Síguenos
La localidad de Arens de Lledó hace de la lana su bandera este fin de semana La localidad de Arens de Lledó hace de la lana su bandera este fin de semana
Grupos de cocreación para buscar ideas y vías de colaboración. Blanca Abril

La localidad de Arens de Lledó hace de la lana su bandera este fin de semana

La feria del sector reúne a expertos y vecinos en torno al futuro del ovino
banner click 236 banner 236

Arens de Lledó volvió a convertirse este fin de semana en un pequeño epicentro rural de reflexión, encuentro y futuro con la celebración de la II Feria de la Lana, un evento que reunió a investigadores, ganaderos, artesanos y vecinos en torno a un material que durante años se consideró un residuo y que ahora comienza a recuperar el valor que tuvo en tiempos pasados. El ambiente que se vivió en el municipio reforzó esa idea: que la lana no es solo un subproducto del ovino, sino un recurso capaz de generar innovación, identidad y oportunidades.

El alcalde de Arens, Xavi Cortés, lo resumió con claridad desde el principio: acoger la feria había supuesto “un acontecimiento importante para un municipio de 200 habitantes”, y le daba a Arens de Lledó una “oportunidad para dar a conocer los problemas del sector primario”. Esa fue, de hecho, la esencia de la jornada técnica del viernes, organizada íntegramente por el CITA Teruel dentro del proyecto Red AgrifoodTe. Allí se habló de sostenibilidad, de nuevas aplicaciones en agricultura, de la gestión del pastoreo frente al riesgo de incendios y, sobre todo, de la necesidad de encontrar soluciones para que el lavado y la transformación de la lana dejen de ser un obstáculo para quienes trabajan con ella.

El alcalde subrayó que respecto al año anterior se había visto “continuidad, puesto que la mayoría de ponentes han repetido haciendo mención a las experiencias puestas en común en la primera edición”, lo que permitió comprobar la evolución de los proyectos iniciados entonces. La parte técnica del día terminó con una sesión de cocreación para buscar ideas y vías de colaboración, antes de la proyección del documental

La senda del pastor, que llenó la sala y abrió un coloquio en el que público y creadores compartieron reflexiones sobre el oficio, el territorio y los nuevos desafíos para el ovino. En este punto, Cortés quiso reconocer también el trabajo de Mas La Llum, que “llevó la coordinación, en nombre del Ayuntamiento, con CITA y los expositores” y contribuyó a que la jornada discurriera sin fisuras.

 

Durante la jornada del viernes se llevaron a cabo charlas divulgativas sobre los retos del sector. Blanca Abril

Ambiente festivo

Si el viernes sirvió para analizar y debatir, el sábado se convirtió en la cara más popular y festiva de la feria. El pabellón municipal se llenó desde primera hora con talleres participativos, demostraciones de oficios, stands artesanales y actividades para todas las edades, incluida una exposición infantil que atrajo a decenas de familias.

El ambiente fue creciendo hasta la comida popular a base de guisos de cordero, que volvió a ser uno de los momentos más concurridos y en la que vecinos y visitantes compartieron mesa en un gesto que reforzó el espíritu comunitario del evento.

Por la tarde, la música en directo en el Hostal La Sociedad puso punto final a una jornada vibrante. Para el alcalde, el sábado fue “la parte más relevante para el público general, pues se ajusta a lo que entendemos como una feria”. Sin embargo, remarcó que todo se había planteado sin perder el hilo conductor: “Hemos trabajado para que la jornada se enmarcara dentro del objeto de nuestra feria: lana, ovino”.

También reconoció que la feria sí ayuda a reforzar el sector primario y la participación local, pero advirtió de que “si no comprometemos a las administraciones con mayor poder decisivo en cuanto a ayudas para posicionar al sector primario, todo se puede quedar en buenas intenciones”.

Cortés insistió en un mensaje que había sobrevolado toda la programación: la necesidad de dignificar la lana y de dejar atrás la situación que obliga a muchos pastores a pagar por deshacerse de ella.

“Rehabilitación y valoración de la lana buscando utilidades para que no sea considerada como un residuo”, afirmó el alcalde de Arens quien recordó que la feria había contado con expositores que ya ofrecen alternativas en esa línea.

Por su parte, Blanca Abril, técnica de investigación del CITA y coordinadora del proyecto LanaTe, explicó que el evento se centró en abordar las barreras actuales del sector y en plantear soluciones, destacando la importancia de la cooperación.

En esta edición se mostró una selección de diferentes proyectos y entidades relacionados con la agricultura, el uso de la lana y su aplicación como aislante en construcción.

Desde el CITA, indicó, se financiaron estudios sobre distintas viabilidades del lavado de la lana y también se trabajó en la gestión de los inventarios mediante el pastoreo. Sobre la visión del ganadero, Abril destacó la importancia de “cuidar la lana de sus ovejas”, con ejemplos de profesionales llegados incluso desde Castilla-La Mancha. Aun así, reconoció que les hubiera gustado contar con una mayor presencia de ganaderos porque “eran el pilar fundamental”.

Este domingo llega con un cierre más tranquilo pero igualmente ligado a la temática del fin de semana: la Asociación Cultural El Galeró proyecta la película La Oveja Shaun. Granjaguedon en el cine local, una actividad pensada para socios y también abierta a quienes quieran participar adquiriendo el carné por un día.

Así, la II Feria de la Lana de Arens de Lledó cierra una edición que será recordada por reforzar su identidad y su propósito: reivindicar un recurso, defender un oficio y demostrar que la innovación también brota en los pueblos pequeños cuando se trabaja desde la comunidad y con mirada larga.

El redactor recomienda