Síguenos
La sombra de… La sombra de…
banner click 236 banner 236
Raquel Fuertes
…Una duda. Me asalta, sí. Podría decir aquello de que no tengo pruebas, pero tampoco dudas de que los mensajes entre Pedro y José Luis están retocados. Entiéndanme bien: el contenido creo que es el que es (petardo, impresentable, torpe, pájara, jodida…), pero me temo que han corregido las formas.

Ni un vocativo sin coma. Ni una aposición mal cerrada entre pausas. Todas las tildes en su sitio… No sé si habrán sido los periodistas (bajo la directriz del medio, claro) o si el propio filtrante los pasó antes por un corrector de estilo, pero es que no me creo que escriban esos mensajes con puntuación exquisita, sin una hache fuera de lugar, sin abreviar una triste q o sin emitir un solo audio.

Por mi profesión suelo recibir mensajes muy apañados y no plagados de k y xq, pero no puedo evitar extrañarme ante esa corrección gramática en mensajes entre colegas en los que no se trabuca ni una letra (que nos manejamos con presbicia). O que no se la juegue jamás el corrector. En fin, que tanta pulcritud ortográfica quita un poco de credibilidad al nuevo vodevil.

Deben estar pensando en que estas dudas son fútiles cuando lo que tendríamos que estar analizando es la autenticidad de los contenidos (pero creo que esto no lo cuestiona nadie) o la intencionalidad de la filtración.

Sobre el sujeto filtrante, tengo mi teoría. Y entro en la idea conspiranoica de que se están utilizando estos mensajes donde ambos (sobre todo el 1) se retratan como criticones de los compañeros (y con la posición de superioridad la cosa se enturbia aún más) y suman a sus dosis de hipocresía lo que ya empieza a parecer más preocupante, el rescate de Air Europa, como advertencia tipo “saco esto, pero sabes que tengo más y que a lo mejor ya no hace tanta risa como lo de Lambán o Robles”. El insulto, el desprecio (o menosprecio) a sus compañeros de gabinete y/o partido no me ha sorprendido. Porque creo que ahí ni los militantes del PSOE tienen ninguna duda sobre la personalidad de Sánchez. No se preocupe, presidente, en ese aspecto, su reputación sigue intacta. No nos quedan dudas de que es como es. Sin sombra de duda.