El Servicio Municipal de Deportes de Alcañiz alcanza su mayor cifra en quince años con más de 3.100 abonados

El Servicio Municipal de Deportes de Alcañiz (SMD) cierra 2025 con el mejor registro de abonados de los últimos quince años. El cuarto trimestre contabiliza 2.225 abonos individuales y 876 familiares, un crecimiento asociado a la diversidad de actividades. Según los datos municipales, la tendencia al alza se mantiene desde hace dos cursos, con incrementos anuales de entre 100 y 200 personas.

El servicio opera actualmente con 131 clases semanales, equivalentes a 165 horas de actividad, distribuidas entre programas de adultos, salud, deportes infantiles y actividades acuáticas. Se han ofertado 2.334 plazas, con 2.006 alumnos inscritos, mientras que la lista de espera asciende a 927 solicitudes. Desde el inicio del curso, el 1 de octubre, se han gestionado 1.300 llamamientos para cubrir vacantes.

Las inversiones realizadas en los últimos dos o tres años (piscina climatizada, rocódromo, accesos, pista de tenis, gimnasio y mejoras continuas en mantenimiento) han elevado la capacidad del servicio, aunque es cierto que en estos momentos faltan espacios para abrir más grupos, una cuestión que se prevé abordar con proyectos como el futuro pabellón del IES Bajo Aragón, la nueva instalación deportiva de la pista roja y la creación de áreas deportivas en zonas urbanas disponibles.
 

Mezcla de perfiles

La programación para adultos continúa siendo uno de los pilares del servicio. Las actividades con soporte musical movilizan a casi 500 personas; las sesiones de condición física reúnen a más de 400; pilates mantiene 261 alumnos; yoga, 142; y los programas de salud dirigidos a mayores completan prácticamente todas sus plazas.

Una de las instructoras que forma parte del SMD, Sofía Alegre, con experiencia en varias disciplinas, describe un cambio evidente en el perfil de usuarios. “Antes era un perfil más mayor o más femenino según la actividad; ahora hay de todo y muy mezclado”. Añadió que el acceso de jóvenes a las actividades ha aumentado de forma visible. “Tengo a gente desde catorce o quince años en clases; eso antes no pasaba”. Además, los motivos de asistencia son diversos. “No todos vienen por estar bien físicamente; algunos entrenan para estar más fuertes y otros bajan para relacionarse y no quedarse en casa”, explicó.

En cuanto a la formación de los instructores, Alegre remarcó que la actualización técnica influye directamente en la calidad de las clases, pero dijo que la capacitación debe ir acompañada de la “capacidad pedagógica de guiar sesiones colectivas”, un aspecto que, según explicó, marca diferencias significativas en la práctica diaria.

Reconoció que la elevada demanda y el sistema de sorteo hacen prácticamente inviable la creación de grupos diferenciados por niveles. En la mayoría de las actividades, la mezcla de alumnos es total y el profesorado debe adaptar las propuestas en tiempo real, ajustando ejercicios, cargas y alternativas en función de lesiones, limitaciones o necesidades específicas de los participantes.

Alegre detalló que en disciplinas como zumba, la ejecución de las coreografías varía en función del público inscrito en cada turno, mientras que en pilates la adaptación se vuelve clave para garantizar que la sesión sea operativa para todos los usuarios.

Jornada de mañana

El servicio cerrará diciembre mañana con una jornada de masterclasses, en la que participarán varios instructores en torno a varias disciplinas. “Daremos clases especiales de zumba y tonificación; habrá también yoga y spinning, y pondremos alguna canción navideña. He dicho a la gente que venga con algún complemento”, dijo Alegre.

A las 17 horas se impartirá la clase de tonificación en el frontón, seguida de la de zumba a las 18 horas en este mismo lugar y a las 19 horas clase de spinning en la sala de las bicicletas.