Sánchez pide aparcar las diferencias territoriales para luchar todos contra la expansión del coronavirus

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pidió ayer a los presidentes de todas las CCAA, con los que hyoy se reunirá de manera virtual, que dejen sus diferencias y se sitúen detrás del Gobierno para luchar contra el coronavirus porque "ahora no hay territorios".
Advirtió, en este sentido, que deben tener claro que solo hay una misión y es la de vencer al virus. Por ello, insistió en que en esta lucha "no hay colores políticos, ni ideologías, ni territorios, sino que los ciudadanos son lo primero".
Sánchez añadió que en ocasiones en España "somos" 17 comunidades autónomas, pero en ocasiones hay que ser "el gran país que somos" y estar con el Gobierno para dar una respuesta común.
Adelantó que en la reunión de hoy con los presidentes autonómicos les trasladará este planteamiento y escuchará sus sugerencias para ir aplicando medidas en función del escenario, del que ha dejado claro que es cambiante.
Pero insistió en que los principios que deben guiar la accion en las próximas semanas son los de la "unidad de fuerzas", ir viendo lo que ocurre en cada territorio y "redistribuir fuerzas" para no escatimar en las autonomías que más lo necesiten: "diálogo y cohesión territorial están presentes en cada momento".
El jefe del Ejecutivo ha reiterado que el virus no distingue entre territorios, ni ideologías, ni colores y por ello, considera que "escucharse y coordinarse no es una opción, sino una obligación".

Unidad
Su petición de unidad a las CCAA, provincias y partidos políticos fue constante en la rueda de prensa, en la que dejó claro que no le va a "temblar la mano" en utilizar todos los medios que tenga a su alcance para frenar la curva de contagio del coronavirus en España.
"Demasiadas veces nos hemos confundido los seres humanos al identificar a los enemigos" ha exclamado antes de apuntar al virus como "nuestro verdadero enemigo". "Es el enemigo de todos y todos debemos combatirlo unido", remachó.
En cuanto a la insistencia del presidente de la Generalitat de Cataluña, Joaquím Torra, en cerrar Cataluña, dejó claro que el virus no atiende a fronteras o diferencias territoriales. Por ello, añadió que el objetivo de declarar el estado de alarma es proteger a la ciudadanía restringiendo derechos que es importante restringir para frenar la expansión de la epidemia.

Da igual
"Da igual que se viva en Barcelona, Girona, el Valle de Arán, Orense, Lugo o en Madrid", detalló para volver a indicar que solo se podrá salir del domicilio familiar para realizar las cosas básicas que incluye el Real Decreto, como comprar alimentos, medicinas, productos de primera necesidad o ir al trabajo.
En este sentido, quiso reiterar que "no hay restricción territorial", porque se viva donde se viva, solo se podrá hacer lo mismo. Y se dirigió a las personas que se han ido a la playa o a sus segundas residencias. 
Les explicó que pueden volver si lo desean porque las restricciones son las mismas en su lugar de origen que en sus casas de vacaciones.
"Esta no es una batalla contra un virus en un territorio, es una pandemia global", dijo. Y precisamente por ello, aludió al artículo 116 de la Constitución, que permite dotar de mecanismos al Estado para la coordinación y para dar una respuesta homogénea en todo el territorio nacional: "A igual problema igual solución".
El presidente recuerda que se ha puesto al ciudadano en el centro de todas las decisiones que se deben tomar: "No hablamos de CCAA, no hablamos de España, hablamos de los individuos".
De esta forma, insistió, se da la misma respuesta en Málaga, Canarias, País Vasco y todos los rincones del país mediante la aplicación del estado de alarma durante los próximos 15 días.
Anunció también que irá al Congreso a dar explicaciones de las medidas a las distintas fuerzas parlamentarias y a pedir, si es necesario, el apoyo de las mismas para prorrogar el estado de alarma. Aunque no quiso precisar cuándo se puede producir el pico de la epidemia a pesar de las preguntas de los informadores.