El proyecto de material constructivo aislante a partir de lana de Teruel avanza con la presentación de un panel tipo

El proyecto para la creación de material aislante térmico y acústico constructivo con lana de oveja continúa avanzando y este jueves, en la sede de la Diputación Provincial de Teruel en Alcañiz, se ha presentado el primer panel aislante en tamaño real, con medidas de 1250 x 600 x 30 mm. El diputado delegado de Desarrollo Territorial, Javier Ciprés, junto al químico que ha desarrollado el material, Fernando Iturbe, han explicado las características técnicas y propiedades específicas de estos paneles.

El panel consta de una base de yeso laminado que hace de soporte con 6 milímetros y 24 milímetros de mortero aislante, que lleva la lana. Es de 1250 milímetros porque por el código técnico de la edificación, con dos de ellos se puede hacer el muro de 2 metros que se indica para la construcción de viviendas. Un muro de estos paneles pesa 5 veces menos que un muro de hormigón, ha informado la DPT en una nota de prensa.

El objetivo final de este panel es introducir lana natural, siendo éste un producto representativo del desarrollo de la economía circular. Cada panel lleva la lana de una oveja. Se utiliza lana sin lavar de oveja de rasa aragonesa, vitrificada mediante una fórmula compleja para tratarla y solucionar los dos problemas que tenía para llegar a la construcción: garantizar que no se desarrollen insectos y mejorar su resistencia al fuego. Iturbe ha afirmado que “una vez conseguido esto y diseñado el panel en sus medidas exactas, ya puede pasar al material de construcción de forma masiva”.

“A raíz de los problemas que llevamos escuchando un tiempo con el tema de la lana, diciendo que era un residuo, nos pusimos a trabajar para buscar soluciones a este problema territorial que tienen los ganaderos”, ha explicado Ciprés, que ha añadido que, dado que ya se ha desarrollado este panel, lo que les gustaría es "intentar crear una industria sobre estos paneles, y que sea en la provincia de Teruel, a ser posible en la zona de transición justa, donde más ha castigado el desempleo, en estas comarcas”.

El diputado ha indicado que se persiguen dos objetivos. En primer lugar, la generación de empleo en la zona, pero también solucionar el problema de los ganaderos. "La técnica está, se van a construir muchas viviendas ahora mismo, creo que las empresas lo pueden ver como un negocio, y ahí estamos, intentando que se quede en Teruel”, ha comentado.

“Tenemos ya una memoria económica y hemos trabajado con las administraciones de nivel superior, como la Consejería de Medio Ambiente, porque consideramos que podría ser un proyecto tractor de primer nivel para estas zonas desfavorecidas, por lo que puede encajar en el Fite. Lo que nos hace falta ahora es encontrar a los industriales que quisieran apostar por este producto”, ha añadido Ciprés.

Hace falta impulsar una planta de producción

Iturbe ha ofrecido los datos de la memoria económica y el estudio de mercado del proyecto de lo que podría suponer una planta de producción de este tipo de paneles aislantes. Ha concretado que “se necesitan de 4,5 a 6 millones de euros para desarrollar una fábrica para gestionar la producción”. El químico propone desarrollar una planta piloto, sugiriendo la localidad de Utrillas “por el interés que ha mostrado este consistorio desde la presentación de la idea”. Afirma que en este momento están manteniendo reuniones buscando el interés empresarial, y que “lo ideal sería que se quedara todo en Teruel”.

El objetivo citado por Iturbe sería llegar rápidamente a 316.000 paneles y crecer, porque “se pueden alcanzar 60 puestos de trabajo directo y se consume toda la lana que hay en Teruel (500.000 kilos)", o bien, 120 puestos de trabajo para alcanzar el millón de kilos, que sería consumir toda la lana de Aragón. Eso supondría producir unos 630.00 paneles al año. La rentabilidad extrema estaría en llegar a fabricar entre 3 y 5 millones de kilos de lana, “unos 300 trabajadores”. Considera que el kilo de lana se debería pagar a los ganaderos o cooperativas a un euro y que, a ser posible llegase a la fábrica con menos de un 2% de suciedad.

El experto afirma que es importante llegar a estas cifras y a incorporar el material a nivel de industrialización para poder ser competitivos, añadiendo que “si se alcanzaran 5 millones de kilos de lana, se podría incorporar la lana de las comunidades laneras de Castilla y León, Castilla La Mancha, Navarra…”.

También señala que hacen falta máquinas trituradoras (una o dos) para su tratamiento, en el lugar que sea (“por ejemplo podría ser en la zona de Alframbra”) para trocearla y llevarla a la fábrica productora, “para generar una riqueza extendida a todo el territorio”.

Obra social

La memoria también abraza el concepto de “obra social”, que es lo que propone Iturbe, aunque dependerá de los directores financieros de la fábrica. “Dado que estima que por cada millón de kilos de lana natural que se procese anualmente se obtienen 660.000 unidades de estos paneles, la aportación de una obra social podría ser de 0,20 euros por unidad, por lo que se podrían destinar a estos fines 132.000 euros anuales”, detalla.

De tal forma, traslada que podría aportarse apoyo económico a la creación de una escuela de pastores y esquiladores de la provincia de Teruel -“que bien podría ubicarse en Alcañiz”- apoyo económico a los municipios que contratasen un pastor para el manejo de cien ovejas de raza lanera y destinadas a la limpieza y prevención de incendios, promoción y mecenazgo de actividades que promocionen la lana, la historia y la tradición lanera de la provincia de Teruel.