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Los turolenses no dejan solos a los vecinos de la calle San Francisco, que exigen respuestas por el derrumbe Los turolenses no dejan solos a los vecinos de la calle San Francisco, que exigen respuestas por el derrumbe
Los vecinos fueron leyendo sus preguntas en la concentración ante el ayuntamiento. Bykofoto/Antonio García

Los turolenses no dejan solos a los vecinos de la calle San Francisco, que exigen respuestas por el derrumbe

Concentración ante la puerta del Ayuntamiento, cuando se cumple medio año de la del 13 de junio
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Muchas preguntas esperan todavía respuesta medio año después de que un bloque de 21 viviendas se viniera abajo en una céntrica calle de la capital turolense. Afortunadamente, no causó víctimas pero 40 familias se quedaron sin hogar. Este miércoles, 13 de diciembre, se han cumplido seis meses desde el hundimiento del edificio de la calle San Francisco 21. Para conmemorarlo desde el grupo de trabajo de la Asociación del Barrio del Carmen y colindantes organizaron un acto de apoyo a las familias afectadas ante las puertas del ayuntamiento al que asistieron unas 150 personas. El objetivo era poner en común las preguntas sin respuesta sobre los ocurrido. Por ello, al acto se denominó Micro abierto a las puertas del ayuntamiento.

La portavoz del grupo de trabajo, Elvira Martín, leyó un comunicando recordando que justo en ese momento, pero seis meses antes, también se reunieron ante la puerta del Ayuntamiento horas después de que colapsara el edificio. “Hace seis meses nos reunimos en este mismo lugar incapaces de asimilar lo que acaba de ocurrir en nuestra ciudad. Desde ese día nos hemos esforzado en intentar ser vuestro consuelo, muchas veces sin ser capaces de expresarlo con palabras”, señaló para continuar “hoy especialmente queremos haceros llegar nuestro cariño y afecto. Queremos que os sintáis arropados y acompañados”.

La portavoz también se refirió a la situación actual en unos días que se está llevando a cabo la recogida de enseres: “Sabemos que los últimos días han sido especialmente duros. Nos han causado estupor e indignación las condiciones en las que habéis tenido que intentar localizar vuestros objetos personales entre restos de ventanas, trozos de muebles, lamas de persianas y multitud de objetos inservibles para cualquiera. Resultan sorprendentes las declaraciones al respecto que hemos escuchado estos días. Sorprendentes y también nada creíbles”, afirmó y -refiriéndose al concejal de Infraestructuras, Juan Carlos Cruzado- apuntó:

“La misma persona que el 9 de junio no apreció la gravedad de lo que podía ocurrir en la calle San Francisco nos dice ahora que el muro de micro pilotes se construye para  estabilizar la calle, para evitar que la calle se mueva”. Y tras formular estas palabras se lanzó la primera pregunta: “¿Podemos confiar en la gestión que de este  asunto está haciendo el equipo de gobierno del ayuntamiento?” Así dejó la pregunta en el aire y cedió la palabra al resto de los asistentes a la concentración.

En primera fila se situaron los vecinos del número 21 e integrantes del grupo de trabajo que llevaban sus preguntas escritas en papel y que las fueron leyendo uno por uno. Se pudieron escuchar más de una veintena de cuestiones no solo sobre lo que ocurrió aquel martes y 13, sino también durante los días previos, cuando estaba entrando agua en los garajes de la zona, y lo que ha pasado en estos seis meses. Sobre lo que ocurría antes hubo cuestiones como “¿de dónde venía el agua que llevaba días entrando a nuestro edificio?”  y “¿por qué no nos escuchó el Ayuntamiento de Teruel antes de que se hundiera el edificio?”. Y sobre lo que ocurre después preguntas como “¿por qué después de seis meses la empresa concesionaria de aguas no ha entregado los informes?”. Los vecinos también reclamaron que se les entregue los vídeos de las redes de saneamiento y abastecimiento de agua y llegaron a preguntarse si el Ayuntamiento de Teruel está tapando pruebas con la excusa de limpiar redes. Por todo ello, se preguntaron por qué el Ayuntamiento de Teruel no entrega la información solicitada.

“¿Para cuando una rehabilitación integral de la calle San Francisco y alrededores?”. Esta es otra de las cuestiones que se lanzó en este micro abierto del que el concejal de Infraestructuras, Juan Carlos Cruzado, fue cuestionado y se llegó a pedir que se fuera del Ayuntamiento.

“¿Por qué el Ayuntamiento de Teruel no permite a nuestros técnicos hacer las pruebas necesarias para averiguar las causas del movimiento? ¿Qué están haciendo los concejales de la oposición? ¿Por qué la alcaldesa de Teruel  está preocupada y ocupada en defender su gestión política?”, esta batería de preguntas se centraban en el actual momento.

Experiencias compartidas

Una de las vecinas del número 21, Pilar Catalán, quiso leer un texto para recordar cómo era la vida de esta comunidad antes de que se el edificio se derrumbara.

“¿Por qué en vez de una piscina climatizada en Los Planos, un pabellón en la Fuenfresca  y preocuparse de que los jardines estén bien no os preocupáis del problema que tenéis que es gordo en la calle San Francisco, que va desde el Óvalo hasta casi la mitad de la avenida Zaragoza sin hablar del callejón del Gato que  miedo me daría vivir ahí?”. Se preguntó para añadir “¿Es que tiene que pasar algo más gordo?”.

También los representantes del grupo de trabajo, realizaron sus propias preguntas, después de meses de dedicación a esclarecer esta situación, ya que el grupo se formó pocos días después de que se hundiera la finca. Daniel del Carmen preguntó si el Ayuntamiento tiene el proyecto de desescombro o dispone simplemente de una memoria y cómo ha sido posible que se empiece la obra sin tener aprobado el plan de seguridad. También, por qué se oponen a que los técnicos de los vecinos hagan sus propias pruebas periciales y si el Ayuntamiento tiene tan claro que el problema es del edificio y no de la calle.

En cuanto al muro pantalla que se va a hacer para que no se hunda a la calle a la altura de lo que era la fachada del 21, se preguntó qué sistema de pilotaje van a utilizar, si por impacto o taladrando. “Pensamos que por impacto provocaría vibraciones innecesarias y prejudiciales para todos los edificios colindantes”, apuntó el portavoz.

También quieren saber cuándo se van a hacer las catas al principio y final de la calle sugeridas en el informe técnico de la empresa que realizó el georadar.

El grupo seguirá trabajando para conocer las causas del hundimiento y las acciones que se van a llevar a cabo para rehabilitar la zona. En el acto, se invitó a todo el que quiera a sumarse a esta labor.