Navarrete volverá a manifestarse el próximo sábado por el puente

La tregua de un mes se ha roto y los vecinos de Navarrete del Río volverán a manifestarse el próximo sábado, día 7 de septiembre, para que Adif coloque un puente más grande en el paso bajo la vía que hay frente al cementerio de esta pedanía de Calamocha. La Asociación de Agricultores y Ganaderos así lo ha acordado en una asamblea celebrada después de la reunión que sus representantes mantuvieron el pasado miércoles con directivos de Adif, tras la que provisionalmente se paralizaron las movilizaciones hasta finales de septiembre.

El presidente de la Asociación de Agricultores y Ganaderos de Navarrete del Río, Francisco Latorre, explicó que mantienen la convocatoria de manifestación solicitada a la Subdelegación del Gobierno para esta semana, después de que suspendieran la de la pasada. La protesta tendrá lugar el próximo sábado, día 7 de septiembre, a las 11 de la mañana.

Latorre aclaró que han vuelto a hablar con Adif y que el plazo de un mes que inicialmente pidió la entidad pública para dar una solución a la demanda la han reducido a quince días por exigencia de los agricultores. El periodo dado vencerá ahora el próximo 11 de septiembre. Si para entonces no hay una respuesta o no les convence, como temen, seguirán con las manifestaciones todos los sábados del mes de septiembre e incluso las endurecerán.

Los agricultores y ganaderos de Navarrete piden que aprovechando las obras del arreglo de los terraplenes que se están acometiendo en la vía del tren frente al cementerio, se cambie el paso bajo la vía que existe ya que por el mismo no entran cosechadoras ni determinado tipo de maquinaria agrícola.

Los afectados recuerdan que el puente es obsoleto, además de presentar grietas, y no responde a las necesidades del siglo XXI, cuando en cualquier otro tipo de construcción se están colocando pasos de 5 metros de alto por 7 metros de ancho.

El pasado 23 de agosto, en la primera de las movilizaciones convocadas, los agricultores demostraron cómo por debajo del puente no podían pasar las cosechadoras porque es muy estrecho, ya que se hizo el siglo pasado cuando la maquinaria agrícola era mucho más pequeña.

El miércoles de la semana pasada representantes de la asociación se reunieron con directivos de Adif y con el coordinador del corredor Cantábrico-Mediterráneo, Adán Piñero. La entidad pública se comprometió a buscar una solución o a buscar alternativas, pidiendo un plazo de 30 días para dar una respuesta. Como gesto de buena voluntad, el presidente de la asociación anunció a la prensa que suspendían momentáneamente las movilizaciones a la espera de esa respuesta.

No obstante, la asociación acordó en asamblea el pasado viernes seguir con las protestas como forma de presión, además de exigir a Adif una respuesta antes del día 11, puesto que en caso contrario cuando la quieran dar las obras ya estarán terminadas y no habrá nada que hacer.

Francisco Latorre indicó que a la vista de las explicaciones dadas por Adif a la prensa el miércoles de la semana pasada, cuando organizó una visita a las obras que se están haciendo en la línea, el auténtico corredor de altas prestaciones va para largo, y en Navarrete del Río tienen problemas no solo con este puente sino con otros seis, cuyos vanos impiden igualmente el paso de maquinaria agrícola moderna.

“El que estamos reclamando que cambien porque están haciendo las obras pero no sustituyen el puente, es el que mejor está porque los demás son peores”, dijo Latorre, quien advirtió que si no cambian ahora estas infraestructuras y no llevan idea de hacer el corredor de alta capacidad, “nos vamos a pasar otros cien años más sin solución”. En la asamblea se analizó los hablado en la reunión del miércoles de la semana pasada y concluyeron que Adif “no tiene intención de dar una solución”.

Aparte del puente del cementerio, los agricultores consideran que habría que intervenir en el puente metálico, el del Juncar, la Tejería y el Ramblar, además de los dos que hay en la zona conocida como de las Viñas.

“La sensación que tuvimos tras analizarlo es que se reunieron para comprarnos tiempo y no solucionarnos nada”, dijo el presidente de la asociación, quien consideró que pedirles un mes cuando es el tiempo que queda para terminar la obra pinta a que “nos vamos a quedar como estamos”.