicio mínimo presencial en sus dos sedes, en horario esta primera semana de 09:00 a 14:00 horas, con objeto de atender los asuntos imprescindibles que requieren presencia, como certificados y ha establecido el teletrabajo para el resto de su plantilla, por lo que las empresas van a seguir atendidas desde el correo electrónico.