Se constituye el jurado y comienza el juicio a Feher, que se enfrenta a prisión permanente revisable por el triple crimen de Andorra

Norbert Feher, el criminal serbio apodado Igor El Ruso que acabó con la vida de tres personas en diciembre de 2017 en Andorra, se enfrenta a la que seguramente será la primera pena de prisión permanente revisable que la Justicia imponga en la provincia de Teruel y la segunda en Aragón. Su juicio, con un Tribunal del Jurado formado por personas de la calle elegidas por sorteo, comienza el lunes en la Audiencia Provincial en medio de grandes medidas de seguridad policial y sanitaria por la peligrosidad del acusado y las circunstancias provocadas por la pandemia, al tener que convivir en la sala numerosas personas durante las largas jornadas de los cinco días que está previsto que dure la práctica de la prueba, ya que la vista se prolongará hasta la semana siguiente con la deliberación del jurado y la lectura del veredicto.

Feher ha llegado a la Audiencia de Teruel, custodiado por la Guardia Civil y la Policía Nacional, hacia las 9.20 horas, procedente de la prisión de Zuera.

Es el juicio celebrado en Teruel que más esfuerzo logístico ha requerido tanto por su complejidad como por las circunstancias sanitarias en que se va a desarrollar, pero que no podía retrasarse más porque han pasado más de tres años desde que tuvieron lugar los hechos. 

Aunque Feher cumple ya condena en la prisión de Dueñas, en Palencia, por los dos homicidios en grado de tentativa cometidos en Albalate del Arzobispo días antes del triple crimen de Andorra, el tiempo que ha pasado desde entonces urgía a que se celebrara sin mayor demora a pesar de la distancia social a la que obliga la pandemia y la dificultad que entraña su realización, por respeto hacia los familiares y amigos de las víctimas ante el dolor que aquella tragedia y las heridas que dejó abierta sigue provocando al no haberse hecho justicia todavía.

Solo entre el magistrado que presidirá la vista, los miembros del jurado popular, el acusado con su traductor y los representantes legales de las partes suman 23 personas, a las que hay que añadir los agentes de la Policía Nacional que custodiarán a Feher dentro de la sala, más los funcionarios de la Audiencia que tengan que estar dentro para el normal desarrollo de la vista y los testigos y peritos que en cada momento tengan que acceder para testificar.

No habrá público, ni siquiera los familiares, que viven con pesar esta circunstancia al no poder estar presentes y que tendrán que seguir la vista por medios telemáticos que se han habilitado para ello. Tampoco habrá prensa en la Audiencia, ya que los 60 periodistas acreditados seguirán el juicio a través de la sala de vistas virtual desde sus terminales de ordenador, y únicamente podrá acceder un cámara de televisión y un fotógrafo, que difundirá las imágenes al resto de los medios.

Desarrollo de la vista

El juicio está programado para que la prueba testifical y pericial de las distintas partes se desarrolle entre el lunes y el viernes, con la intención de que ese día presenten sus informes finales con las conclusiones el fiscal y los 7 abogados que están personados por las partes. Si no pudieran hacerlo todas las partes, se continuaría el lunes 19 de abril. 

El presidente de la Audiencia, Fermín Hernández, que presidirá la vista con Tribunal del Jurado, confía en que el viernes día 16 puedan exponer sus informes todas las partes, de manera que se suspendería la vista hasta el lunes siguiente, que es cuando está previsto que se entregue a los integrantes del jurado el cuestionario con el objeto del veredicto para que puedan comenzar su deliberación.

El objeto del veredicto es un cuestionario que los miembros del jurado popular deben responder mediante votación, y cuya finalidad es establecer qué hechos han sido probados y cuáles no durante la celebración de la vista. A partir de que se les entregue dicho documento, los nueve miembros titulares quedarán incomunicados en una sala para deliberar, mientras que los dos suplentes aguardarán fuera por si tuvieran que sustituir a alguno.

El jurado deberá pronunciarse sobre la culpabilidad de Feher por los delitos que se le imputan y por los que será juzgado que son los siguientes: tres delitos de asesinato, otros tres de robo con violencia, dos de atentado, un delito de pertenencia a organización criminal, y un delito de tenencia ilícita de armas.

Por el triple delito de asesinato tanto la Fiscalía como las distintas acusaciones particulares representadas por cuatro abogados, así como las dos acusaciones populares de la AUGC y la UAGA, piden la pena máxima prevista por el Código Penal de prisión permanente revisable. Por el resto de delitos solicitan distintas penas de cárcel que varían de unos casos a otros, además de distintas indemnizaciones para los familiares de las víctimas por los daños y perjuicios causados. Solo por parte del ministerio público las indemnizaciones que pide suman en total más de 2 millones de euros.

Los hechos juzgados ocurrieron en Andorra en la tarde del 14 de diciembre de 2017 cuando Norbert Feher asesinó a sangre fría al ganadero José Luis Iranzo cuando accedía a un masico de Mas del Saso propiedad de su familia, y al que el delincuente había entrado para robar. Le disparó de frente y cuando intentaba huir lo remató con otro disparo. Murió desangrado a causa de las heridas que le provocaron los impactos de bala.

Alertada la Guardia Civil de los disparos, acudieron a la zona dos coches patrulla guiados por un vecino de Andorra con su vehículo particular. Una de las patrullas con los agentes del equipo ROCA Víctor Romero y Víctor Jesús Caballero se desvió por orden del capitán hacia el Mas de Zumino para identificar un vehículo con las luces encendidas que habían visto desde el camino, y allí se encontraron con Feher, que había robado el pick up de su primera víctima y había acudido a este otro masico que utilizaba como refugio para recoger sus pertenencias y darse a la fuga.

Al llegar los agentes, el criminal los aguardaba escondido detrás del vehículo y los sorprendió por la espalda abriendo fuego de forma sorpresiva de manera indiscriminada apuntando a zonas no protegidas por el chaleco antibalas y empleando las dos pistolas que llevaba. Los guardias intentaron repeler el ataque pero cayeron heridos y Feher los remató a corta distancia y les robó las armas y otras pertenencias. 

Detención

El criminal fue detenido esa madrugada por una patrulla en la carretera A-226 dentro del término municipal de Cantavieja tras sufrir un accidente. Feher pudo ser identificado entonces y se comprobó que había sido también el autor de los disparos que hirieron a dos vecinos de Albalate del Arzobispo el día 5 de ese mismo mes, por lo que fue juzgado y condenado en enero de 2020, además de ser el autor de múltiples robos y la muerte de un perro en los masicos de la zona.

El trágico desenlace conmocionó a la provincia y provocó un gran malestar en Andorra por la forma como se había gestionado el operativo policial desde el tiroteo de Albalate, al no haberse establecido las medidas adecuadas ante la peligrosidad del delincuente que se sabía que merodeaba por el lugar y que estaba dispuesto a matar. Será una de las cuestiones que afloren durante el juicio que comienza este lunes.

El primer abogado que intervendrá en la vista tras el fiscal, el letrado de la AEGC Jorge Piedrafita, que representa a la viuda e hija del agente Víctor Romero, aseguró que será un juicio intenso que ha requerido de mucha preparación porque se trata de atar bien todos los cabos para que haya una buena base probatoria para imponer la prisión permanente revisable. Añadió que su representada afronta la vista con ganas aunque con nervios.

El abogado de la madre y hermanos del agente Víctor Caballero, Ramón Castro, que es primo del fallecido, comentó que el juicio más que a esclarecer la muerte de las tres personas, que ya lo está, estará orientado a determinar “la voluntariedad y la conciencia” con que obró el acusado.

Enrique Trebolle, que representa a la familia del ganadero José Luis Iranzo, manifestó que la acusación no tiene ninguna complicación en este caso y que el esfuerzo estará dirigido a hacer ver que el acusado cometió tres asesinatos para que se le aplique la pena máxima. 

Por su parte, Mariano Tafalla, que representa a los padres y hermanos de Víctor Romero y a la pareja de Víctor Caballero, explicó que su acusación estará enfocada a demostrar el triple asesinato y su pertenencia a una organización criminal. Además, aseguró que en el proceso se verá reflejada la impericia del operativo policial para detener al acusado desde que se produjo el tiroteo de Albalate. No es el objeto de este juicio, pero aseguró que estará presente y que influirá, aunque no condicionará, el proceso de responsabilidad patrimonial del Estado que hay abierto por la vía administrativa.

Neurosis de guerra

El abogado de la defensa que representa a Feher, Juan Manuel Martín Calvente, manifestó que afrontaba el juicio con “tranquilidad” y con el deseo de hacer un trabajo “digno”. Pedirá la libre absolución amparándose en que las vivencias que desde la niñez han acompañado al acusado le han provocado un trastorno de neurosis de guerra, lo que le provoca un estrés postraumático que le impide razonar en situaciones de pánico y que en esos casos actúa para proteger su propia vida como una obsesión delirante.

Medidas de seguridad

La sala de la Audiencia Provincial de Teruel ha requerido de una reconfiguración para poder celebrar el juicio contra Norbert Feher, cuyo desarrollo de la vista se podrá seguir en streaming a través de Aragón Noticias y otros medios digitales.

El presidente de la Audiencia, Fermín Hernández, explicó que se han tomado medidas para garantizar la seguridad sanitaria al tener que haber dentro de la sala de vistas más de una veintena de personas durante largas jornadas. Se utilizarán mascarillas y habrá ventilación permanente. Además, se han instalado mamparas de metacrilato entre los abogados y habrá distancias de seguridad entre los once miembros del jurado, de los cuales nueve serán titulares y dos suplentes. Como prevención se ha colocado un medidor de CO2 dentro de la sala y en caso de que se alcancen límites potencialmente peligrosos se suspenderá la vista para ventilar el espacio.

Las medidas de seguridad serán similares a las que se emplearon hace algo más de un año cuando se juzgó por primera vez en la Audiencia a Igor El Ruso por el tiroteo de Albalate. Se ha instalado la misma cabina de seguridad que se construyó entonces, que estará colocada al lado de donde se ubique el abogado de la defensa y el traductor. El resto de las partes estarán en el estrado y el jurado donde habitualmente se coloca el público. Se han instalado otras dos pantallas de televisión, además de la ya existente, para que se puedan seguir las videoconferencias de los testigos y peritos que comparezcan de esta manera.

El acusado ha sido trasladado esta semana a la prisión de Zuera, desde donde será conducido a diario al Palacio de Justicia de Teruel. Durante el juicio comerá en el calabozo cuando se suspendan las sesiones para tal fin. Los traslados correrán a cargo de la Guardia Civil, la seguridad dentro de la sala  a la Policía Nacional y en el edificio a la Unidad Adscrita, y en la calle colaborará también la Policía Local.