Luz verde a la última fase de rehabilitación de los Alfares Hermanos Górriz con una inversión de 164.535 euros

La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Teruel ha dado luz verde este lunes a la adjudicación de la tercera y última fase de la obra de rehabilitación de los Alfares de los Hermanos Górriz, a la empresa Construcciones Garllén, por importe de 164.535 euros.

La alcaldesa de Teruel, Emma Buj, ha explicado a los medios de comunicación que en esta fase las labores que se van a acometer son de remates y finalización, así como la instalación de baños públicos, ya que ha asegurado que el centro se utilizará como un recurso turístico más para la visita de turistas y estudiantes.

Buj ha indicado que esta obra era “importante” para el equipo de gobierno porque “recoge la historia de la ciudad de Teruel” y ha precisado que “regenerará” el barrio de San Julián y permitirá ser un recurso educativo para los escolares turolenses y para los visitantes que reciba la capital turolense.

También ha precisado que la licitación de las obras de esta tercera y última fase quedó “en suspensión” durante el estado de alarma porque la situación económica del Ayuntamiento estaba a expensas de la evolución de la pandemia, tras haber reducido impuestos a empresarios y autónomos y haber tenido que destinar más recursos al ámbito sanitario.

"Somos muy conscientes de que hay que cuidar el presupuesto, por eso esta actuación se ha demorado un poco más”, ha dicho, concretando que después de haber hecho “muchas cuentas” el equipo de gobierno ha decidido continuar adelante con estas obras porque se puede asegurar que “la financiación está”.

Sobre la gestión que tendrá este espacio una vez finalicen las obras, Buj ha señalado que todavía es una duda que tendrán que resolver durante este mes: “La idea es que lo haga una asociación, pero es difícil jurídicamente porque cualquier servicio que un ayuntamiento lo pueda contratar no lo puede conveniar a una asociación”.

En la Junta de Gobierno también se han aprobado certificaciones de obra para la construcción de 237 nichos en el Cementerio Municipal de Teruel y para el proyecto de ordenación de tráfico en la calle Ciudad Escolar, así como la orden de demolición de varias obras ilegales.

Entre estas obras ilegales, Buj ha detallado que se tratan de una acometida de gas ilegal, una vivienda prefabricada, una perrera, unos postes eléctricos mal colocados y un altillo de una oficina y ha recordado que el servicio de control urbanístico del Ayuntamiento continúa trabajando.